EL REGRESO DEL ACTOR Alain Touraine
L0S MOVIMIENTOS SOCIALES: ¿OBJETO PARTICULAR , O PROBLEMA CENTRAL DEL ANALISIS SOCIOLOGICO
La sociología, definida generalmente como análisis del funcionamiento del sistema social, ¿puede dejar un lugar para el estudio de los movimientos sociales? ¿0 más bien hace falta intentar reconstruir la sociología alrededor de éste? Tal segunda solución a fue propuesta bajo dos formas mu diferentes! "ara algunos debía renunciarse a la idea de sistema social reconocer #ue todo es cambio #ue los movimientos sociales son los actores del cambio$ para otros, al contrario, debía mantenerse la idea de sistema social, pero reconstruirla a partir de un análisis de los movimientos sociales, del campo cultural donde están ubicados de las formas de institucionali%ación de sus conflictos! &nte todo, debe recha%arse claramente la ilusión empirista' es imposible definir un objeto denominado (movimientos sociales( sin elegir primero un método general de análisis de la vida social, a partir del cual podría constituirse determinada categoría de hechos hechos llama llamados dos movimi movimiento entoss social sociales! es! )*iste )*istenn numero numerosos sos estud estudios ios puram purament entee empíricos sobre conflictos' pero a menudo no se sabe de #ué están hablando realmente, a pesar de la gran calidad descriptiva de muchos de ellos al referirse a acontecimientos particulares bien delimitados! delimitados! +i, por el contrario, nos #uedamos con el enfo#ue de la construcción el análisis de categorías generales, desde el vamos debemos reconocer la e*istencia de por lo menos tres tipos de conflictos orientados hacia la modificación de uno o varios aspectos importantes de la organi%ación social cultural! "ara aclarar el vocabulario propongo lamar conductas colectivas a a#uellas acciones conflictivas #ue pueden ser entendidas como - un esfuer%o de defensa, de reconstrucción o adaptación de un elemento . enfermo del sistema social, trátase de un valor, una norma o de la sociedad misma! )n este sentido, /eil +melser - usó la e*presión collective behaviour ! +i, al revés, los conflictos se anali%an como mecanismos de modificación de decisiones por lo tanto como factores de cambio 1fuer%as políticas en el sentid sentidoo más más ampli amplioo del término2 término2,, propon propongo go hab hablar lar de luchas! "or fin, cuando las acciones conflictivas tratan de transformar las relaciones de dominación social ejercidas sobre los principales recursos culturales 3la producción, el conocimiento, las reglas movimiento social social ! /aturalme ética éticass utili% utili%aré aré la e*p e*pres resión ión movimiento /aturalmente, nte, pued puedee elegirse elegirse otras convenciones de lé*ico' preferí éstas por#ue me parecen más cercanas a los usos actuales! Lo esencial es diferenciar claramente estos tres . modos de construcción de este campo de la realidad observable 3el mismo conflicto puede referirse a uno, dos o tres de estos tipos3 de manera #ue el análisis sociológico no puede reempla%ar a#uí al análisis histórico, el cual abarca el conflicto en su complejidad específica! Las conductas colectivas "ueden anali%arse mejor numerosos conflictos si se los considera como efectos de la descomposición los esfuer%os de reconstrucción de un sistema social amena%ado! "or ejemp ejemplo, lo, alguno algunoss inmigr inmigrant antes es crean crean una una comuni comunidad dad homogé homogénea nea$$ poc pocoo a poc pocoo se diferencia, pues unos se enri#uecen, otros se empobrecen algunos se casan fuera del
