DESCRIPCIÓN Y COMPONENTES DE UN PUENTE GRUA Los puente grúas son aparatos destinados al transporte de materiales y cargas en desplazamientos verticales y horizontales en el interior y exterior de industrias o depósitos. Generalmente consta de una o dos vigas móviles sobre carriles, apoyadas en columnas, consolas, a lo largo de dos paredes opuestas de un edificio rectangular. El bastidor del puente grúa consta de dos vigas transversales en dirección a la luz de la nave (vigas principales) y de uno o dos pares de vigas laterales (testeros), longitudinales en dirección a la nave y que sirven de sujeción a las primeras y en donde van las ruedas. Desde el punto de vista de seguridad se consideran tres partes diferenciadas: El puente: se desplaza a lo largo de la nave. El carro: se desplaza sobre el puente y recorre el ancho de la nave. El gancho: va va sujeto del carro mediante el cable principal, realizando los movimientos de subida y bajada de las
cargas.
En el siguiente dibujo se muestra los componentes fundamentales de un puente grúa:
VERIFICACIONES ANTES DE EMPEZAR A TRABAJAR Antes de comenzar la jornada de trabajo, se debe: Comprobar que no existen sobre la grúa piezas sueltas u objetos que pudieran caerse. c aerse. Asegurarse de que todos los interruptores interruptores de mando estén en posición "cero", antes de conectar el el interruptor general. De no ser así, podría ponerse pon erse en marcha alguno de los movimientos de la grúa, con graves consecuencias en muchos casos. Realizar un frenado de prueba de todos los movimientos de la grúa. Comprobar el buen funcionamiento de todos los dispositivos de seguridad como topes, finales fin ales de carrera, realizando muy lentamente las maniobras de prueba. Comprobar el estado de los cables y los ganchos.
Cualquier anomalía en el funcionamiento de la grúa, debe ser puesta en conocimiento del superior más inmediato. Si se presentan defectos o anomalías que pusieran en peligro la seguridad de la grúa, deberá interrumpirse el trabajo de la misma. Está prohibido modificar o anular cualquiera de los dispositivos de seguridad con que está dotada la grúa. Trimestralmente, al menos, se realizará una revisió n a fondo de los cables, cadenas, cuerdas, poleas, frenos y de los controles eléctricos y sistemas de mando, así como, en general, de todos los elementos de los aparatos de izar
Objetivo Sintetizar el uso, funciones y composición de la máquina. Estructurar sus riesgos, facilitando su conocimiento y formas de prevención.
La máquina Dada la relativa ambigüedad del término puente-grúa, puente -grúa, se hace necesaria una definición-descripción definición -descripción previa del concepto que aquí consideraremos:
Los puentes-grúa son máquinas utilizadas para la elevación y transporte, en el ámbito de su campo de acción, de materiales generalmente en procesos de almacenamiento o curso de fabricación. La máquina propiamente dicha (Fig. 1) está compuesta generalmente por una doble estructura rematada en dos testeros automotores sincronizados dotados de ruedas con doble pestaña para su encarrilamiento. Apoyado en dicha estructura y con capacidad para discurrir encarrilado encarrilado a lo largo de la misma, un un carro automotor soporta un polipasto cuyo cableado de i zamiento se descuelga entre ambas partes de la estructura (también puede ser mono-raíl con estructura simple). La combinación de movimientos de estructura y carro permite actuar sobre cualquier punto de una superficie delimitada por la longitud de los raíles por los que se desplazan los testeros y por la separación entre ellos.
Fig. 1: Puente-Grúa. Componentes
Cualquier anomalía en el funcionamiento de la grúa, debe ser puesta en conocimiento del superior más inmediato. Si se presentan defectos o anomalías que pusieran en peligro la seguridad de la grúa, deberá interrumpirse el trabajo de la misma. Está prohibido modificar o anular cualquiera de los dispositivos de seguridad con que está dotada la grúa. Trimestralmente, al menos, se realizará una revisió n a fondo de los cables, cadenas, cuerdas, poleas, frenos y de los controles eléctricos y sistemas de mando, así como, en general, de todos los elementos de los aparatos de izar
Objetivo Sintetizar el uso, funciones y composición de la máquina. Estructurar sus riesgos, facilitando su conocimiento y formas de prevención.
La máquina Dada la relativa ambigüedad del término puente-grúa, puente -grúa, se hace necesaria una definición-descripción definición -descripción previa del concepto que aquí consideraremos:
Los puentes-grúa son máquinas utilizadas para la elevación y transporte, en el ámbito de su campo de acción, de materiales generalmente en procesos de almacenamiento o curso de fabricación. La máquina propiamente dicha (Fig. 1) está compuesta generalmente por una doble estructura rematada en dos testeros automotores sincronizados dotados de ruedas con doble pestaña para su encarrilamiento. Apoyado en dicha estructura y con capacidad para discurrir encarrilado encarrilado a lo largo de la misma, un un carro automotor soporta un polipasto cuyo cableado de i zamiento se descuelga entre ambas partes de la estructura (también puede ser mono-raíl con estructura simple). La combinación de movimientos de estructura y carro permite actuar sobre cualquier punto de una superficie delimitada por la longitud de los raíles por los que se desplazan los testeros y por la separación entre ellos.
Fig. 1: Puente-Grúa. Componentes
· A diferencia de las grúas-pórtico, los raíles de desplazamiento están aproximadamente en el mismo plano horizontal que el carro y su altura determina la altura máxima operativa de la máquina. (Fig. 2)
Fig. 2: Nave del puente. Vista general · La elevación de los carriles implica la existencia de una estructura para su sustentación. En máquinas al aire libre la estructura es siempre específica para este fin; en las de interior puede ser aledaña o incorporada a la de la propia nave atendida por la máquina. (Fig. 3)
Figura 3 · El manejo de la máquina puede hacerse desde una cabina añadida a la misma y sita generalmente sobre uno de sus testeros; o bien, lo que cada vez es más frecuente en máquinas sin ciclo operacional definido, por medio de mando a distancia con cable, activado desde las proximidades del punto de operación
Riesgos Un riesgo fundamental específico debe ser prioritariamente considerado: El desplome de objetos pesados. Cabe incluir en este riesgo básico el desplome de las cargas, el de elementos de la máquinas, el de la propia máquina o de sus estructuras de sustentación, etc. A este debe añadirse otro riesgo específico: golpes por objetos móviles; considerando también que éstos pueden pueden ser las propias cargas, partes de las máquinas o sus accesorios, la máquina, etc.
A estos riesgos estará sometido todo el personal que opere en el entorno de acción acción del aparato. Otros riesgos, no específicos, afectarán únicamente a los operadores: atrapamientos, caídas desde alturas, contactos eléctricos, stress, inhalación de productos tóxicos (la cabina en ciertos casos se desplaza sobre las zonas de producción), etc. Se presenta seguidamente la exposición, no de un análisis detallado de las condiciones peligrosas que pueden actualizar estos riesgos, sino un resumen estructurado de las normas y consideraciones previas necesarias para eludir la aparición de dichas circunstancias en función de su origen último.
