Análisis de la Obra:
His Hi s toria ori a: anál náli s i s del del pas pas ado y proye pr oyecc to s oci oc i al Sin duda es importante conocer los cómos que existen detrás de una obra, no sólo es importante lo que se dice, sino cómo es que se dice y las vías que se transitaron para llegar a decirlo. Este trabajo pretende mostrar esa parte detrás de una obra particular. Historia, análisis del pasado y proyecto social , texto que tiene por objeto la historia de la historia, no entendida como recopilación; sino como análisis, un intento de explicar cómo es que la percepción que de la historia se tiene ha ido modificándose en función de la consecución de un proyecto, no sólo político, también económico y el impacto social que ambas esferas tienen. Inserto dentro de una corriente renovadora del marxismo es desde esta perspectiva que Joseph Fontana aborda la revisión historiográfica de la historiografía. En este sentido, no resulta apresurado señalar que contiene una crítica al capitalismo, aunque mucho mejor fundamentada que otras obras de contenido más incendiario que crítico, devuelve al historiador el protagonismo que debe de asumir en la conformación de una conciencia que tienda contrarrestar las contradicciones que el modelo capitalista y su más reciente variación, el neoliberalismo encierran. A decir del autor, más que para un público académico, su trabajo lo hizo pensando en los maestros, en dotarlos de los elementos necesarios para ir construyendo a ese cambio de conciencia, donde el paradigma dominante no es la
única vía por la cual debe de transitar la sociedad en la actualidad, sino que propone valorar la posibilidad de transitar por los senderos que de manera cotidiana denominamos utopías, las cuales se descalifican de esta forma desde la estructura dominante y la sociedad suele aceptarlo como un hecho dado. Se presentará una pequeña biografía que contextualice, tanto al autor como su obra, sus ideas principales y una crítica a la misma Acerca del autor
Josep Lázaro Fontana, es un historiador contemporáneo nacido en Barcelona el 21 de noviembre de 1931, vinculado a la corriente neo marxista, hijo de un librero pequeño burgués, crítico religioso, fue expulsado durante su bachillerato en los escolapios por impío. 1 Licenciado en filosofía y letras, con especialidad en historia por la Universidad de Barcelona en 1956; entre sus maestros podemos mencionar a Ferran Soldevilla, Jaime Vicens y Pierre Vilar. Interesado en los aspectos económicos de la historia defendió la tesis: La quiebra de la monarquía absoluta, 1814-1820 en 1970, editada por Ariel en 1972 con el título La quiebra de la monarquía absoluta .2
Su intención de no ser un historiador de gabinete la podemos apreciar en su activismo, opositor al régimen de Franco, fue detenido junto con Antoni Jutglar, Josep Termes, Manuel Sacristán, Miquel Izard o Jordi Solé Tura y otros jóvenes profesores en distintas ocasiones por su participación en manifestaciones contrarias al régimen. Su apoyo en la creación del Sindicato Democrático de Estudiantes en la
1
Ignacio Peiró Martín y Gonzalo Pasamar Alzuria, Alzuria, Diccionario Akal de Historiadores españoles contemporáneos, contemporáneos, España. Akal, 2002, p. 260. 2 Op. Cit. Peiró Martín, p. 60
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Universidad de Barcelona SDEUB, durante el mes de marzo de 1966 le valió la expulsión de la institución. 3 La reunión de alumnos y profesores de la Universidad de Barcelona en el Convento de Capuchinos del Sarriá para la creación de SDEUB fue considerada por el régimen franquista como un acto subversivo, puso sitió al convento por espacio de 72 horas, conminando a los reunidos a abandonar el recinto antes de entrar por la fuerza en el edificio. Este episodio es conocido en España como “La Capuchinada” y causó gran revuelo en su momento, mientras que los partidarios de derecha repudiaban el apoyo dado por la comunidad de los capuchinos a los estudiantes, la izquierda lo consideró un “paso más en la lucha por las libertades ”.4 Internacionalmente también tuvo su eco, ya que las autoridades recibieron telegramas remitidos por diversas organizaciones estudiantiles; Confederación de Estudiantes Iraníes (desde Francfort); Unión Nacional de Estudiantes de Israel (Jerusalén); Confederación Nacional de Estudiantes (México); Juventud Soviética (Moscú); Sindicato de Estudiantes Holandés (Amsterdam); Unión General de Estudiantes (Bélgica). 5 Podemos ver que desde su formación se ha enfocado en los aspectos económicos y su vinculación con las sociedades a través de la historia. Esta inclinación se ha reforzado por sus esfuerzos en relación con la introducción de las corrientes renovadoras del marxismo a través de autores como Edward Palmer
Ibidem.