grupo' por lo tanto, la comunidad está amena%ada! &parece, entonces, un mesías o un profeta para restablecer las antiguas costumbres, es decir la homogeneidad e integración de la comunidad! )sta dimensión es importante en los movimientos llamados reformistas hasta en las revoluciones como la de lnglaterra en el siglo 45, además de los movimientos mesiánicos o integralistas #ue acabo de evocar! 6e la misma manera, una parte importante de la acción sindical consiste en defender calificaciones remuneraciones 3contra las consecuencias de un cambio técnico, de una modificación del mercado o de una decisión de la empresa! )stos ejemplos muestran #ue el campo de semejantes conductas sigue restringiéndose en sociedades de cambio rápido, altamente diversificadas, por consiguiente cuo grado de homogeneidad e$ integración es más débil #ue en las sociedades llamadas tradicionales! )n las sociedades industriales las acciones colectivas se definen más a menudo por un esfuer%o para dominar el cambio orientar el porvenir ,#ue por una voluntad de conservación o de vuelta al pasado! +in embargo estas actitudes reformadoras e integradoras parecen, desde hace alg7n tiempo, volver a ocupar un lugar importante por el hecho de #ue los valores (modernos( 3cambio, crecimiento, desarrollo3 considerados durante mucho tiempo como intangibles en la misma forma #ue el progreso el movimiento natural de la historia están .'nuevamente cuestionados, especialmente en países dependientes o coloni%ados donde la moderni%ación la industriali%ación, importadas desde ! el e*tranjero, trastornaron la organi%ación social cultural tradicional!! +emejantes movimientos a observables en &sia, &mérica Latina o 8frica $ durante el gran período de e*pansión colonial del siglo 44 se desarrollaron recientemente en forma notable! 9omo ejemplo sirve el é*ito del :homeinismo en rán! )n el mundo comunista también resurgen las con.. ciencias nacionales, mientras #ue en el (primer mundo(, el de los países industriales occidentales, los temas de comunidad e identidad se difunden desencadenan acciones #ue corresponden adecuadamente a lo #ue llamé conductas colectivas! )l significado de las conductas colectivas se encuentra necesariamente, mu lejos de la conciencia de los actores, puesto #ue se define en términos de funcionamiento del sistema social no de representaciones o proectos de los actores 1de la misma manera #ue el suicidio en el análisis dur:heimiano! "or eso las conductas colectivas son heterónomas, orientadas por restricciones económicas o políticas e*ternas, o más . a7n impulsadas por un jefe #ue encabe%a una secta o movimiento integrista, #uien se identifica con el orden a restablecer! Las luchas &sí, la referencia a la sociedad al orden social tiende cada ve% más, en nuestros países, a definir no tanto acciones vinculadas con el cambio, sino más bien acciones #ue lo combaten en nombre de un orden antiguo o nuevo! )sto nos lleva mu lejos de lo #ue llamamos espontáneamente (movimiento( ! "or consiguiente, la tendencia natural de los participantes observadores de los conflictos sociales en las sociedades industriales .es insistir, por el contrario, en considerar a estos conflictos como mecanismos de cambio! "ero esta definición a no tiene el mismo sentido #ue en el siglo pasado, cuando el movimiento obrero era el actor de los conflictos más importantes parecía representar valores nuevos 3a#uellos del progreso e industriali%ación3- al mismo tiempo #ue luchaba contra sus formas sociales de apropiación!