Diseño y construcción Por un planteamiento básico de Seguridad Integrada, una máquina debe co ncebirse desde el principio para que ningún accidente sobrevenga durante su utilización; sus dispositivos de seguridad estarán integrados desde tu concepción, no añadidos después. Desde esta clara filosofía se conciben las reglas de cálculo de la F.E.M. (Federación Europea de la Manutención) y a su vez tomando como base sus especificaciones, se elaboran las normas nacionales de Cálculo y Seguridad. En la Tabla 1 se relacionan las principales normas UNE de aplicación al caso.
Tabla 1: Principales normas UNE aplicables a los puentes-grúa
Montaje Puede dividirse la operación en dos capítulos diferentes: Montaje de las vías de rodadura, su soporte y sus cimentaciones Montaje de la propia máquina Montaje de las vías de rodadura, su soporte y sus cimentaciones Lo realizará generalmente la empresa receptora de la máquina siguiendo estrictamente las indicaciones que al respecto le haga el constructor. Este, a tal fin, teniendo en cuenta las normas y cálculos necesarios, adjuntará a sus instrucciones o por entrega previa a las mismas las especificaciones técnicas concretas que deban cumplir las vías y su sustentación (Fig. 4).
Montaje de la propia máquina Evidentemente posterior, será realizado por el constructor o concesionario autorizado. Es trascendente aquí el trabajo propio de los montadores, en cuya formación debe contemplarse:
Selección previa de individuos capacitados. Formación inicial adecuada. Reciclajes periódicos.
Es importante la consideración del último apartado ya que e montador, como todo trabajador, tenderá con la rutina cotidiana a no tratar como origen de peligro trabajos que para él son hábito.
Utilización La figura clave de la seguridad durante la utilización de la máquina es evidentemente el gruista o conductor; debe cumplir unas determinadas condiciones profesiográficas: Defectos físicos o psíquicos incapacitantes.
Limitación excesiva de la capacidad visual. Limitación excesiva de la capacidad auditiva. Vértigo. Enfermedades cardiorespiratorias. Alta puntuación en escalas de paranoia, depresión, etc.
Condiciones físicas o psíquicas determinantes.
Rapidez de decisión. Coordinación muscular. Reflejos. Aptitud de equilibrio. Normalidad de miembros. Agudeza visual, percepción de relieve y color. Edad (superior a 20 años)
Asimismo debe ser capacitado para maniobrar la grúa con seguridad mediante una instrucción teórico-práctica adecuada que debe además reforzarse cada uno o dos años (reciclaje). Respecto al uso de un aparato concreto, el conductor debe conocerla documentación que le acompañará y que según UNE 59-105-76 estará compuesta por:
El manual de consignas de explotación. Las normas de conducción del aparato. El mantenimiento del mismo (en lo que a él ataña)
No obstante indicamos a continuación algunas Normas básicas de seguridad para el conductor:
Levantar siempre verticalmente las cargas. Si la carga, después de izada, se comprueba que no está correctamente situada, debe volver a bajarse despacio. Si la carga es peligrosa se avisará la operación con tiempo suficiente.No debe abandonarse el mando de la máquina mientras penda una carga del gancho. Debe observarse la carga durante la traslación.
Se debe evitar que la carga sobrevuele a personas. No debe permitirse a otras personas viajar sobre el gancho, eslingas o cargas. Cuando se trabaje sin carga se elevará el gancho para librar personas y objetos. No operar la grúa si no se está en perfectas condiciones físicas. Avisar en caso de enfermedad.
Respecto al mantenimiento, la participación del gruista puede resumirse en:
Revisión diaria visual de elementos sometidos a esfuerzo. Comprobación diaria de los frenos. Observación diaria de carencia de anormalidades en el funcionamiento de la máquina. Comprobación semanal del funcionamiento del pestillo de seguridad del gancho.
Mantenimiento preventivo Como ya se ha indicado, según UNE 59-105-76, el constructor debe proporcionar las instrucciones de mantenimiento del aparato a la entrega del mismo. En la Tabla 2 se recogen las operaciones esenciales de Mantenimiento Preventivo que, en todo caso, deben realizarse por personal especializado.
Tabla 2: Operaciones esenciales para el Mantenimiento Preventivo de un puente-grúa
Figura 5: Testero
Fig. 6: Carro y estructura doble. Vista inferior
Fig. 7: Gancho y eslingas
Reformas Si la máquina ha superado su período de vida útil, las piezas solicitadas de esfuerzos han disminuido su resistencia por fatiga. La única reforma segura es la sustitución de todas las piezas sometidas a fatiga con máxima solicitación de servicio, cualquiera que sea su aspecto exterior.
Protecciones personales Únicamente en el caso de que se maneje la máquina desde el suelo por medio de mando a distancia, implica por sí mismo el uso de una prenda de protección personal: El Caso de Seguridad (M.T.1). Otras prendas podrían ser necesarias, pero no ya derivadas de los riesgos propios de la máquina hacia su maquinista, sino de otros coexistentes en cada entorno laboral concreto. Todas las prendas han de ser homologadas según O.M. de 17.5.74 (B.O.E. nº 128 de 9.5.74)
Legislación afectada De la vigente Ordenanza General de Seguridad e Higiene en el Trabajo (O.M. 9-3-71) se consideran específicamente afectados los puntos siguientes: Capítulo I - Edificios y locales
Art. 17. Escaleras fijas y de servicio. Art. 18. Escalas fijas de servicio. Art. 20. Plataformas de trabajo. Art. 21. Aberturas en pisos. Art. 22. Aberturas en paredes. Art. 23. Barandillas y plintos
Capítulo VI - Electricidad Capítulo X - Elevación y transporte
Art. 100. Construcción de los aparatos y mecanismos Art. 101. Carga máxima. Art. 102. Manipulación de las cargas. Art. 103. Revisión y Mantenimiento. Art. 104. Frenos. Art. 105. Sistema eléctrico. Art. 107. Grúas, Normas generales. Art. 108. Grúas-puente. Art. 111. Aparejos de izar: cadenas. Art. 112. Cables. Art. 113. Cuerdas Art. 114. Poleas. Art. 115. Ganchos.
Asimismo se ve afectado el Decreto del 26 de julio de 1957 (BOE de 26 de agosto) que incluye el Reglamento de trabajos prohibidos a mujeres y menores por peligrosos e insalubres.
Puente Grúas - Mantenimiento y conservación del equipo
CONSERVACIÓN Y ALMACENAJE DE LOS ELEMENTOS DE AMARRE Y FUERZA Después de terminada una maniobra, no se dejarán abandonados los elementos de amarre, como eslingas, estrobos, mordazas, pórticos, etc. Una vez utilizado el elemento de amarre, se deberá colocar éste en su lugar de almacenamiento y bajo ningún pretexto se dejará abandonado en el suelo. El almacenaje de los elementos de amarre se realizará en lugares secos, al abrigo de la intemperie y de forma que no estén en contacto con el suelo, suspendiéndolos sobre soportes de madera de perfil redondeado o depositándolo sobre estacas o paletas. Deberá cuidarse asimismo que estén alejados de productos corrosivos. Los elementos de amarre y de fuerza deben ser examinados periódicamente por una persona competente, retirando las que no estén en condiciones. LOS ESTROBADORES DAÑADOS NO DEBEN GUARDARSE NUNCA COMO UN ELEMENTO DE ELVACIÓN, ya que entonces puede quedar sin ser reconocido. Los elementos de amarre no se arrastrarán por el suelo, sobre superficies ásperas, o por donde puede entrar en contacto con arena, barro, óxido, productos corrosivos o cualquier otra sustancia que pudiera afectarles.