3 4
Francesc Arroyo, “La 'Capuchinada', 20 años después ”, Diario El País, Barcelona - 09/03/1986, formato html disponible en: http://www.elpais.com/articulo/espana/UNIVERSIDAD_DE_BARCELONA_/UB/Capuchinada/anos/despues/el pepiesp/19860309elpepinac_19/Tes. Consultada el 1º de octubre de 2010 5 Ibidem.
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Thompson, Erick. J. Hosbawm y George Rudé. Dicha labor la asume desde su posición como director de la colección de historia de Editorial Crítica. Ha ocupado distintas cátedras de historia en distinguidas universidades europeas, actualmente es Catedrático y Director del Institut Universitari d’Història Jaime Vicens Vives en la Universitat Pompeu Fabra (1991). 6 Entre sus obras desarrolla principalmente la temática económica, como podemos observar en los títulos: La revolució de 1820 a Catalunya, 1963. Arribau i la industria cotonera a Catalunya , 1963, Cambio económico y actitudes políticas en la España del siglo XIX , 1973, Hacienda y estado en la crisis final del antiguo régimen español, 1823-1830 , 1973, La revolución liberal. Política y Hacienda en 1833-1845 ,
1977, La crisis del Antiguo Régimen: 1808-1833, 1979, La Hacienda en la Historia de España (1700-1931), 1980, La invasió napoleònica, 1981, Historia. Análisis del pasado y proyecto social , 1982, La fi de l’Antic Règim i la industrialització , 1988, La història després de la fi de la història. Reflexions i elements per a una guia dels corrents actuals, 1988, Europa ante el espejo , 1994, Per conèixer Ferran Soldevila,
(en colaboración con Lluís Duran). 1994, Introducció a l’ estudi de la història , 1997.7 No deja de ser llamativo que escriba en catalán, tal vez participe del nacionalismo que el propio Pierre Vilar señala como un factor para la Guerra Civil Española. 8 El autor no ha perdido su combatividad, recientemente firmó un manifiesto en contra de la criminalización de los movimientos sociales, como es el caso de los recientes disturbios estudiantiles en Barcelona, ya que el trato que se les ha dado en los medios ha sido de actos de vandalismo, con lo que se distrae la atención pública 6
Peiró Martín, Op. Cit. p. 60 Los años que no están en cursivas corresponden a la primera edición de la obra. 8 Pierre Vilar, La Guerra Civil Española, Crítica, Barcelona, 1986, pp. 22-27. 7
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de los verdaderos problemas por los que atraviesa España, como son el desempleo, la pobreza, la reducción de los derechos sociales, la xenofobia, la corrupción política y su impunidad, además del debilitamiento de las reivindicaciones de los movimientos obreros. 9
Contexto de la obra
Fue escrita –probablemente – a finales de los 70’s y terminada antes de 1982, año en que fue editada por primera vez. A mediados de 1981 tuvo lugar un congreso en Stuttgart, Alemania sobre política y filosofía, donde se señalaba la estrecha vinculación entre la política y la filosofía, para ello se retomaba a Kant y el Kampfplat z, o sitio de combate entre las ideologías. Para ello se señaló las
diferencias entre Kant y Hegel, así como las distinciones que Françoise Mitterrand señalaba entre el marxismo-leninismo y el socialismo humanista. Las diferencias se hicieron más notorias a partir de que la socialdemocracia alemana clamaba por un retorno a Kant donde de acuerdo con Eduard Bernstein el socialismo es sencillamente un ideal ético, en tanto que para Kart Kautsky es un proceso evolutivo natural, con tintes de darwinismo científico desarrollado a partir de la leyes económicas plasmadas por Marx en El Capital .10
9
P.R. “100 profesores piden que no se criminalice a los movimientos sociales”, Diario El País, Barcelona 09/10/2010, formato html; disponible en: http://www.elpais.com/articulo/cataluna/profesores/piden/criminalice/movimientos/sociales/elpepiespcat/201010 09elpcat_1/Tes, consultado el 14 de octubre de 2010. 10 Carlos Gurmendez, “Política y filosofía: el marxismo regresa a Kant / 1”, Diario El País, Barcelona, 07/07/1981 http://www.elpais.com/articulo/opinion/KANT/_IMMANUEL_/FILOSOFO/HEGEL/_GEORG_WILHEM/COM UNISMO/Politica/filosofia/marxismo/regresa/Kant/elpepiopi/19810707elpepiopi_12/Tes
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Paralelamente en España se hablaba de una recolección de firmas, para decidir sobre la entrada del país en la Organización del Tratado del Atlántico Norte, para ello el líder del Partido Comunista Español, Santiago Carrillo proclamaba su negativa a la inclusión española dentro de la organización, ya que esto podía romper el equilibrio entre los bloques, además de crispar las relaciones entre las fuerzas políticas del país. El referéndum era en oposición a la firma de la entrada ya que podía implicar la aceptación de una “muerte atómica”, se pretendía presentar una opción distinta a la alternativa que ofrecía la derecha. 11 Se renegociaba además el Tratado bilateral de Amistad y Cooperación entre Estados Unidos y España, para lo cual el ministro español de Asuntos Exteriores, José Pedro Pérez-Llorca, había viajado a Nueva York, el funcionario español tuvo reuniones con el presidente en turno Ronald Reagan, ante quien buscaría refrendar el tratado con mejores condiciones para los españoles. 12 Además de ello, la Comisión Europea se pronunciaba en contra de la creación del Instituto Nacional de Hidrocarburos español, ya que lo consideraban una práctica monopólica que beneficiaría a la compañía CAMPSA.
