ARBOTERAPIA El poder curativo de los arboles
25 mayo, 1,8 y 15 junio de 2015. De 16 a 19 hr * Casa Seminarios, UAT. UAT. Tlaxcala, Tlax. CUPO LIMITADO. LIMITADO. Información e inscripciones inscripciones:: Tel. Tel. 246 4623275 plantastlax
[email protected] [email protected] m
Escuchad a un hombre experto… Los árboles y las piedras os enseñaran más de lo que podáis aprender de la boca de un doctor en Teología. Bernardo de Morlaix
Debes conversar mucho con el campo y los bosques si quieres absorber tanta salud para tu mente y tu espíritu como la que deseas para tu cuerpo. Diario de Henry Thoreau, 31 de diciembre de 1841
Biol. Miguel Ángel Gutiérrez Domínguez y Biol. Yolanda Betancourt Aguilar. Fundadores de la Licenciatura en Naturopatía Médica de la UATx. UATx. TALLER DE ARBOTERAPIA UNIVERSITARIA
Temario
La vida secreta de las plantas
Qué son los árboles?
Qué caracteristícas tienen los árboles
Tipos de árboles
Representaciones Representacio nes culturales y significado de los árboles
Identificando y caracterizando a los árboles
El árbol con el que nos identificamos
Visita al Jardín Botánico Universitario
Formando bosques entre asistentes
Interpretaciones emocionale Interpretaciones emocionales, s, simbólicas, energéticas y espirituales en arboterapia
Los árboles familiares a partir de las constelaciones
Sembrando nuestro árbol interior
La vida secreta de las plantas
La vida secreta de las plantas , es un libro escrito
«La vida secreta de las plantas». Recopila logros y hallazgos relacionados con el mundo vegetal realizados por diversos investigadores en los años 1960. Expone una serie de relaciones físicas, emocionales y espirituales entre las plantas y el hombre.
por Peter Tompkins y Christopher Bird. El libro fue publicado por Editorial Harper & Row en 1973.
El libro, toma como tema central las capaci dades sensitivas de las plantas (conocido como "efecto Backster"), por más de que estas no posean un sistema nervioso. Para algunos autores se cree haber demostrado empíricamente tal percepción, sin embargo se cuestiona la validez de tales experimentos. Generalmente los experimentos se desarrollaron conectándolas a un galvanómetro para medir la diferencia de conductividad eléctrica presente en ellas, que se cree se veía directamente directamen te afectado por los distintos estados emocionales de la planta.
El efecto Backster; ¿son las plantas seres inteligentes?
En la década de los 60’s un norteamericano que trabajaba para la CIA y se dedicaba ded icaba a emplear los famosos Polígrafos Polígrafos (también llamados La Máquina de la Verdad), descubrió por casualidad una forma de inteligencia que poseen todas las plantas. Esto sucedió durante un día de verano verano,, cuando el señor Backster llegó a su hotel cansado de un duro día de trabajo, se sentó en su habitación y mientras fumaba un cigarro observó una gran planta que estaba ubicada en la esquina de la habitación.
Para pasar el rato al señor Backster se le ocurrió conectar su polígrafo a la planta, observando un hecho asombroso; el señor Backster tomó una de las hojas de aquella enorme planta, y le conectó los dos electrodos de su polígrafo.
La máquina de la verdad
Mostrando los resultados en una gráfica que puede ser impresa o mostrada en la pantalla de un monitor, pero en los años 60's no tenían monitores, por lo que eran solo impresas. El polígrafo tiene sensores que están conectados a este mismo por los cuales se conectan a la vez a unos electrodos que el señor Backster le colocó a la planta.
Entonces comenzó a pensar en qué es lo que el podía hacer para que esa planta generase algún tipo de sensación o algún tipo de estímulo. Al cabo de unos minutos se le ocurrió regar la planta, al hacerlo la grafica seguía indicando lo mismo que antes, una línea recta. Y pensado sobre otros métodos (relatando en un artículo que estuvo minutos dando vueltas por la habitación, intentando hallar una forma de estimular a la planta haciendo que muestre algo en la gráfica), tuvo la brillante idea de encender una cerilla y acercársela a una de sus hojas.