Deberá evitarse que la arena penetre entre los cordones de los cables, y si se mancharan de barro, se limpiaran con petróleo y se engrasarán, antes de ponerlos de nuevo en servicio. Se inspeccionará periódicamente el estado de los cables, poniendo en conocimiento del inmediato superior, la existencia de hilos rotos, dobleces, oxidación, aplastamiento o cualquier otra anomalía que pudiera poner en peligro la seguridad. Toda cadena estirada o que presente un eslabón deformado, gastado o con grietas u otro defecto, deberá ser retirada del servicio.
LIMPIEZA Y CONSERVACION El maquinista dedicará un tiempo prudencial, cada semana por ejemplo, a la revisión del estado general de su máquina y a la limpieza de la misma. El equipo solo se podrá inspeccionar, engrasar o limpiar, estando parada. Durante las revisiones, engrases, etc., se colocará el cartel de "Máquina averiada"o de "Peligro hombres trabajando". Después de cualquier operación de engrase, el gruíst a inspeccionará y limpiará de grasa o aceite todas las superficies sobre las que se hayan podido verter estos productos.
Las pruebas de la grúa, después de una reparación, las efectuará el maquinista, después de haber comprobado que las personas del equipo de mantenimiento se encuentran en un lugar seguro.
Puente Grúas - Códigos de señales de maniobra
Para evitar confusiones entre el gruísta y el que dirige la maniobra, es preciso usar siempre señales de mando. A continuación se indican las principales señales utilizadas:
ATENCIÓN
SUBIR
SUBIR LENTAMENTE
BAJAR
BAJAR LENTAMENTE
DESPLAZAMIENTO HORIZONTAL
DESPLAZAMIENTO HORIZONTAL LENTO
PARADA
PARADA URGENTE
FIN DE MANIOBRA
Puente Grúas - Movimiento de las cargas
ENGANCHE DE LAS CARGAS Para no sobrepasar la capacidad de carga de la grúa y poder elegir adecuadamente los elementos de amarre, se debe conocer el peso de cada carga. Si el peso no viene indicado en la misma carga, solicitará este dato de su inmediato superior. No se utilizará nunca un elemento de amarre o de fuerza sin conocer la carga que es capaz de soportar. Es muy conveniente tenerlos marcados. Cuando se usen eslingas de ramales múltiples, ha de tenerse en cuenta que a medida que aumenta el ángulo de apertura de los ramales, disminuye la resistencia de la eslinga. Deberán por lo tanto elegirse eslingas de suficiente longitud, con objeto de evitar ángulos amplios entre los ramales. Se deberá tratar de cargar por igual todos los ramales de las eslingas. Si las cargas o piezas son de forma muy irregular, el peso no se distribuye por igual entre todos los ramales; en estos casos cada ramal deberá ser tan sólido, que él solo sea capaz de soportar todo el peso de la carga.
Deben elegirse con cuidado los puntos en los que se situaran los estrobos, para que la carga quede bien equilibrada, y evitar que las amarras puedan correrse al suspenderla. Para la selección del diámetro del cable o cadena a utilizar, y para la determinación del número de ramales y longitud de una eslinga, debe disponerse de tablas adecuadas que hay que consultar. Está terminantemente prohibido realizar uniones de cables mediante tubos o soldaduras. Está prohibido acortar o empalmar cadenas de izar insertando tornillos entre eslabones, atando estos con alambre, etc. Nunca debe repararse una cadena soldando eslabones, por ejemplo. Para su utilización, los cables y cadenas deberán estar libres de nudos, cocas, torceduras, partes aplastadas o variaciones importantes de su diámetro. Se deberá poner especial cuidado en sobrellenar los ganchos. Las eslingas y los estrobos deber ser retirados del gancho, cuando no vayan a utilizarse. Las eslingas y los estrobos deben asentarse en la parte gruesa del gancho, nunca en el pico del mismo, y llevarán guardacabos para evitar que se aplante el cable y se separen los cabos. Cuando se utilicen ganchos de dos cuernos, nunca se suspenderá la carga de uno de ellos, ya que de esta forma se desequilibraría la carga y el aparejo no trabajaría verticalmente. Cuando las cargas a suspender tengan aristas o cantos vivos, es preciso proteger los estrobos y eslingas con defensas de madera blanda o goma de neumático. Del mismo modo, cuando haya que embragar piezas muy grandes o pesadas, se colocará entre pieza y el cable o cadena, una defensa, para evitar que con el roce puedan romperse. Antes de ordenar una maniobra, deberá asegurarse de: a. que los estrobos o eslingas estén correctamente aplicados a la carga y asegurados al gancho de izar. b. Que los estrobos o eslingas no tienen vueltas, torceduras, etc. c. Que se ha separado de la carga lo suficiente, y de que no hay otras personas en sus proximidades. d. Que no hay sobre la carga piezas sueltas que pudieran caerse al elevarla. e. Que el gancho de la grúa está nivelado y se encuentra centrado sobre la carga, para evitar giros al elevar está.
IZADO Y DESPLAZAMIENTO DE LA CARGA Está prohibido izar o mover pesos que sobrepasen la carga máxima indicada en la grúa. Es preciso conocer, para ello, el peso de la carga que va a elevarse.
El gruísta debe tener en cuenta que cuanto más abiertos están los ramales de una eslinga que sujeta una carga, es mayor el esfuerzo que tienen que soportar, y que pueden romperse con cargas poco pesadas.
Las cargas sólo se izarán verticalmente. No se tirará oblicuamente de la carga, ya que el balanceo que produce podría accidentar a un compañero, además producir sobrecargas. El cable de la grúa debe trabajar siempre en vertical. No se arrancarán con la grúa, cargas sujetas al suelo, ni se arrastrarán piezas o vehículos. Las cargas se izarán y bajarán suavemente, evitando arranques y paradas bruscas. No se izarán cargas mal enganchadas o cuando los estrobos, cadenas o ganchos, se encuentran en malas condiciones. Cuando se observe, después de izada la carga, que está no se halla correctamente enganchada bajará la carga para su arreglo. Deberá verificarse, a ras del suelo, el equilibrio de la carga suspendida, antes de iniciar el movimiento. El desplazamiento de la carga, una vez izada correctamente, se realizará a la ,menor altura posible, compatible con la altura de las instalaciones y con la seguridad del personal. Nunca se abandonará una grúa dejando la carga sus pendida. Las cargas suspendidas no se transportan por encima de las instalaciones ni del personal. Si en alguna ocasión no hay otro remedio, se parará la grúa y se avisará para que el personal se aparte, dando suficiente tiempo para que todos lleguen a un lugar seguro.