13
El neoliberalismo comenzaba a dar sus primeros pasos y
11
Manuel Muñoz, Carrillo: "Recogeremos millones de firmas para pedir un referéndum sobre la entrada en la OTAN" El secretario general del PCE insiste en la necesidad de un "Gobierno fuerte", Diario El País, Valencia, 07/07/1981, Formato Html, disponible en: http://www.elpais.com/articulo/espana/CARRILLO/_SANTIAGO/ESPANA/ORAGNIZACION_DEL_TRATA DO_DEL_ATLANTICO_NORTE/PARTIDO_COMUNISTA_DE_ESPANA/ORGANIZACION_DEL_TRATA DO_DEL_ATLANTICO_NORTE_/OTAN/REFERENDUM_DE_LA_OTAN_/12-31986/Carrillo/Recogeremos/millones/firmas/pedir/referendum/entrada/OTAN/elpepiesp/19810707elpepinac_5/T es 12 INTERINO, “Tecnología Pérez-Llorca negocia en Washington la renovación del tratado España- EE UU”, Diario El País , Washington, 07/07/1981, formato html disponible en: http://www.elpais.com/articulo/portada/PEREZ_LLORCA/_JOSE_PEDRO/ESTADOS_UNIDOS/ESPANA/ES TADOS_UNIDOS/Perez-Llorca/negocia/Washington/renovacion/tratado/EspanaEE/UU/elpeputec/19810707elpepipor_1/Tes 13 Soledad Gallego-Díaz, “La Comisión Europea critica la creación del INH español”, Diario El País, 07/07/1981, formato html disponible en:
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poco a poco habría de convertirse en el modelo económico y político con mayor alcance e influencia en el orbe, tanto que aún no se vislumbra un cambio de perspectiva, ni a corto o mediano plazo.
Hipótesis o tesis
Considerando todo lo anterior no resulta extraño que el autor nos muestre en su obra, cómo es que la historia ha servido a consolidar en distintas épocas las formas de gobierno operante y racionalizarlos como la forma más adecuada para el desarrollo de la sociedad; lo que llama “economía política”, independientemente de la época a que se refiera. Su tesis es que las tres partes del conglomerado; “ historia, “economía política” y proyecto social”, se encuentran estrechamente relacionadas, sin que puedan ser vista la una sin la otra. Cuando se ofrecen por partes, la relación se vuelve aparente. 14 Una vez que se ha logrado imponer una idea dominante, para el caso el capitalismo, se desgajan, con lo que la historia se vuelve narración objetiva del pasado, una política económica que se limita a describir el funcionamiento de la sociedad, y los proyectos políticos que buscan resolver los problemas que enfrenta el sistema dominante, aparentemente sin relación e influencia entre ellas. El concepto principal del autor es el de “Economía Política”: una explicación del sistema de relaciones que existen entre los hombres, que sirve para justificarlas y racionalizarlas –y, con ellas, los elementos de desigualdad y explotación que
http://www.elpais.com/articulo/portada/Comision/Europea/critica/creacion/INH/espanol/elpeputec/19810707elpe pipor_2/Tes 14
Josep Fontana, Historia: análisis del pasado y proyecto social , Crítica, Barcelona, 1999, p, 10.