&ctualmente se cuestiona ese rol central de un movimiento social como agente principal de transformaciones históricas! /o se visuali%a con claridad lo #ue unifica a estos m7ltiples conflictos, #ue no se refieren a valores centrales ni luchan contra un poder dominante, sí tratan 7nicamente de transformar algunas relaciones de fuer%a o mecanismos específicos de decisión! )n este caso, es evidente #ue los agentes de cambio no pueden definirse de manera global en nombre de alg7n (sentido de la ;istoria( ! Tanto más #ue dentro del mundo laboral, en la vida urbana se comprueba ese pasaje de los movimientos sociales centrales hacia luchas específicas! /umerosos estudios reali%ados sobre las luchas urbanas contemporáneas demuestran #ue, en la maoría de los casos, se trata de acciones limitadas, dirigidas contra propietarios o autoridades administrativas, para conseguir mejores condiciones de alojamiento! &un un creciente n7mero de luchas urbanas tienden a acercarse a lo #ue llamamos a#uí conductas colectivas, al defender un medio amena%ado! "or ejemplo, las luchas 3victoriosas3 reali%adas en
el contrario, en reformas institucionales #ue se manifiesta cotidianamente en la forma de organi%ación social cultural en las relaciones de autoridad! =n movimiento social es una acción conflictiva mediante la cual se transforman las orientaciones culturales un campo de historicidad en formas de organi%ación social, definidas a a ve% por normas culturales generales por relaciones de dominación social! )l debilitamiento cada ve% más rápido de la noción de sociedad de la sociología clásica nos obliga a elegir entre dos caminos' por un lado una sociología de puro cambio en la cual ocupa un lugar importante la noción de lucha$ por otro, una sociología de la acción basada en nociones de modelos culturales movimientos sociales! >ran parte de los debates generales de la sociología puede encararse como competencia, conflicto o compromiso entre estas tres orientaciones! La sociología clásica nació en países 3>ran reta@a, &lemania, )stados =nidos, Arancia3 #ue constituían .conjuntos políticos económicos culturales tan diferentes #ue se podía hablar no sólo de sociedades sino también de actores sociales 1sindicatos o empresariado por ejemplo2 definidos nacionalmente! Ba no es la situación actual' numerosos actores sociales defienden sus intereses en mercados, campos de competencia de conflictos definidos sobre todo por una tecnología, una countura económica, conflictos estratégicos, corrientes intelectuales de acción internacional, no tanto por una realidad nacional global! ;o, ning7n movimiento social puede identificarse con el conjunto de conflictos fuer%as del cambio social en una sociedad nacional! 6e tal manera, el campo de luchas se vuelve cada ve% más autónomo3 3tendencia #ue podría volcarse en otras situaciones sociales3 relacionado con la acción de movimientos sociales, las conductas colectivas tienden cada ve% más a transformarse en lo #ue llamé antimovimientos sociales. La disociación entre el modo de desarrollo económico las formas de funcionamiento de los sistemas económicos sociales en a maor parte del planeta, en efecto, provocó una reaparición masiva de conflictos sociales acciones colectivas sustentados en nombre de la integración social cultural de una comunidad! )sta fuerte disociación de los! movimientos socioales, de las luchas conductas colectivas protege a la sociología, centrada en el análisis de los movimientos sociales, del peligro de transformarse en filosofía de la historia! /o sólo a no es posible ubicar el análisis sociológico dentro de la representación evolucionista #ue llevaba de lo tradicional a lo moderno de la solidaridad mecánica a la solidaridad orgánica de la comunidad a la sociedad, sino #ue, además, la desaparición de la he hegemonía de los países capitalistas centrales sobre el conjunto mundial no permite identificar su historicidad sus propios movimientos sociales con una ;istoria