Está prohibida la permanencia o paso de cualquier persona bajo las cargas o ganchos. Cuando las grúas funcionen sin carga, el maquinista elevara el gancho lo suficiente para que pase libremente sobre las personas y objetos. Durante los desplazamientos de la grúa, tanto cargada como en vacío, el maquinista debe prestar la máxima atención, manteniendo las manos sobre los órganos de mando. No se desenrollará completamente el cable del tambor. Deberán quedar dos espiras enrolladas. Está prohibido maniobrar a contramarcha. Para invertir el s entido de la marcha, se detendrá el mando en posición "cero" hasta que cese el movimiento, y después se conectará la marcha inversa. En caso de avería se desconectara inmediatamente el interruptor general y se colocará el cartel "Máquina averiada". Si fuese la corriente, se situarían inmediatamente todos los mandos en punto muerto. Al final de la jornada, y antes de abandonar el mando del equipo, deberán ponerse los interruptores de mando en posición "cero", y desconectar el interruptor principal. La grúa se dejará frenada y con los elementos de suspensión izados y sin carga. Las cargas se depositarán en el suelo, sobre calzas o travesaños, para poder retirar los estrobos sin someterlos a frotamiento entre el suelo y la carga.
Puente Grúas - Riesgos y medidas preventivas
ORIGEN
Durante el accionamiento
Por fallo/ ausencia de finales de carrera y dispositivos limitadores
RIESGOS
MEDIDAS DE PREVENCION
No identificación correcta de mandos Utilización de botoneras con en la botonera. identificación clara de los movimientos y controles. Golpes contra obstáculos durante el guiado de la carga. Mantener los pasillos de circulación libres de obstáculos y señalizados. Riesgo de golpes con la carga por Los puentes- grúa deben estar oscilaciones originadas al chocar contra provistos de los siguientes dispositivos: los topes. Final de carrera superior e inferior Riesgo de rotura de sistema de del movimiento de elevación. elevación por sobrecarga y daños en la estructura del puente. Final de carrera máximo y mínimo de traslación del carro. Riesgo de caída de la carga por ausencia de mantenimiento adecuado de Final de carrera de traslación del los finales de carrera. puente. Choque entre puentes- grúa que Nunca cargar un puente- grúa de circulan por el mismo camino de modo de superar la carga máxima rodadura. admisible.
Por caída de la carga en el descenso
Choque entre un puente –grúa contra otro que está parado por operaciones de mantenimiento. Riesgo de caída por no disponer de Colocar un relé de asimetría a la dispositivos eficaces en caso de fallo en salida del motor que detecte un posible una de las fases del motor en el fallo de una fase o de uno de los descenso de la carga. contactos del contacto. Fallo de freno en el descenso. Reglaje periódico de los frenos. Riesgo de desprendimiento de la Los ganchos deberán disponer de carga del gancho de elevación. pestillos de seguridad.
Por fallo de los accesorios de elevación (cablesganchos)
Caída de la carga por rotura del Efectuar comprobaciones periódicas cable. de los ganchos. Caída de la carga por mala utilización Revisar periódicamente el estado de grapas o perillos. de los cables. No conocer las instrucciones de Formar al personal en la seguridad. manipulación y transporte de carga.
Por manipulación defectuosa de la carga por los operarios en el transporte de la misma
Por circular por encima de personal En los traslados sin carga, izar el trabajando. gancho a una altura en que no exista riesgo contra las personas y objetos. Por reparaciones provisionales efectuadas debajo de cargas Efectuar las reparaciones de los suspendidas. puentes.- grúa en lugar adecuado.
Eslingado defectuoso de la carga.
No depositar materiales en la zonas de circulación, ni a menos de 2 metros Almacenado de materiales en zonas de los carriles. de circulación. No utilizar el gancho de la grúa para subir personal en plataformas, ni Por circular con la carga a alturas subirse a la carga durante el inadecuadas. transporte. Por utilización del gancho para el izado de personal. Caída de operarios durante las La anchura de paso de las operaciones de mantenimiento. pasarelas no debe ser inferir a 0,50 metros. Por ausencia de pasarelas y Atropellos de operarios en barandillas operaciones de mantenimiento por Las pasarelas y plataformas insuficiente anchura de las plataformas y situadas en altura deben estar distancias con respecto a obstáculos provistas de barandas sobre los lados fijos. que dan al vacío.
Equipos para izar
Seguridad en elementos de movimiento e Izajes: Accesorios de elementos de Izaje. Parte 1
Por: Lic. José Luis Melo
1. ACCESORIOS Existe un gran número de accesorios utilizados en las operaciones de izaje, dentro de lo que podemos citar: 1 - eslingas 2 - elementos de unión 3 - ganchos 4 - escuadras 5 - etc. 2. ESLINGAS
Un elemento muy utilizado son las eslingas, las cuales están constituidas como se aprecia en la figura 1, por cabos (textil), cables o cadenas con elementos de terminación según su uso. Están constituidas por un cuerpo longitudinal provisto en sus extremos por ojales, protegidos con guardacabos con el objeto de evitar deterioro. Pueden llevar otro tipo de terminales como se observa en la figura 1.
Figura 1. Distintos tipos de eslingas Se debe tener en cuenta que dadas las formas y condiciones de uso cuando se rompe una de ellas, casi siempre lleva a un accidente grave, que afecta siempre a bienes de la empresa y lamentablemente en muchas oportunidades a la integridad física de los operarios, motivos por los cuales la construcción de las mismas debe ser de primera calidad (con el máximo de cuidado y controles) Estadísticamente la mayoría de los accidentes con eslingas se deben a errores humanos y no a fallas técnicas o de materiales. 2.1. ELECCIÓN DE UNA ESLINGA La elección de una eslinga se debe realizar según los siguientes conceptos: 1- Peso de la carga a elevar 2- Carga de trabajo de la eslinga Existen muchas formas de clasificar las eslingas para facilitar o condicionar su uso una de ellas es por el material de construcción (como se observa en la figura 1): 1- De cabo o cuerda (por lo general son sintéticas como ser fibra de nylon, poliester, etc.) 2- De cable metálico (por lo general de acero) 3- De cadena 1- Eslingas de cabo o cuerda (Ver Instructivos CABOS y ESLINGAS) 2- De cable metálico (Ver Instructivos CABLES METÁLICOS) Los cables empleados con más frecuencia son: Tipo Normal
- Composición 6 x 19 + 1 = Para cables hasta 15 m.m. de diámetro - Composición 6 x 37 + 1 = Para cables de 15 m.m. a 30 m.m. de diámetro - Composición 6 x 61 + 1 = Para cables mayores a 30 m.m. de diámetro Tipo Warrington-Seale:
- Composición 6 x 36 + 1
3 - De cadena (Ver Instructivos CADENAS) La conformación de eslingas de cadena es muy diversa como se observa en la figura 2, en ella hay eslingas con gancho y anillo, grifa y anillo, y por último además del ejemplo de una grifa, una eslinga doble con anillo. En la figura 1 hay una eslinga simple de cadena con anillo y gancho con seguro.