6
incluyen –, presentándolas como una forma de división social de trabajos y funciones, que no sólo aparece ahora como resultado del proceso histórico, sino como la forma de organización que maximiza el bien común”. 15 Como ya se ha mencionado, cada época –en la perspectiva del autor –, ha construido su propia “economía política”, la cual articulándose con la historia y la política ha logrado llevar adelante un proyecto social, para nuestros días, la “economía política” predominante apuntala a l capitalismo, como forma no sólo dominante sino única alternativa viable para la humanidad. La historia como es sabido, siempre ha tenido al menos la función de legitimar el orden social existente, Fontana comparte esta percepción y señala que incluso entre las sociedades ágrafas, “El propio cuerpo de tradiciones orales […] ha sido elaborado para justificar y transmitir lo que se considera importante para su estabilidad”. 16 Sostiene sus aseveraciones mediante un análisis historiográfico de las principales escuelas historiográficas que ha visto desarrollarse el mundo. Desde los logógrafos como Hecatéo de Mileto, hasta la Escuela de los Annales, sin dejar pasar las teorías de economistas como Adam Smith, o las ideas que sobre la historia tuvieron personajes como Turgot, Condorcet, Voltaire, Rousseau, Montesquieu, Hobbes, Descartes, Gramsci, Lenin, y por supuesto Marx. De acuerdo con su razonamiento, los historiadores al analizar el pasado y buscar explicar el presente, rastrean las razones por las cuales los hecho pasaron de forma tal que posibilitaron el presente. Con ello construyeron su genealogía, contribuyendo; concientemente o no, a validar el presente desde el cual realizan su
15
Ibidem. Ibid . p. 15
16
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estudio, con lo que la actualidad se convierte en la evolución natural, vista a través de prismas de objetividad que contribuyen a reforzar la “economía política” dominante, tanto en el pasado como en nuestro presente, el día de hoy.
17
Son pues las modificaciones de la teoría histórica el objeto de estudio en esta obra de Joseph Fontana. Los sujetos de la historia son los filósofos o historiadores que mediante sus ideas influyeron en la conformación del discurso dominante, así como quienes en la perspectiva de Fontana ofrecieron una explicación distinta para la realidad en que vivieron, negándose a racionalizar la acumulación de bienes en manos de unos cuantos como el resultado natural del desarrollo social. Planteada como una revisión, la obra está escrita de forma sincrónica, donde las transiciones entre una época y otra se dan en el cambio en la forma de pensar la historia, por ejemplo: antes de los griegos la historia era vista mayormente como una sucesión de reyes, que ligaba al rey en turno con las divinidades que dieron origen al mundo, con lo que se legitimaba la dominación de estos sobre sus pueblos. Particularmente con Heródoto la historia se vuelve analítica, separándose de los elementos míticos haciendo de las acciones del hombre, apartadas de la predestinación, el objeto de estudio de la historia y convirtiendo la explicación en una necesidad de la misma. 18 Joseph Fontana plantea a lo largo de su obra una crítica al sistema capitalista, el cual ha fomentado la desigualdad social y dado que la labor del historiador ha contribuido a su legitimación, es también labor del historiador el elaborar una historia que ayude a desmontar el andamiaje del capitalismo y ofrezca una alternativa para la
17
Ibidem. Ibid ., pp. 16-19.
18
8
sociedad, el modelo que tiene en mente es el del socialismo; el cual no se alude directamente hasta las últimas líneas del capítulo 13, sin que deje de notarse su tendencia hacia esta forma de organización social durante todo el texto. La edición que se analiza no señala cuántas reimpresiones ha tenido la obra, sin embargo es posible inferir que ha visto varias y que ha tenido modificaciones, la primera edición data de 1982 y en el ya mencionado capítulo 13 señala: “[…] este libro no se ha escrito para exponer un progreso, sino para ayudar a desentrañar una crisis –la de un modelo de crecimiento marxista – de la que se suele hablar hoy en términos de denuncia del industrialismo socialista, y de fracaso de los sistemas políticos establecidos en la Unión Soviética y en los países del Este europeo […]”.19 El autor no hace explícito que se refiere a la llamada
Perestroika, la
reestructuración impulsada por Mikhaíl Gorbachov en 1988, que derivó en una apertura política y económica en la Unión Soviética, y que terminó impactando enormemente a los países europeos del Este, donde el suceso más significativo está en la caída del Muro de Berlín y la reunificación alemana; además de la posterior disolución de la URSS. 20 Considerando que es muy poco probable que el autor vaticinara lo que habría de suceder 6 años después de que apareciera su obra, es lógico inferir que la edición original fue modificada en posteriores ediciones, más aún si apreciamos que sólo unas páginas más adelante nos dice: “Ni los desiertos regados por grandes canales excavados con energía atómica que prometían los “futurólogos” soviéticos, ni las
19
Ibid ., p. 246. Juan Carlos Ocaña, distintos artículos en: http://www.historiasiglo20.org/TEXT/perestroika.htm
20
9
“fábricas
lunares”
que
la
Rand
Corporation
anunciaba
en
1964,
y
cuyo