universal cuas etapas debieran ser recorridas necesariamente por todos los países! "or consiguiente, debemos romper con la idea clásica #ue identificaba la creatividad humana con sus obras, la historicidad definida como ra%on progreso, con el dominio de la naturale%a por la ciencia la técnica! B como corolario, reintroducir en el análisis sociológico otra concepción del sujeto, colocando el acento sobre la distancia entre la creación las obras, entre la conciencia las prácticas! "ues si bien es cierto #ue los modelos culturales se transforman en prácticas sociales a través de conflictos entre movimientos sociales opuestos, también es necesario #ue, se desprendan de estas practicas para constituirse como modelos de inversiones creaciones de normas, lo #ue supone refle*ión, distanciamiento , retomando esta palabra tan arraigada en la tradición cultural de Cccidente, conciencia. )n determinadas épocas el pensamiento social insiste más dentro de la historicidad, sobre la inversión económica la producción de conocimiento$ en otros momentos se muestra más receptivo para la creación la transformación de modelos éticos, lo #ue
tiende a otorgar maor importancia al distanciamiento #ue a la inversión! & decir verdad ambos movimientos se complementan sería tan peligroso caer en la filosofía moral como en la filosofía de la historia! La noción de movimiento social es inseparable de la de clase! )l movimiento social se opone a la clase por#ue ésta puede definirse como una situación, mientras #ue el movimiento social es una acción, la del sujeto, es decir del actor #ue cuestiona la formali%ación social de la historicidad! 6urante demasiado tempo el estudio del movimiento obrero se redujo al del capitalismo, sus crisis su countura! )n grado más e*tremo a7n los estudios sobre movimientos sociales nacionales en el Tercer
Los movimientos sociales no #uedan nunca aislados de los demás tipos de conflictos! )l movimiento obrero, #ue cuestiona el poder social de los due@os de la industria, es inseparable de las reivindicaciones presiones destinadas a aumentar la influencia de los sindicatos en las decisiones económicas, sociales políticas! "ero lo #ue indica su e*istencia es presencia de elementos no negociables en las concertaciones, en con3 secuencia la imposibilidad para un sindicato, e*ponente del movimiento obrero de llevar a cabo una acción puramente instrumental en lo #ue concierne a costos ventajas! Lo #ue se llamó sindicalismo de mercado no pertenece al movimiento obrero, de donde, como contragolpe, el desarrollo de conductas de ruptura' huelgas ilegales, ausentismo, merma acentuada de las tareas, actos de violencia o de sabotaje #ue traducen la presencia reprimida del movimiento obrero en un sindicalismo de mercado, o cuas reivindicaciones están mu fuertemente institucionali%adas! )sta observación puede ser ampliada! Lo propio de la democracia representativa es la dependencia de los actores políticos con respecto a los actores sociales a #uienes representan, al mismo tiempo #ue conservan maor o menor autonomía, de esta manera act7an, simultáneamente, en función de su posición en sistemas de decisión como mandatarios de grupos de interés o de movimientos! La opinión percibe con ironía este fenómeno cuando pone en evidencia el doble discurso de los diputados, seg7n hablen en sus circunscripciones electorales o en las sesiones de comisión del "arlamento! &si un debate político puede ser al mismo tiempo, lo #ue llamo lucha traducir un movimiento social! 6e igual modo, el funcionamiento de una organi%ación no puede anali%arse 7nicamente en términos de relaciones de autoridad! Las decisiones tomadas por los ejecutivos se e*plican también por las políticas de los dirigentes de empresas o de los due@os$ el comportamiento de los obreros o empleados en sus talleres u oficinas está ampliamente influido por su representación de un conflicto general de intereses #ue supera al marco de su e*istencia profesional!