Figura 2. Distintos tipos de eslingas (de cadenas) 2.1.1. PESO DE LA CARGA A ELEVAR De no conocer el peso de la carga a elevar este se debe estimar por encima. Para efectuar el cálculo del peso de una carga se debe multiplicar el volumen por el peso específico del producto que la compone, como por ejemplo: 1 - madera 0,8 2 - piedra u hormigón 2,5 3 - acero, fundición 8 4 - etc. 2.1.2. CARGA DE TRABAJO La carga de trabajo de una eslinga esta dada por la carga máxima que soporta el integrante más débil que posee. Este dato debe estar colocado bien visible. La carga de trabajo de los cables de uso más común son los que se observan en la tabla 1. Cargas de trabajo (en Kg.) de los cables de uso mas frecuente Diámetro en m.m. 9,45 12,6 15,7 18,9 Carga en Kg. 710 1.270 1.970 2.850
25,2 5.080
Tabla 1 Al elevar una carga no siempre se efectúa con la eslinga en forma vertical, muchas veces esta se encuentra abierta formando un determinado ángulo con respecto a la vertical, en este caso la eslinga por composición de fuerzas disminuye su resistencia relativa, para poder gráficar lo antedicho se da la figura 3 y la tabla 2 la que presenta los coeficientes de reducción de capacidad nominal de las eslingas en función del ángulo formado por los ramales Ángulo formado por los ramales Coeficiente Tabla 2
0º 1
45º 1,08
60º 1,15
90º 1,41
120º 2
Figura 3 Cuando la carga es soportada por una eslinga de 4 ramales, el ángulo debe ser medido como es graficado en la figura 3c, y la capacidad de la eslinga se calcula partiendo de que el peso total es s ustentado por: 2 ramales, si la carga es rígida 3 ramales, si la carga es flexible El cálculo de eslingas se efectúa teniendo en cuenta la cantidad de ramales, el coeficiente de seguridad a adoptar, el ángulo que forman los ramales entre sí, como se observa en la figura 4 y la ecuación correspondiente es la siguiente:
R 2 = R 2 + 2RP cos α ---> R=
En el caso de utilizar el cálculo en una eslinga de cuatro ramas el valor R será:
Donde a es el ángulo que forman los ramales con la vertical, pudiendo despreciarse cuando el factor valores de a < 25°.
tome
Figura 4 El usuario de eslingas debe tener en cuenta que cuando aumenta el ángulo entre los ramales disminuye la capacidad de carga, como se muestra en las figuras 5 a y b
Figura 5a
Figura 5b Cuando se calcula una eslinga se suele tomar coeficientes de seguridad tales como: - Inclinación y vientos - Cables de elevación y grúas - Instalaciones - cargas peligrosas - Acciones dinámicas - Velocidad de desplazamiento - Aceleración y desaceleración 2.2. USO DE LAS ESLINGAS Para la utilización de eslingas se deben tener en cuenta numerosas consideraciones de tipo preventivo, tales como la existencia de soldaduras, nudos y los medios de unión. Ellos afectan a la capacidad de carga de las eslingas de la siguiente forma: 1 - Los nudos reducen la capacidad de una eslinga entre el 30 y 50% 2 - Las soldaduras de los anillos terminales u ojales, pese a ser hechas con todas las reglas del buen arte y respetando las normas disminuyen la capacidad de carga en el orden de un 15 a un 20%
3 - Los elementos de sujeción de los cables como los de unión por más que se encuentren correctamente colocados y en el número establecido por las normas reducen un 20 % la capacidad de la eslinga. Notas de advertencia: - Las soldaduras o áreas unidas, nunca se colocarán sobre el gancho del equipo de izaje - Las soldaduras o áreas de unión tampoco se colocarán sobre aristas - Las uniones siempre deben quedar en zonas libres trabajando a la tracción - Los cables, o cadenas, etc. que forman las ramas de una eslinga no deben cruzarse (retorcerse). - Las ramas de dos eslingas diferentes no deben cruzarse sobre el gancho de izaje, como se observa en la figura 6.
Figura 6
el ángulo de dos ramas no debería pasar los 90°, de ocurrir esto se recomienda usar eslingas más largas o vigas (pórticos), como se observa en la figura 7.
Figura 7
Aparatos para izar - Parte 2 Accesorios Ganchos: serán de acero o hierro forjado y deberán disponer de pestillo de seguridad. Cables de acero: Los cables metálicos son elementos ampliamente utilizados en la mayoría de actividades industriales. Así los encontramos formando parte de los equipos para la manipulación y sujeción de cargas, (grúas, cabrestantes, eslingas, etc.) 1. - Con abrazaderas Este sistema es la forma más sencilla para realizar tanto las uniones entre cables, como para la formación de los anillos terminales u ojales. Las abrazaderas deben ser adecuadas al diámetro del cable al que se deben aplicar (la designación comercial de las
abrazaderas se realiza por el diámetro del cable). Esta circunstancia debe observarse escrupulosamente puesto que si se emplea una abrazadera pequeña el cable resultará dañado por aplastamiento de la mordaza. Por el contrario si se utiliza una abrazadera o grapa excesivamente grande no se logrará una presión suficiente sobre los ramales de los cables y por tanto se pueden producir deslizamientos inesperados. Es de suma importancia una cuidadosa observancia de las siguientes medidas para alcanzar una eficaz y adecuada disposición de los grilletes o abrazaderas: Para la realización de anillos u ojales terminales debe emplearse guardacabos metálicos. En los anillos u ojales la primera abrazadera debe situarse lo más próxima posible al pico de los guardacabos. La separación entre abrazaderas debe oscilar entre 6 y 8 veces el diámetro del cable. El ramal de cable que trabaja a tracción debe quedar en la garganta del cuerpo de la abrazadera, en tanto que el ramal inerte debe quedar en la garganta del estribo. Las tuercas para el apriete de la abrazadera deben quedar situadas sobre el ramal largo del cable, que es el que trabaja a tracción. El apriete de las tuercas debe hacerse de forma gradual y alternativa, sin aprietes excesivos. Después de someter el cable a una primera carga debe verificarse el grado de apriete de las tuercas, corrigiéndolo si fuera preciso. La recomendación de utilizar guardacabos en la ejecución de los ojales o anillos terminales es debida a la conveniencia de proteger al cable frente al doblado excesivo que se produciría al someterlo a los esfuerzos de tensión o de una carga. Comercialmente los guardacabos se designan por el diámetro del cable correspondiente. 2. - Manipulación de cables Los cables suelen salir de fábrica en rollos o carretes, aspas, etc., debidamente engrasados y protegidos contra elementos y ambientes oxidantes o corrosivos. Durante su transporte y almacenamiento debe evitarse que el rollo ruede por el suelo a fin de que no se produzcan adherencias de polvo o arena que actuarían como abrasivos y obligarían a una limpieza y posterior engrase, antes de su utilización. Igualmente no debe recibir golpes o presiones que provoquen raspaduras o roturas de los alambres. Deben protegerse de las temperaturas elevadas, que provocan una pérdida del engrase original. Evitar la formación de nudos. Desechar los cables que tengan más de un 10% de los hilos cortados. 3. - Instalación del cable El principal riesgo que se corre al desenrollar y manipular un cable, es que se formen cocas, bucles o codos. Por ello, cuando se trate de arrollarlo en un tambor, es conveniente hacerlo directamente, procurando que el cabl e no se arrastre por el suelo y manteniendo el mismo sentido de enrrollarlo. Antes de instalar un cable debe verificarse que las poleas y tambores por los que deba pasar no presenten resaltes o puntos que puedan dañar el cable, así como que éste pase correctamente por las poleas y por los canales del tambor. Para la manipulación de los cables en general, los operarios deben utilizar guantes de cuero. 4. - Corte de cables Previamente al corte de un cable debe asegurarse que no se produzca el descableado del mis mo, ni el deslizamiento entre las distintas capas de cordones, ni el deshilachado general del cable. Para ello, debe procederse a realizar una serie de ligadas a ambos lados del punto de corte, mediante alambre de hierro recocido. Los métodos comúnmente empleados para realizar el corte varían según el lugar en que se deba operar y los medios disponibles: los más utilizados son: cizallas, eléctrica por resistencia, tronzadora o muela portátil, soplete oxiacetilénico y soldadura eléctrica. Los extremos de los cables deben quedar siempre protegidos con ligadas a fin de evitar el descableado. En algunas ocasiones se sustituyen las ligadas por soldadura que une todos los alambres.