funcionamiento estaba previsto para 1990”.21 Es hasta el capítulo 14 “Repensar la historia para replantear el futuro”, donde la crítica hecha a lo largo de la obra señala claramente el problema. La hegemonía ideológica, económica y social del sistema capitalista. Misma que no se plantea como un modelo necesariamente acabado, ya que a pesar de las crisis periódicas, el sistema encuentra la forma de reestructurarse. Principalmente repartiendo los costos entre la población menos favorecida. La alternativa en perspectiva de Fontana es la estructuración de una nueva “economía política”, que no racionalice el capitalismo como sistema necesario y que valore el transitar hacia el modelo socialista. Es aquí donde la historia debe de servir como el espacio propicio para desmontar los esquemas en que se basa dicho sistema. Mostrando cómo es que el sistema predominante se las ha arreglado para lograr la hegemonía y descalificar como utópica la alternativa socialista. Para el autor es necesario reeducar a la sociedad en esta línea, apuntalando un nuevo proyecto social. 22
Estructura de la obra
La obra se compone, además del prólogo y de una “Breve y necesaria, explicación inicial” por los siguientes capítulos: 1.- Los orígenes, que abarca desde la época anterior a los griegos, hasta finales de la Edad Media, 2.- Del Renacimiento a la Ilustración, 3.- La Ilustración, 4.- Capitalismo e historia: la escuela escocesa, 5.- El
21
Fontana, p. 251. Op. Cit. Ibid., pp. 247-263.
22
10
pensamiento histórico de la Revolución Francesa, 6.- Historia y contrarrevolución: 1814-1817, 7.- El materialismo histórico y la crítica del capitalismo, 8.- La destrucción de la ciencia histórica, 9.- La reconstrucción. I: Historia, sociología y antropología, 10.- La reconstrucción. II: La nueva historia económica, 11.- La reconstrucción. III: La escuela de «Annales», 12.- El marxismo en el siglo XX. I: Desnaturalización y dogmatismo, 13.- El marxismo en el siglo XX. II: Desarrollo y Renovación, 14.Repensar la historia para replantear el futuro, Epílogo.- La historia tras la crisis de 1989. Fontana recurrió a las obras de los autores que maneja, preferentemente en el idioma en que fueron escritas, o al menos eso se infiere de las citas que remiten a cada obra concreta. Recurre poco a ciencias auxiliares, es hacia los últimos capítulos donde se reflejan aspectos demográficos y económicos principalmente, hace gala de erudición al emplear un doble sistema de citas, el tradicional que remite al final de la obra donde se separan por capítulos y uno más a pie de página, donde abunda en datos o amplia la explicación del párrafo de donde se desprende la llamada al pie. Su escritura es principalmente explicativa, donde muestra las transiciones ideológicas de forma sincrónica y estructural, evidenciando en todo momento cómo es que la historia ha explicado la realidad en los distintos tiempos a los que se remite: Pero hay otro hecho dominante en estos años, además del fracaso de la revolución, y es la creciente conciencia de que las promesas smithianas de que el capitalismo traería la felicidad para todos no iban a cumplirse. El debate acerca de las consecuencias sociales de la industrialización británica ha dado lugar a auténticas filigranas en el arte de disfrazar la realidad; pero la evidencia del pauperismo de los años 1837 a 1842 resulta difícil de ocultar y, como diría un testimonio de la época, tras ofrecernos los resultados de una encuesta que abarcaba un tercio de la población de Manchester, no se veían remedios locales y temporales que pudieran
11
paliar el mal: «El desarreglo es orgánico y el remedio debe de ser igualmente orgánico.».23
La forma principal de explicación es funcionalista. A lo largo de la obra presenta el trabajo desarrollado por los historiadores y sus aportes a la teoría de la historia. Esto dada la necesidad de mostrar las transiciones en los modelos historiográficos. Los cuales sirvieron para explicar la forma en que funcionaba la sociedad. Finalmente era la puesta en práctica de distintos proyectos sociales. Esta forma explicativa queda claramente expuesta desde la primera página, de la Breve, y necesaria, explicación inicial. Expresado de manera muy simple, y con las palabras más llanas, el enfoque del análisis que se ha empleado podría resumirse así. Toda visión global de la historia constituye una genealogía del presente. Selecciona y ordena los hechos del pasado de forma que conduzcan en sus secuencia hasta dar cuenta de la configuración del presente, casi siempre con el fin, consciente o no, de justificarla. Así el historiador nos muestra una sucesión ordenada de acontecimientos que van encadenándose hasta dar como resultado «natural» la realidad social en que vive y trabaja, mientras que los obstáculos que se opusieron a esta evolución se nos presentan como regresivos, y las alternativas a ella como utópicas. Se ofrece como una averiguación objetiva del curso que va del pasado al presente lo que suele ser, más bien, un partir del orden actual de las cosas para rastrear en el pasado sus orígenes, aislando la línea de evolución que conduce a las realidades actuales y transformándola en una manifestación del progreso, con fines legitimadores. 24
El discurso de la obra
Mediante una prosa expositiva y argumentativa, principalmente, el autor va desarrollando sus propósitos. Por un lado está el de instruir. Enseñar el empleo que de la historia se ha hecho en las distintas épocas por las que ha transitado. La recuperación de los distintos discursos y cómo contribuyeron en su momento a conformar los distintos proyectos sociopolíticos.