)stamos demasiado acostumbrados a hablar del pasaje de la clase (en sí( a la clase (para síE , de la situación soportada a la conciencia #ue se forma con el traslado a la acción política! )n realidad no e*iste clase (en sí(, no e*iste clase sin conciencia de clase! "or otro lado, lo #ue conviene diferenciar es la conciencia social de clase 3es decir, un movimiento social siempre presente aun#ue sea de manera difusa, al haber conflicto sobre la apropiación social de los principales recursos culturales3 la conciencia política, la cual asegura la traducción del movimiento social en acción política! =n acto dirigido contra una dominación social no se reduce nunca a una estrategia con respecto al poder político! La definición brindada hasta a#uí de los movimientos sociales los presenta como agentes de los conflictos estructurales de un sistema social! ¿"ero acaso no encontramos movimientos sociales en el nivel mismo de los modelos culturales no en su utili%ación social? "or otra parte, ¿el análisis de los movimientos sociales debe limitarse a una perspectiva sincrónica o puede e*tenderse hasta el terreno del cambio? La innovación cultural 3o la resistencia a ésta3 no puede constituir por sí misma un movimiento social, pues este por definición combina la referencia a un campo cultural con la conciencia de una relación social de dominación! "ero un conflicto cultural puede abarcar una dimensión social, en 7ltima instancia siempre la abarca' no e*iste modelo cultural en sí, enteramente independiente del modo de dominación ejercido sobre él! )ntre el puro conflicto cultural, por ejemplo en el interior de una comunidad científica o artística, la e*presión cultural de un conflicto directamente social se delimita un campo ocupado por movimientos culturales definidos a la ve% por su oposición a un modelo cultural, antiguo o nuevo, !por un conflicto interno entre dos modos de utili%ación social del nuevo modelo cultural! )l movimiento cultural más importante actualmente es el de la mujer! "or un lado, se opone a la condición femenina tradicional, por eso mismo transforma nuestra imagen del sujeto$ por otro, se divide en dos tendencias #ue representan en los hechos fuer%as sociales opuestas! =na tendencia liberal, #ue lucha por la igualdad atrae a categorías sociales altas 1es más interesante reclamar el acceso al ejercicio de la medicina o al "arlamento #ue a tareas no calificadas2$ una tendencia radical #ue lucha por la especificidad más #ue por la igualdad desconfiando de esta 7l tima, hasta de sus trampas, combate una dominación a la ve% social se*ual, a sea ligando su accionar al del proletariado, denunciando la dominación netamente se*ual, o finalmente oponiendo una concepción relacional de la vida social, más pró*ima a la e*periencia biopsí#uica de la mujer #ue a una concepción tecnocrática de origen masculino! Los movimientos culturales resultan importantes, sobre todo al comien%o de un nuevo período histórico, cuando los actores políticos no son todavía representantes de demandas movimientos sociales nuevos cuando, por otra parte, la transformación del campo cultural abre debates fundamentales sobre la ciencia, la inversión económica o las costumbres! &l lado de movimientos sociales, en sentido restringido del término, de movimientos culturales, o más e*actamente socioculturales, debemos aceptar también la e*istencia de movimientos sociohistóricos! )stos 7ltimos no se ubican en el interior de un campo de historicidad, como los movimientos sociales, sino en el pasaje de un tipo de sociedad a otro 1pasaje del cual la industriali%ación es históricamente la forma más importante2! uí el elemento nuevo consiste en #ue el conflicto se organi%a alrededor de la gestión del desarrollo , en consecuencia, el actor dominante no es una clase dirigente, definida por su rol en un modo de producción sino una élite dirigente, es decir un grupo #ue conduce el desarrollo el cambio histórico se define en primer lugar por la dirección del Estado!