Aparatos para izar - Parte 1 CONCEPTO Vamos a ver los aparatos y equipos de transporte de materiales y cargas en desplazamientos verticales y horizontales en el interior y exterior de talleres y almacenes. Ejemplos de aparatos de elevación de cargas son: grúas, puentes-grúa, maquinillos, polipastos, etc. Además de incluir los aparatos de elevación, también se tienen en cuenta sus accesorios (ganchos cadenas, eslingas, etc.) así
como las propias cargas que se utilizan en la elevación. RIESGOS ASOCIADOS Caída de objetos por deficiente sujeción de la carga. Caída de objetos desprendidos por ausencia de mantenimiento de los aparatos y/o de los equipos (ganchos, cables, etc.) Choques contra objetos móviles por oscilación de la carga. Caída de personas a distinto nivel. Atrapamiento por o entre objetos móviles de los aparatos de elevación. CONDICIONES DE SEGURIDAD DE LOS APARATOS Todos los elementos que constituyen las estructuras, mecanismos y accesorios de los aparatos serán de material sólido y de resistencia adecuada al uso al que se les destina. Asegurara la solidez y firmeza del suelo donde se fijen los aparatos de elevación. Se asegurará que la carga máxima admisible, en kilogramos, de cada aparato esté marcada y sea fácilmente legible. Nunca sobrepasar la carga máxima admisible. Llevar un libro de registro donde se anoten fechas, revisiones y averías. Establecer un programa de mantenimiento de los aparatos de elevación: Diariamente el operador revisará todos los elementos sometidos a esfuerzos. Trimestralmente se revisarán a fondo los cables, poleas, frenos, controles eléctricos, sistemas de mando, dispositivos de seguridad, etc. MANIPULACION DE CARGAS Antes de elevar la carga, considerar: Cuál es el peso de la carga. Cuál es la carga máxima admisible del aparato de elevación. Dónde está el centro de gravedad de la carga. Cómo asegurar la carga. Quién es el responsable del control de las operaciones. Asegurarse que la carga está equilibrada. Para ello, levantar ligeramente la carga y observar. En caso de desprendimiento de la carga, el daño sería mínimo. Transportar las cargas bien sujetas. Los cables trabajarán en posición y ángulos adecuados (ángulo máximo, 90 grados) Las operaciones de elevación y descenso de las cargas se realizarán lentamente, evitando toda arrancada o
parada brusca, y se harán, siempre que sea posible, en sentido vertical para evitar el balanceo. Instruir a las personas encargadas del manejo de los aparatos de elevación y de efectuar la dirección y señalización de las maniobras. Dar a conocer a dichas personas el cuadro de ademanes para el mando de artefactos de elevación, según establece el R.D. 485/1997. Establecer vías de circulación de cargas suspendidas que eviten pasar por encima de los puestos de trabajo. Emplear uno o varios trabajadores para efectuar las señales adecuadas de maniobras de cargas, cuando se manipulen cargas por zonas o recorridos por los que deban pasar las personas y que no queden dentro del campo de visión del maquinista. Se prohíbe transportar a personas sobre cargas, ganchos o eslingas. Cualquier anomalía que se observe en uno de estos equipos debe ser reparado inmediatamente. Hasta que no se repare, su uso debe estar prohibido. Nunca se superará el límite de carga de los equipos de elevación y transporte. Cuando accidentalmente uno de estos equipos haya sido sobrecargado, deberá ser revisado y verificado. En la próxima entrega veremos los siguientes temas: Accesorios con abrazaderas. Manipulación de cables. Instalaciones de cables. Cortes de cables. Conservación y mantenimiento de cables. Sustitución de cables. Utilización de eslingas. Almacenamiento, mantenimiento y sustitución de eslingas. Elevadores de vehículos. Caso especial para puentes elevadores.
Aparatos para izar - Parte 2 Accesorios Ganchos: serán de acero o hierro forjado y deberán disponer de pestillo de seguridad. Cables de acero: Los cables metálicos son elementos ampliamente utilizados en la mayoría de actividades industriales. Así los encontramos formando parte de los equipos para la manipulación y sujeción de cargas, (grúas, cabrestantes, eslingas, etc.) 1. - Con abrazaderas Este sistema es la forma más sencilla para realizar tanto las uniones entre cables, como para la formación de los anillos terminales u ojales. Las abrazaderas deben ser adecuadas al diámetro del cable al que se deben aplicar (la designación comercial de las abrazaderas se realiza por el diámetro del cable). Esta circunstancia debe observarse escrupulosamente puesto que si se emplea una abrazadera pequeña el cable resultará dañado por aplastamiento de la mordaza. Por el contrario si se utiliza una abrazadera o grapa excesivamente grande no se logrará una presión suficiente sobre los ramales de los cables y por tanto se pueden producir deslizamientos inesperados. Es de suma importancia una cuidadosa observancia de las siguientes medidas para alcanzar una eficaz y adecuada disposición de los grilletes o abrazaderas: Para la realización de anillos u ojales terminales debe emplearse guardacabos metálicos. En los anillos u ojales la primera abrazadera debe situarse lo más próxima posible al pico de los guardacabos.