23
Ibid ., pp. 135-136. Ibid ., p. 9
24
12
Paralelamente informa de otras formas de pensamiento que no tuvieron el impacto, o que simplemente fueron descalificadas. Esta descalificación se debe a que no contribuían a mantener el orden social. Ofrecieron alternativas que modificaban las relaciones estructurales. Si la sociedad cambió después de 1917, para no volver a ser nunca lo que había sido antes, también lo hicieron las ciencias sociales y, más en concreto, la historia. Bolchevismo y materialismo histórico aparecían como las dos caras de una misma moneda. Para cerrar el paso al uno en la realidad política, era necesario desterrar el otro en la mente de los hombres. Bajo los discursos de contenido aparentemente más filosófico y abstracto veremos asomar, una y otra vez, la voluntad de combatir el marxismo, por más que sus autores y los interpretes posteriores de su pensamiento, se esfuercen en presentarlos como el resultado natural de la evolución interna de la ciencia. No se trata de suponer que los científicos sociales académicos estuviesen comprometidos en alguna especie de conspiración internacional contra el marxismo, sino de comprobar que compartían los valores fundamentales del orden social establecido y que éstos impregnaban sus ideas científicas, fuesen o no conscientes de ello. 25
En la medida que los dos objetivos anteriores se cumplen, se da paso a un tercer objetivo. Se hace evidente que el autor presenta una crítica a la forma en que se ha elaborado la historia. La genealogía de los presentes pretéritos ha sido avalada desde la historia. Con ello se ha contribuido a mantener el status quo. Por ello trata de persuadir al lector de que existe una alternativa viable para la sociedad. Para ello es necesaria una reelaboración de la historia. Esta nueva historia abandonaría las posturas oficialistas y se construiría sobre la visión de que el capitalismo es ante todo una forma de explotación. Basado en una revaloración de las alternativas que en su momento se consideraron utópicas. Con ello se lograría la comprobación de líneas de evolutivas, que, evidentemente habrían constituido un presente distinto. Esta nueva historia que plantea Fontana apunta a la conformación de una sociedad que no sea explotadora del hombre. “Una sociedad
25
Ibid .,
p. 154.
13
en que no siga siendo preciso racionalizar la desigualdad como una condición necesaria para el progreso colectivo”. 26 Por la amplitud, tanto temática como cronológica, su prosa es expositiva en cuanto al uso que se ha hecho de la historia y argumentativa cuando propone la forma en que debió entenderse a determinado autor o analizarse una época concreta. Los límites cronológicos de la Ilustración pueden fijarse entre la revolución inglesa del siglo XVII y la francesa del XVIII. La primera abrió un proceso de cambio político y económico que puso a Inglaterra por delante de los países europeos de su tiempo. Los ilustrados vieron estos cambios, pero no supieron entender el nexo que existía entre revolución y progreso, y trataron de alcanzar los mismos resultados por medio de un programa de reformas compatible con el orden social vigente. 27
El lenguaje es objetivo en tanto que remite a los distintos autores que maneja. Esto no implica que se abandone el lenguaje subjetivo, ya que constantemente intercala sus propias apreciaciones. El tono empleado es crítico, manteniendo en todo momento el optimismo, cree posible el cambio ante la situación que critica. Si lo creyera imposible seguramente no se habría detenido a escribir su obra. La metáfora más recurrente en la obra es la consideración organicista que tiene de la sociedad. La visualiza como un ente vivo y en constante evolución. En ciertos momentos recurre a la ironía, sobre todo en las notas a pie de página, donde se permite críticas más amplias a ciertos autores. “O sea, que si hay poca estabilidad –en la medida en que hay mucha movilidad – es probable que haya inestabilidad. ¡Maravilloso descubrimiento que abre nuevos horizontes a las ciencias
26
Ibid ., p. 12 Ibid ., p. 59.