Una gráfica de nerviosismo, de alguna forma la planta había detectado que la iban a atacar. Posteriormente Posteriorment e el señor Backster B ackster apagó la cerilla para que la planta generase la gráfica anterior, por lo que llegó a la conclusión de que la planta tenía algún tipo de receptor que percibía la intencionalidad del señor Backster.
Luego decidió volver a encender un cerillo, pero solo con la intención de acercar esta misma a la planta, no de quemarla. Al parecer la planta percibió que su objetivo no era quemarla, por lo que la gráfica que obtuvo fue una línea recta. Asombrosamente, la planta era capaz de percibir las acciones con intencionalidad y las sin intencionalidad, son capaces de percibir nuestros sentimientos y nuestras acciones.
Después de unos días, el señor Backster decidió llevar a cabo otro experimento, llamó a tres de sus colegas para realizar lo siguiente: Agarraron una planta que estaba en la habitación, y la colocaron en otra habitación aislada, a la que luego accedieron tres personas por separado.
La primera persona en entrar, lo único que hizo fue regar la planta, y salir de la habitación. La segunda persona en entrar, sólo se sentó por unos minutos y salió de la habitación.
Pero la tercera persona en entrar, portaba una tijera consigo mismo con la que le cortó una de sus hojas a la planta, para luego salir de la habitación. Minutos después, le conectaron a la planta los electrodos y estos al polígrafo polígrafo..
Minutos después, le conectaron a la planta los electrodos y estos al polígrafo. Al entrar la primera persona a la habitación, la gráfica mostró una línea recta, al igual que con la segunda. Pero en el momento en el que la persona numero tres hizo ademán de entrar a la habitación, sin llegar incluso a cruzar la puerta, la planta inmediatamente percibió la presencia de aquel que la había dañado y lo marcó en la gráfica.
La planta era capaz de percibir a aquellas personas y amenazas que se acercaban a ellas, tenía algún tipo de inteligencia, tenía alguna forma de receptores capaces de percibir este tipo de situaciones.
Los experimentos continuaron con el tiempo, hasta se escribió un libro en el año 1973 titulado: “La Vida Secreta de las Plantas” Plantas”,, escrito por Peter Tompkings Tompkings y Christopher Bird, en el que se recopilan logros y hallazgos relacionados con el mundo vegetal.
El libro también expone una serie de relaciones físicas, emocionales y espirituales entre las plantas y el hombre.
QUE ES LA ARBOTERAPIA?
La arboterapia (del latín arbor , 'árbol' y del griego therapeia, 'atención', 'curación') o silvoterapia (del latín silva, 'bosque' o 'selva') es una filosofía que propugna el reencuentro con la naturaleza mediante la convivencia con los árboles, en busca de la paz y la armonía de los bosques y como terapia para sentirse mejor, desarrollar los sentidos y disminuir el estrés.
En la antigüedad, el culto a los árboles estuvo muy desarrollado entre los celtas. Cada miembro de la comunidad tenía un árbol que actuaba como protector de la persona.
Desde épocas remotas se recomendaba andar por los bosques o vivir un tiempo entre árboles como remedio a ciertas enfermedades.
Durante la Edad Media, gracias a algunos monjes, se mantuvo vivo la admiración hacia los árboles y la naturaleza, como Bernardo de Morlaix, monje benedictino del siglo XII.