La separación entre abrazaderas debe oscilar entre 6 y 8 veces el diámetro del cable. El ramal de cable que trabaja a tracción debe quedar en la garganta del cuerpo de la abrazadera, en tanto que el ramal inerte debe quedar en la garganta del estribo. Las tuercas para el apriete de la abrazadera deben quedar situadas sobre el ramal largo del cable, que es el que trabaja a tracción. El apriete de las tuercas debe hacerse de forma gradual y alternativa, sin aprietes excesivos. Después de someter el cable a una primera carga debe verificarse el grado de apriete de las tuercas, corrigiéndolo si fuera preciso. La recomendación de utilizar guardacabos en la ejecución de los ojales o anillos terminales es debida a la conveniencia de proteger al cable frente al doblado excesivo que se produciría al someterlo a los esfuerzos de tensión o de una carga. Comercialmente los guardacabos se designan por el diámetro del cable correspondiente. 2. - Manipulación de cables Los cables suelen salir de fábrica en rollos o carretes, aspas, etc., debidamente engrasados y protegidos contra elementos y ambientes oxidantes o corrosivos. Durante su transporte y almacenamiento debe evitarse que el rollo ruede por el suelo a fin de que no se produzcan adherencias de polvo o arena que actuarían como abrasivos y obligarían a una limpieza y posterior engrase, antes de su utilización. Igualmente no debe recibir golpes o presiones que provoquen raspaduras o roturas de los alambres. Deben protegerse de las temperaturas elevadas, que provocan una pérdida del engrase original. Evitar la formación de nudos. Desechar los cables que tengan más de un 10% de los hilos cortados. 3. - Instalación del cable El principal riesgo que se corre al desenrollar y manipular un cable, es que se formen cocas, bucles o codos. Por ello, cuando se trate de arrollarlo en un tambor, es conveniente hacerlo directamente, procurando que el cabl e no se arrastre por el suelo y manteniendo el mismo sentido de enrrollarlo. Antes de instalar un cable debe verificarse que las poleas y tambores por los que deba pasar no presenten resaltes o puntos que puedan dañar el cable, así como que éste pase correctamente por las poleas y por los canales del tambor. Para la manipulación de los cables en general, los operarios deben utilizar guantes de cuero. 4. - Corte de cables Previamente al corte de un cable debe asegurarse que no se produzca el descableado del mis mo, ni el deslizamiento entre las distintas capas de cordones, ni el deshilachado general del cable. Para ello, debe procederse a realizar una serie de ligadas a ambos lados del punto de corte, mediante alambre de hierro recocido. Los métodos comúnmente empleados para realizar el corte varían según el lugar en que se deba operar y los medios disponibles: los más utilizados son: cizallas, eléctrica por resistencia, tronzadora o muela portátil, soplete oxiacetilénico y soldadura eléctrica. Los extremos de los cables deben quedar siempre protegidos con ligadas a fin de evitar el descableado. En algunas ocasiones se sustituyen las ligadas por soldadura que une todos los alambres
Aparatos para izar - Parte 4 Utilización de las eslingas
Son numerosas las normas que se deberán seguir en la utilización de las eslingas. Señalaremos las siguientes: La seguridad en la utilización de una eslinga comienza con la elección de ésta, que deberá ser adecuada a la carga y a los esfuerzos que ha de soportar. En ningún caso deberá superarse la carga de trabajo de la eslinga, debiéndose conocer, por tanto, el peso de las cargas a elevar. Para cuando se desconozca, el peso de una carga se podrá calcular multiplicando su volumen por la densidad del material de que está compuesta. A efectos prácticos conviene recordar las siguientes densidades relativas: Madera: 0,8. Piedra y hormigón: 2,5. Acero, hierro, fundición: 8. En caso de duda, el peso de la carga se deberá estimar por exceso. · En caso de elevación de cargas con eslingas en las que trabajen los ramales inclinados, se deberá verificar la carga efectiva que van a soportar.
Al considerar el ángulo de los ramales para determinar la carga máxima admitida por las eslingas, debe tomarse el ángulo mayor. Es recomendable que el ángulo entre ramales no sobrepase los 90º y en ningún caso deberá sobrepasar los 120º , debiéndose evitar para ello las eslingas cortas. Cuando se utilice una eslinga de tres o cuatro ramales, el ángulo mayor que es preciso tener en cuenta es el formado por los ramales opuestos en diagonal. La carga de maniobra de una eslinga de cuatro ramales debe ser calculada partiendo del supuesto de que el peso total de la carga es sustentado por: Tres ramales, si la carga es flexible. Dos ramales, si la carga es rígida. En la carga a elevar, los enganches o puntos de fijación de la eslinga no permitirán el deslizamiento de ésta, debiéndose emplear, de ser necesario, distanciadores, etc. Al mismo tiempo los citados puntos deberán encontrarse convenientemente dispuestos con relación al centro de gravedad. En la elevación de piezas de gran longitud es conveniente el empleo de pórticos. Los cables de las eslingas no deberán trabajar formando ángulos agudos, debiéndose equipar con guardacabos adecuados. Las eslingas no se apoyarán nunca sobre aristas vivas, para lo cual deberán intercalarse cantoneras o escuadras de protección. Los ramales de dos eslingas distintas no deberán cruzarse, es decir, no montarán unos sobre otros, sobre el gancho de elevación, ya que uno de los cables estaría comprimido por el otro pudiendo, incluso, llegar a romperse. Antes de la elevación completa de la carga, se deberá tensar suavemente la eslinga y elevar aquélla no más de 10 cm. para verificar su amarre y equilibrio. Mientras se tensan las eslingas no se deberán tocar la carga ni las propias eslingas. Cuando haya de moverse una eslinga, aflojarla lo suficiente para desplazarla sin que roce contra la carga. Nunca se tratará de desplazar una eslinga situándose bajo la carga. Nunca deberá permitirse que el cable gire respecto a su eje. En caso de empalmarse eslingas, deberá tenerse en cuenta que la carga a elevar viene limitada por la menos resistente. La eslinga no deberá estar expuesta a radiaciones térmicas importantes ni alcanzar una temperatura superior a los 60 º C. Si la eslinga esta constituida exclusivamente por cable de acero, la temperatura que no debería alcanzarse sería de 80º .
Aparatos para izar - Parte 5 Almacenamiento, mantenimiento y sustitución de eslingas
Las eslingas se almacenarán en lugar seco, bien ventilado y libre de atmósferas corrosivas o polvorientas. No estarán en contacto directo con el suelo, suspendiéndolas de soportes de madera con perfil redondeado o depositándolas sobre estacas o paletas. No exponer las eslingas al rigor del sol o al efecto de temperaturas elevadas. A fin de evitar roturas imprevistas, es necesario inspeccionar periódicamente el estado de todos los elementos que constituyen la eslinga. La frecuencia de las inspecciones estará en relación con el empleo de las eslingas y la severidad de las condiciones de servicio. Como norma general se inspeccionarán diariamente por el personal que las utilicen y trimestralmente como máximo por personal especializado. Las eslingas se deben engrasar con una frecuencia que dependerá de las condiciones de trabajo, pudiéndose determinar a través de las inspecciones. Para el engrase deberán seguirse las instrucciones del fabricante, poniendo especial cuidado para que el alma del cable recupere la grasa perdida. Como norma general, para que la lubricación sea eficaz, se tendrá en cuenta: Limpiar previamente el cable mediante cepillo o con aire comprimido, siendo aconsejable la utilización de un disolvente para eliminar los restos de grasa vieja.
Utilizar el lubricante adecuado. Engrasar el cable a fondo. Aunque una eslinga trabaje en condiciones óptimas, llega un momento en que sus componentes se han debilitado, siendo necesario retirarla del servicio y sustituirla por otra nueva. El agotamiento de un cable se puede determinar de acuerdo con el número de alambres rotos que según la O.G.S.H.T. es de: Más del 10% de los mismos contados a lo largo de dos tramos del cableado, separados entre sí por una distancia inferior a ocho veces su diámetro. También se considerará un cable agotado: · Por rotura de un cordón. Cuando la pérdida de sección de un cordón del cable, debido a rotura de sus alambres visibles en un paso de cableado, alcance el 40% de la sección total del cordón. Cuando la disminución de diámetro del cable en un punto cualquiera del mismo alcance el 10% en los cables de cordones o el 3% los cables cerrados. Cuando la pérdida de sección efectiva, por rotura de alambres visibles, en dos pasos de cableado alcance el 20% de la sección total. Además de los criterios señalados para la sustitución de un cable, también deberá retirarse si presenta algún otro defecto considerado como grave, como por ejemplo aplastamiento, formación de nudos, cocas, etc. Asimismo, una eslinga se desechará cuando presente deficiencias graves en los accesorios y terminales, tales como: Puntos de picadura u oxidación avanzada. Deformaciones permanentes (doblados, aplastamientos, alargamientos, etc.). Zonas aplanadas debido al desgaste. Grietas. Deslizamiento del cable respecto a los terminales. Tuercas aflojadas. En la próxima entrega se detallaran los siguientes temas: •
Elevadores de vehículos
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Caso especial para puentes elevadores
Aparatos para izar - Parte 6 Elevadores de vehículos
En una gran mayoría de talleres de reparación, los puentes elevadores han sustituido a los fosos para gran número de trabajos.