27
14
sociales! Lástima que sirva de poco para entender, por ejemplo por qué Winstanley y los diggers luchaban contra la propiedad privada de la tierra”. 28 Carente de arquetipos, su argumentación formal recurre mayormente al organicismo. Ya se ha señalado que equipara la sociedad con un ente vivo que se mantiene
en
constante
evolución.
Eventualmente
introduce
explicaciones
estructuralistas. Con estos elementos elaboró un discurso que sin duda puede considerarse reaccionario, constituido en crítica a la sociedad de nuestros días. Donde las diferencias económicas entre los distintos países, eventualmente derivaran en crisis sociales que evidenciarán el agotamiento de la “economía política” vigente. Conclusiones
La visión del autor es completamente eurocentrista, cuando se menciona a América, es para referir trabajos realizados por investigadores europeos. Por otra parte, es necesario reconocer que la mayor parte de las corrientes historiográficas se han generado en Europa. Con todo ha habido pensadores en América que han abonado al desarrollo de la historiografía y que bien pudieron representar una perspectiva del colonialismo que se ha vivido en estas tierras. La obra tiene como propósito desarrollar una nueva “economía política”. De ahí que se evidencie a todo lo largo de la obra la postura ideológica desde la que escribió el autor. Empleando el mismo método, la genealogía del presente, estructuró su crítica al sistema. En función de ello es que propone la alternativa de una
28
Ibid ., p. 79. Nota al pie donde señala un argumento de Lawrence Stone, sobre la lucha de clases en la Inglaterra del siglo XVII.
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sociedad más igualitaria, constituida sobre las bases del socialismo y que la sociedad en conjunto busque alcanzar el estadio comunista. Ese es el proyecto social que Josep Fontana propone, una sociedad que abandone las prácticas depredatorias que el capitalismo ha llevado a generalizar en el mundo. Mediante una economía de Estado, regular los ingresos e igualar los niveles de vida. La educación tiene en este sentido un rol significativo. Es desde ella que propone la difusión de los valores sobre los que habrá de sustentarse la sociedad. La historia contribuye a este proyecto presentando los elementos críticos. Mostrando cómo la vía por la que ha transitado la humanidad nos ha conducido a las constantes crisis económicas y donde la mayor parte de la población en el mundo subsiste con dietas calóricas que oscilan entre las 2250 y 2500. Debajo de los 2000 se habla ya de estados de hambre 29. La notoria concentración de la riqueza en unas pocas manos, con los consecuentes niveles de pobreza en el otro extremo, es consecuencia del propio sistema. Para ello, es necesario que el historiador deje de prestarle tanta atención a procesos como La Revolución Francesa o la Inglesa, ya que son problemas que no interesan tanto a la sociedad actual. La sociedad contemporánea necesita respuestas a las contradicciones que vive. Necesita comprenderlo para plantearse la recuperación de alternativas que fueron valoradas como utópicas. Para ello, el Josep Fontana señala que el historiador debe dejar de ser un investigador de gabinete. Debe mantener una interacción con la sociedad con que trabaja y a la cual debe de estar dirigida su obra. Debe rebasar el círculo académico 29
Ibid., p. 250.