=n movimiento sociohistórico puede estar a asociado con el )stado industriali%ador, a opuesto a él! Los campos enfrentados tienen - en com7n el desarrollo la moderni%ación, pero uno desea refor%ar la capacidad de inversión movili%ación del )stado, cual#uiera sea, mientras #ue su adversario recurre a la /ación la participación popular! )*iste cierto parentesco entre estos tres tipos de movimientos, lo #ue da pie a #ue algunos, colocándose en una tradición revolucionaria, afirmen la unidad fundamental del movimiento obrero, de los movimientos de liberación nacional del movimiento de liberación de la mujer! +in embargo, más importante es subraar las profundas diferencias #ue los separan les impiden unirse! &sí, en el Tercer
(sociedad unidimensional( ! La influencia creciente de la sociedad sobre sí misma lleva en lugar de ampliar el espacio publico, a hacerlo desaparecer al otorgar al poder central los medios para intervenir en todos los aspectos de la vida cultural de la personalidad individual! )s cierto #ue, por otro lado, a la intensa actividad de protesta de la década del sesenta sucedió un debilitamiento duradero de los movimientos sociales! )stas concepciones pesimistas tuvieron tanto más influencia en cuanto a #ue los estudios sobre la ense@an%a o el trabajo social demuestraron su impotencia para luchar contra las desigualdades sociales hasta ,su tendencia a refor%arlas con mecanismos de selección! 6e tal forma la sociología de los movimientos sociales choca ho no tanto con la sociología de las nstituciones del sistema social 3debilitada por las crisis culturales sociales sino mas bien con determinada sociología de los aparatos ideológicos del )stado, de donde surge la importancia de hacer penetrar la sociología de los movimientos sociales dentro de ese territorio aparentemente hostil! +ubraemos, ante todo, la posibilidad actual de destacar las limitaciones de las tesis #ue presentan la escuela o el trabajo social como instituciones incapaces de modificar sensiblemente las desigualdades sociales lo #ue lleva implícito #ue docentes o educadores no pueden en manera alguna ser realmente actores! & estas a afirmaciones perentorias pueden o oponerse muchas investigaciones, G de las cuales surge claramente #ue la desigualdad se da de entrada sólo en forma parcial luego se desarrolla en el seno del sistema escolar impulsada por este 7ltimo! 9onviene sustituir la responsabilidad impersonal del (sistema( con la responsabilidad individual colectiva de los docentes! Todo lo #ue permita limitar la formalidad escolar en provecho de un aprendi%aje activo donde el ni@o no sea solamente un escolar sino un individuo aceptado con su pluralidad de roles 1incluida su ubicación en clase2, contribue a reducir la desigualdad de oportunidades H! )n segundo lugar el orden no reina nunca de manera absoluta! +e habla de control ideológico, de manipulación, de alineación, pero lo #ue, ante todo e*iste, en realidad, es la represión física, la violencia la revuelta, reducidas en formas degradadas! Lo mismo #ue el silencio no reina nunca totalmente en el mundo de la esclavitud o en los campos de concentración, pues siempre subsiste cierta resistencia como corolario una represión directa, detrás de la apariencia del orden sobreviven siempre relaciones sociales de dominación protesta! I 9f! Joger >irod, "oliti#ues de .)ducat-on, "!=!A!, K! H )ste tema fue desarrollado por Mean Aoucambert' )volution comparative de #uatre tpes d.organrsation N l.école élémentaire, /J6", KOO3KOK!
/o hace mucho tuvimos una e*cepcional demostración #ue despeda%ó la idea, demasiado fácilmente aceptada, seg7n la cual los regímenes totalitarios tienen la capacidad de estabili%arse al punto de reducir a la impotencia o completa marginación toda oposición! "olonia, casi de un día para otro, vio desmoronarse el orden oficial renacer la vida social, cual Lá%aro saliendo del sepulcro! )n pocas semanas actores, debates, conflictos negociaciones surgieron de todas partes' prueba de la impotencia del régimen, si no le #uedara el recurso de la violencia del )stado! 6el mismo modo, en otro países !aparentemente silenciosos un debilitamiento o una crisis del sistema represivo pueden liberar una vida social a7n viva, a pesar de las persecuciones del reino de las (bocas amorda%adas(! ¿/o es, acaso, notable verla resurgir en lugares donde parecía aplastada, en rasil hasta en 9hile, en "olonia, Jumania hasta en 9hina? Lo más conmovedor en la obra de +olenitsn no es tanto la descripción del