Las medidas de seguridad aplicables a estos elementos son las siguientes: Las maniobras y el control debe realizarlo únicamente personal formado designado para esa tarea por el responsable. La zona del suelo afectada por el movimiento del elevador debe estar perfectamente delimitada y se mantendrá siempre despejada. El puente dispondrá de los adecuados dispositivos que impidan todo descenso no deseado. Cuidado con las posibles sobrecargas. Como cualquier otro dispositivo mecánico debe revisarse periódicamente. En especial deben controlarse los órganos de suspensión y los niveles de líquido de los cilindros hidráulicos. El puente dispondrá de un dispositivo eficaz para fijar el vehículo tanto en el ascenso como en la bajada. Es conveniente utilizar casco de seguridad para trabajar debajo de los trabajadores, en previsión de posibles golpes en la cabeza. Caso especial para puentes elevadores Deben estar provistos de un dispositivo de enclavamiento de los brazos móviles que impida la modificación del ángulo que forman por la acción de cualquier esfuerzo lateral, una vez que se han fijado los puntos de amarre del chasis. Este enclavamiento debe ser automático y la liberación puede ser manual. Los operarios deben ser avisados sobre el riesgo de caída del vehículo, sobre todo cuando se extrae un elemento importante y pesado como es el motor. Hay que parar inmediatamente cualquier puente elevador que presente una anomalía de funcionamiento y sobre todo: Si sube a tirones Si sube o baja más lentamente de lo habitual Si se ha producido una fuga de aceite.
Aparejos, cabrias y garruchas
Objetivo Se trata en esta NTP de las máquinas elementales de elevación que suponen el principio de otras principales y complejas empleadas en la ingeniería civil. Los elementos de elevación aquí estudiados no necesitan para su funcionamiento más que el propio esfuerzo de la persona que ha de manejarlo, lo que dice algo de la simplicidad de los mismos.
Características generales Aparejo
Es un sistema de poleas compuesto de dos grupos, uno fijo y otro móvil. Se pone en movimiento por medio de una cuerda o cadena afianzada por uno de sus extremos en la primera polea fija y que corre por las demás, actuando la potencia en su otro extremo libre. Los grupos de poleas pueden ser de varios pares (mecanismo diferencial) o de uno solo, en cuyo caso se le llama aparejo diferencial. (Fig. 1 y 2).
Al aparejo también se le llama "polipasto". El fin del sistema es conseguir la elevación de cargas importantes con pequeños esfuerzos. Las trócolas a mano son aparejos que en vez de llevar cuerda llevan una cadena equilibrada y en los que la polea superior no es libre si no que está accionada por una pareja de engranajes helicoidales o cilíndricos, aunque a veces se desliza mediante la combinación de los dos. La pareja de reducción se mueve por medio de una cadena gobernada a mano, calibrada y que se enrolla en una polea montada sobre el eje. Para evitar el deslizamiento de las cadenas, va provisto de un freno que funciona mediante un mecanismo de fricción, puesto en funcionamiento por un empuje axial del tornillo correspondiente a la dirección de la bajada de la carga, cuando el aparejo es de reducción helicoidal, mientras que en aparejos de reducción cilíndrica se realiza por medio de una rueda de trinquetes con pestillo.
Cabria Elemento de elevación compuesto por una polea suspendida en el punto de unión de tres puntuales inclinados
formando un trípode, y por la cual pasa la cuerda de tracción. Normalmente la carga izada va contenida en un recipiente, capazo o cubo, que pende de un gancho en el extremo de la cuerda.
Garrucha Constituye el sistema de elevación más sencillo y se compone de una polea amarrada en el extremo de un elemento rígido en vuelo inclinado u horizontal, cuyo otro extremo está contrapesado o anclado a la base; por al polea se hace pasar la cuerda de tracción.
Torno Máquina simple consistente en un cilindro que lleva adosada en la prolongación de su eje y fuera de los puntos de sustentación la manivela de accionamiento manual.
Método de trabajo Funciones y técnicas del proceso La única función de estos aparatos es la de izado de cargas. El peso a elevar varía con el tipo de aparato, de todas formas la carga estará en función de la potencia muscular del operario. La técnica de elevación es la misma para todos los aparatos que tratamos, excepto el torno, es decir, tirar del extremo libre de la cuerda o cadena de arriba a bajo de forma que la carga a izar cueste el mínimo esfuerzo. Esto dependerá de la situación del operario y de la longitud de la cuerda, puesto que así como en el aparejo y garrucha el ángulo que forma la cuerda tensada con la vertical puede ser escogida, en la cabria es muy inferior por la proximidad del operario a la vertical de izada.
Así como en la garrucha y la cabria la potencia a desarrollar equivale al peso de la carga, en la polea móvil el esfuerzo es la mitad de ésta y en los aparejos y trócolas irá disminuyendo en función del número de poleas. En el torno el esfuerzo a desarrollar viene dado por el radio del cilindro y la distancia de la manivela al eje del mismo. La cabria y el torno son usados normalmente en la ejecución de pozos, ya que su puesta en obra permite una fácil extracción del material excavado.
Mantenimiento y conservación Las distintas piezas que componen estos mecanismos no están encerrados siendo visibles fácilmente. Esto
constituye una ventaja de existir algún defecto, puesto que puede ser localizado y reparado de inmediato. El mantenimiento y conservación de estos elementos es bien simple:
Engrase de los ejes de las poleas. Correcto funcionamiento del pestillo de seguridad de los ganchos. Cuerda en buen estado y con el coeficiente de seguridad adecuado al peso a soportar. Verificación del desgaste de los eslabones de las cadenas. Verificar el correcto enganche de poleas con cuerdas o cadenas. Engrase eje y apoyo del torno. Revisión anclaje del torno simple.
Riesgos generales para todas las máquinas
Riesgos específicos Cabrias
Protección personal Las prendas de protección individual a usar por los trabajadores en los trabajos que compete a los aparatos tratados se pueden reducir a tres:
Guantes. Botas de seguridad (Puntera reforzada), homologadas (MT-5). Casco protector homologado (MT-1).
El uso del cinturón de seguridad (MT-13) se reserva para aquellos puestos de trabajo que implican un riesgo de caída de altura por la proximidad del operario, que recoge la carga o tira de la cuerda, a una abertura en el suelo. Cuando la posición de trabajo deba ser incómoda, por ejemplo en el torno, y suponga para la espalda un sobreesfuerzo anormal se dotará al trabajador de un cinturón antilumbago.