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para comenzar a construir esa nueva sociedad. Por ello no resulta extraño que haya dedicado su obra a docentes. Sin embargo, es necesario señalar que el propio Fontana se ha construido un nicho dentro del círculo académico. En cierta forma ha reproducido el sistema, en este caso para señalar una vía alterna. Su firma en manifiestos tiene cierta relevancia. Pero habría que ver en qué condiciones vive. Cuánto contribuye a la conformación de un pensamiento crítico entre sus estudiantes. Vaya, con qué coherencia se conduce en su cotidianeidad. Su formación como académico le brinda una autoridad en el manejo de la historia desde una perspectiva marxista. Sin desconocer que el paradigma dominante en la actualidad ha conducido al mundo a una polarización extrema, es necesario plantearse la viabilidad del proyecto que Fontana propone. Se necesita llevar a cabo un proceso de educación que aparte a las generaciones futuras del individualismo tan señalado en que vivimos hoy. Que de mayor peso a la empatía y solidaridad que poco a poco se ha venido diluyendo hasta volverse casi inexistente. Replantear la escala de valores donde los bienes materiales sean el medio para alcanzar metas más elevadas. Desarrollar el intelecto, mejorar las relaciones, compartir experiencias y conocimientos. Que no sean los bienes los que nos hagan valer, sino que el uso que les demos sea más significativo. El reconocimiento que el resto de las personas hagan de nuestras acciones no debe significarnos tanto como el hecho de sentirnos bien cada día ante nosotros mismos. Tal vez sea esta la mayor debilidad de lo propuesta de Fontana. La lucha de clases que el propio Marx propuso como motor de la historia es el reflejo externo de esa búsqueda de reconocimiento individual a la que todo ser humano aspira. 17
Sin ella no tiene sentido el esfuerzo por superarnos. ¿Para qué? después de todo con sólo hacer lo que necesitamos basta para que el sistema siga funcionando. E incluso lo seguiría haciendo sin que nosotros moviésemos un dedo. La literatura recrea el extremo de este planteamiento. En “El Mundo Feliz” de Aldous Huxley, los seres humanos ya no nacen, son creados en serie en fábricas de fertilización. Desde el momento que se da la fecundación, los embriones son acondicionados para desarrollar un rol específico. No deben de rebasar estas funciones. Cuando eventualmente se presentan diferencias, estas pueden llegar a afectar el desarrollo de ese humano en particular. Así le sucede al personaje principal de la obra, quien por un mal manejo durante su etapa embrionaria no logró desarrollar la altura esperada para la clase de humano en que se convirtió. Esta diferencia lo llevó a sentirse distinto, pensar en las razones de su otredad, buscar a quienes como él se sintieran diferentes. Para hacer más llevadero su sentimiento, en quienes reconocerse para compartir sus experiencias. En esta sociedad literaria la historia, la literatura y las artes en general ya no tienen razón de ser. Cada día es una repetición del anterior, donde los procesos sociales se limitan a seguir produciendo, consumir lo que se produce. Ya no es ni siquiera un afán de poder o de riqueza lo que mueve a esa sociedad. Es simplemente el mantener el movimiento para ocultar la inmovilidad a la que llegaron. Tal vez sea ese el verdadero fin de la historia. En una sociedad así la historia pierde su sentido, se asimila el presente como un hecho dado e inamovible. Ni siquiera es necesario recordar lo que se hizo el día anterior. Se sabe de antemano
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que sucedió lo mismo que el día presente. Los incidentes que llegaran a presentarse son sólo eso, sucesos que es necesario evitar que se repitan. Esto no quiere decir que debamos aceptar la realidad en la que vivimos como algo dado. Debemos encontrar un sistema político social que permita reducir las severas distinciones en que hoy vivimos. Que permita una explotación racional de los recursos y un reparto más equitativo de los beneficios. La historia muestra que sin una figura de autoridad que tome decisiones radicales, la sociedad por sí misma es incapaz de emprender las acciones que su sana convivencia demanda. Por otro lado la historia también muestra los peligros que entraña la concentración de poderes en una figura de autoridad. Se generan Estados totalitarios donde la crítica se vuelve impensable y se agudizan los malestares sociales que en un principio se pensó eliminar. Es en este aspecto donde la obra de Fontana hace su mayor aporte, en el señalamiento de las alternativas que se han ofrecido a lo largo de la historia. Como es que el modelo socioeconómico que hoy predomina tachó a esas alternativas como utópicas e irrealizables, logrando una hegemonía que hoy parece incuestionable. Sin embargo el no cuestionarlo permite su mantenimiento y prolongación como única vía posible de desarrollo. Generando un pensamiento crítico se pueden analizar otras posibilidades, que permitan una mejor convivencia. Y este es el mejor aporte de la obra. Ciertamente no resulta fácil el mantener una postura crítica, pero es necesaria hoy y todos los días. Buscar el equilibrio entre las personas y los Estados es una prioridad en todas las líneas. El desarrollo de tecnología en armamento ha puesto
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sobre la mesa los riesgos que implicaría una nueva guerra. El escenario de un conflicto atómico se presenta como más devastador que nunca. El agotamiento de los recursos naturales no parece ser una visión apocalíptica más. Es una realidad que se nos muestra día a día. Los conflictos sociales que se derivan de los distintos niveles de pobreza en el mundo son otra cotidianeidad de nuestros días. Sin esa crítica no podemos pensar en soluciones y las necesitamos de manera cada vez más apremiante.
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http://www.historiasiglo20.org/T EXT/perestroika.htm
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