horror de los >ulag 1#ue por otra parte a se conocía2 sino la e*teriori%ación de las voces #ue la e*terminación no pudo reducir al silencio! +i consideramos los análisis reali%ados en términos de crisis, vemos #ue captan más adecuadamente la idea de movimiento social #ue a#uellos basados en la noción de orden! Tomemos un ejemplo mu actual, el de los efectos sociales del desempleo! Los numerosos estudios dedicados a este tema tienden sobre todo a hablar sólo de anomia marginalidad! )videntemente, era mu difícil en la década del treinta conformarse con hablar de los efectos psicológicos de la desocupación la marginación, mientras )stados =nidos asistía a marchas del hambre en )uropa los movimientos fascistas se alimentaban con los desocupados! Jemontémonos más atrás en el pasado! ¿)ra posible en el siglo 44 separar completamente las llamadas, en a#uel momento, (clases peligrosas( de las (clases trabajadoras(? <ás cerca de nosotros, ¿se podía hace pocos a@os, en Ca:land, considerar al pe#ue@o grupo de los lac: "anthers solamente como una pandilla de jóvenes negros marginales? Lo mismo, ho, ¿los jóvenes inmigrantes de Les
9onsideremos, por 7ltimo, las conductas relacionada con el cambio, pues parecen tan cercanas a los movimientos sociales #ue muchas veces se las confunde con éstos! uí hemos subraado nítidamente la distancia #ue los separa$ en efecto, el espacio del cambio social tiene dos pendientes' por un lado remite a las relaciones sociales a los efectos dé institucionali%ación de los conflictos, por consiguiente de las reformas$ por otro conduce hacia el desarrollo, es decir hacia el pasaje de un campo cultural social a otro! )sta necesaria descomposición de un conjunto artificialmente constituido permite la penetración de la sociología de los movimientos sociales en esta área de la vida social! =na noción importante, pues es utili%able en todos esos casos, es la de refuerzo! Las conductas observables pueden e*plicarse, por cierto, como respuestas a la integración o e*clusión, a la crisis o al cambio, pero semejantes e*plicaciones dejan siempre de lado un residuo importante #ue sólo puede anali%arse como conjunto de efectos indirectos, sea de la formación, sea, por el contrario, de la ausencia de movimientos sociales! &llí donde no se forma el conflicto reinan la unidad ficticia del orden también la violencia o el retraimiento! )sta noción de esfuer%o tiene la ventaja de respetar la autonomía de los modos de análisis #ue corresponden más directamente a determinada área o a otra de la vida social, manteniendo al mismo tiempo la e*istencia de principios generales de análisis! &greguemos #ue, al hablar de refuer%o, no #ueremos de ninguna manera afirmar #ue la e*plicación en términos de movimientos sociales da cuenta, mejor #ue otras, de toda la realidad histórica! )l debilitamiento de muchos conflictos recientes, en particular de la corriente ecológica, prueba al contrario su débil carga como movimiento social la presencia dominante, en su seno, de otros tipos de conductas! Jecono%camos también #ue, seg7n las perspectivas objetivos de cada uno, es posible organi%ar el conjunto del análisis sociológico alrededor de tal o cual enfo#ue general!
6e tal modo, cuanto más se ubica uno en una perspectiva sociológica aplicada 1por ejemplo para preparar una política social2, tanto más fecundo es el análisis en términos de sistema social, de integración crisis$ a la inversa, cuando se trata de anali%ar vastos complejos conjuntos sociales determinar la naturale%a de las fuer%as sociales capaces de transformarlos, las nociones de historicidad movimiento social deben ocu3 par el lugar central! /umerosos son #uienes estiman nuestra sociedad como incapa% de producir nuevos movimientos sociales' a por#ue éstos serían absorbidos por el irresistible ascenso de los estados administradores, a por#ue una sociedad enri#uecida sería capa% de absorber todas las tensiones, a finalmente por#ue los movimientos sociales, al ser producto de sociedades de acumulación con cambio rápido, no tienen cabida si volvemos a so3 ciedades e#uilibradas! Tratar, por el contrario, de entender los nuevos movimientos sociales es defender otra representación de nuestra sociedad de su porvenir! +eg7n esta representación entramos en un nuevo modo de producción, el cual al originar nuevos conflictos engendrará nuevos movimientos sociales, e*tendiendo diversificando el espacio p7blico #ui%ás también dará a lu% formas de dominación control social más profundas con maor capacidad de manipulación!