Escuchad a un hombre experto… Los árboles y las piedras os enseñaran más de lo que podáis aprender de la boca de un doctor en Teología. Teología. Bernardo de
Morlaix
ARBOTERAPIA. Miguel Herrero Uceda
La arboterapia busca en los bosques el reequilibrio de la persona
Un poeta definió al hombre como raíz que anda. El origen de nuestra cultura, de nuestro conocimiento, de nuestra forma de ser, se encuentra en nuestras raíces. Una palabra llena de significados, porque nosotros, a semejanza de los árboles, tenemos profundas raíces en la madre Tierra. Nuestra misión en la vida consiste en mantener vivas estas raíces; sólo así, nuestra actividad florecerá y será grato el fruto de nuestro esfuerzo. Si cumplimos con este precepto, cumpliremos con el compromiso adquirido como especie cuando se creó la vida.
Miguel Herrero Uceda, El alma de los árboles. El naturalista Miguel Herrero Uceda, impulsor de la arboterapia, recomienda adentrarse en los bosques; caminar sin prisas entre árboles donde lo importante es el propio camino, nunca el destino; oír los sonidos de la naturaleza y tener el espíritu relajado y abierto a las percepciones de los sentidos. Con ejercicios tan sencillos como estos, los seguidores de este método aseguran que el cuerpo se une a la madre tierra, en perfecta armonía con la naturaleza, liberándose de los agobios, del estrés, de las insastifaciones del mundo moderno y se llena el espíritu de paz.
Arboles y arboterapia ¿Qué tienen los árboles para que sean portadores de felicidad? ¿Por qué se representa el paraíso como un jardín de frondosos árboles? ¿Por qué las palmeras son la idealización de las vacaciones? ¿Por qué el color verde tranquiliza, relaja y es emblema de esperanza? Estas son algunas de las preguntas que el naturalista y escritor Miguel Herrero Uceda se ha hecho para concluir en una terapia de la que es impulsor en nuestro país. Se llama Arboterapia‟ „Arboterapia‟ a una terapia natural para “combatir el estrés y la
ansiedad y restablecer nuestra satisfacción con la época que nos ha tocado vivir”. En este sentido, el naturalista abandera el reencuentro con la naturaleza, ya que “son los árboles los que nos pueden brindar la paz y el equilibrio que nos falta”.
Podemos sentir que somos parte del bosque y cómo los árboles pueden ayudarnos a encontrar nuestra propia armonía vital. Miguel Herrero
Uceda
Filosofía de la arboterapia La filosofía de la arboterapia se basa en los siguientes puntos: La evolución de la humanidad a partir de especies que vivían en los bosques tropicales africanos, un origen que permanece vivo en la mente colectiva como el paraíso perdido. Interpretación Interpretac ión del darwinismo no como la lucha del más fuerte, sino la supervivencia del más adaptado en su entorno, el que puede vivir en armonía y cooperación con las especies con las que convive. Estudios de tradiciones de pueblos que vivían en contacto con la naturaleza y antiguas filosofías de culturas que se sentían hermanados con el medio natural, así como del mundo rural que conocieron nuestros abuelos, un pasado muy reciente, una forma de vida sencilla y sincera, en armonía con su entorno, que el ajetreo del hombre industrializado, inmerso en las sucesivas crisis que él mismo ha generado, está olvidando, pero que subyace en la esencia de nuestra cultura.
Los árboles
Un árbol es una planta perenne, de tallo leñoso, que se ramifica a cierta altura del suelo. El término hace referencia habitualmente a aquellas plantas cuya altura supera un determinado límite, diferente según las fuentes: 2 metros, 3 metros, 5 metros o los 6 metros en madura. Además, producen ramas secundarias nuevas cada año, que parten de un único fuste o tronco, con claro dominio apical, a pical, dando lugar a una nueva copa separada del suelo. Algunos autores establecen un mínimo de 10 cm de diámetro en el tronco (la longitud de la circunferencia sería de 30 cm).
Partes de los árboles
Los árboles están formados por tres partes: la raíz, el tronco y la copa. Los dos primeros elementos son los que diferencian, fundamentalmente,, a un árbol de un arbusto.Los arbustos son fundamentalmente más pequeños y no tienen un único tallo sino que están formados por varios. No obstante, ha de señalarse que algunas especies se pueden desarrollar como árboles pequeños o como arbustos, dependiendo de las circunstancias medioambientales. medioambientales.
Raíz
Las raíces fijan el árbol al suelo. Las raíces pueden tener una raíz principal, o bien, ser numerosas raíces en las que ninguna de ellas predomina, adoptando la forma de raíz ramificada fasciculada. Las raíces aéreas son más raras dentro de los árboles, pero se dan en algunas especies que viven en entornos e ntornos pantanosos, pantanosos, por ejemplo el mangle (Rhizophora).
Las plantas leñosas que no reúnen estas características por tener varios troncos o por ser de pequeño tamaño son consideradas c onsideradas arbustos.
Los árboles presentan una mayor longevidad que otros tipos de plantas. Ciertas especies de árboles (como las secuoyas) pueden superar los 100 m de altura, y llegar a vivir durante miles de años.
Tronco
El tronco sostiene la copa. Su capa exterior se llama corteza o súber, de espesor y color variables, que sirve para proteger la savia.
Sus características (color, forma en que se desescama, etc.) son una ayuda a la hora de diferenciar las especies arbóreas.
A modo de ejemplo, puede señalarse que el haya común la tiene gris y lisa hasta edades muy avanzadas; avan zadas; el pino piñonero la tiene t iene de color pardo gris o pardo rojizo, es escuamiforme, forma surcos oscuros y grandes planchas; y el olmo común, por ejemplo tiene color pardo gris, cuarteado por grietas, tanto horizontales como transversales.
Anatomía del tronco de un árbol
Si se corta un tronco de manera longitudinal, por ejemplo en un tocón, pueden verse los anillos, que delatan la forma en que ha ido desarrollándose ese árbol. Cada año se forma un anillo. Contándolos puede saberse la edad del árbol, si bien esto es más fácil en los árboles de zonas templadas, ya que en los trópicos con un clima regular a lo largo del año, no se aprecia la formación de anillos anuales. Los anillos estrechos evidencian años de dificultades y pobre alimentación de manera que el crecimiento es retardado.
Los años de crecimiento más rápido se ven en anillos más anchos. Hay un centro del tronco más oscuro, el duramen o corazón, son células leñosas muertas de donde procede la mejor madera para usar como combustible, y luego unos anillos más claros hacia el exterior, la albura.
Entre la albura y la corteza hay una sola capa de células por la que el tronco está creciendo, llamada cambium; se divide a su vez en dos partes: la interior formará el xilema (albura y duramen) y la exterior forma la corteza interna (floema).
Cortezas
Ramas
Las ramas suelen brotar a cierta altura del suelo, de manera que dejan una franja de tronco libre. Las ramas y hojas forman la copa. La copa adopta formas diversas, según las especies, distinguiéndose básicamente básicamente tres tipos: la alargada y vertical, la redondeada o la que se extiende de manera horizontal, como si fuera una sombrilla.
Las ramas salen del tronco, se subdividen en ramas menores y en éstas están las yemas y las hojas.
De la yema nacerá una flor, una rama, u hojas. Las yemas que quedan en el extremo de las ramitas ramitas se llaman yemas terminales. Suelen estar cubiertas por escamas o catafilos como forma de protección.
Hojas
A través de las hojas el árbol realiza la fotosíntesis y puede por lo tanto alimentarse. Las raíces absorben el agua con minerales disueltos en ella. Suben por el tronco hasta las hojas.
Allí reaccionan con el carbono procedente del anhídrido carbónico y forman azúcares.
Luego el azúcar se transforma en celulosa, que es la materia prima de la madera.
La hoja tiene una parte superior (haz) y otra inferior (envés), en el que se encuentran los estomas, pequeñas aberturas abertur as por las que penetra el anhídrido carbónico y por p or los que sale el agua sobrante y el oxígeno.