La educación como fenómeno social : mantenimiento o ruptura del papel socializador y regulador de la institución educativa Socialización primaria y secundaria Antes que nada, recordaremos lo que se entiende por socialización: este proceso tiene dos momentos claves: la socialización primaria y la socialización secundaria. La primera se da en la primera infancia y en la familia, en dónde el nio adquiere el lengua!e, los "á#itos que le transmite el mundo adulto, e interpreta la realidad, de acuerdo a los criterios aprende en su n$cleo familiar. La segunda, implica la inserción de los nios en el mundo o#!etivo de la sociedad de la que forma parte, y tradicionalmente estuvo a cargo de la escuela. %s despu&s de mediados del siglo '', cuando, !unto con la crisis del esta es tado do de #iene ienest star ar,, co comi mien enza zan n los los cues cuesti tio onam namien ientos tos al rol socializador de las instituciones educativas, el cual se "a#(a cumplido con &)ito durante casi un siglo. *nte *ntent ntar arem emos os e)pl e)plic icar arno noss las las ca caus usas as de es esta ta cris crisis is,, as as(( co como mo el posicionamiento actual de las instituciones educativas + particularmente de la escuela+ como agente de socialización, a trav&s de la mira mirada da de algu alguno noss auto autorres es.. e emo moss se sele lecc ccio iona nado do para para el tratamiento de este tema a tres tres contemporáneos argentinos: argentinos: -arlos -ullen, uan -arlos /edesco /edesco y %milio /enti 0anfani, resulta interesante reparar en que aspectos dieren y coinciden estos autores. 2n proceso e)itoso -ull -ullen en nos nos dar ará á una #reve eve mirad irada a "is "istór tórica ica so so#r #re e la func funció ión n soci so cial aliz izad ador ora a de la educ educac ació ión, n, part partic icul ular arme ment nte e de la llam llamad ada a 3%scuela civilizatoria4 de los siglos '*' y '', para luego introducirnos en las disfuncionalidades que presenta ese modelo en la actualidad. 5ice -ullen “La educación, en su sentido más amplio, es una práctica social o un conjunto de prácticas sociales, consistente en socializar mediante la enseñanza de conocimientos” 6-ullen 1777 p.189 esto es
decir, que en la propia denición de educación, está implicado el o#!etivo de socialización. %n la educación cona#a la familia para el ascenso social y para formar 3un "om#re de #ien, o una mu!er de respeto4, la escuela p$#lica pod(a satisfacer esa demanda. Pero las e)pectativas no eran sólo de la familia: la educación está muy ligada al tema del poder y del control social quienes detentan el poder, precisan para sostenerlo una #ase de consenso y legitimidad,
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que se o#tiene a trav&s de la educación. Se precisa que los futuros ciudadanos internalicen 3 las normas sociales y la culpa por su transgresión4. ;rden para progresar era el lema de la modernidad, y sus "erramientas principales eran la familia y la escuela. 0ue, entonces, una constante de la primera mitad del siglo '' la conanza de los ciudadanos uruguayos en la educación como factor de socialización y ascenso social. Lo que la clase privilegiada o#ten(a por "erencia, la clase media y la popular, podr(an accesarlo meritocráticamente, a trav&s de su formación. Las familias, que constitu(an el primer agente socializador, entrega#an conadas sus "i!os a la escuela vareliana, la que forma#a ciudadanos tra#a!adores, "onestos y educados. Parafraseando a -ullen, dir(amos que en esos tiempos, la educación consist(a en la transmisión de sa#eres, necesarios para conservar el orden vigente de ese modo, transmit(a una moral que esta#lec(a lo permitido y lo pro"i#ido y , por lo tanto, una forma determinada de convivencia social. %stas normas, eran las avaladas por la mayor(a y no se pensa#a en criticarlas. Acceder a esa formación era derec"o de todos, que el estado de#(a garantizar y lo "ac(a a trav&s de la escuela p$#lica. %l proyecto de la escuela de la modernidad, es progresista en su conte)to, ya que se #asa en la o#!etividad de la ciencia, y en el respeto al orden que llevar(a al constante progreso, contraponi&ndose a los criterios anteriores, #asados en la tradición o en lo religioso. “( se diferenciaba entre) . . .quienes necesitan solamente una educación básica para saberse fuerza de trabajo intercambiable (mero valor de cambio, despojado de resistencia culturales) le!itimadores con su voto del poder social, !uardián del libre mercado, quienes necesitan , además, una educación superior(elitista) para saberse dueños de la fuerza de trabajo controladores por su poder económico, de las re!las sociales de la convivencia. "parece entonces el mandato de que la escuela forme buenas personas ,que internalizan como deber las normas sociales, buenos ciudadanos, que se saben parte del estado moderno, le!itiman la autoridad, porque la eli!en como sus representantes cuidadores del cumplimiento del derec#o constituido. $on todos sus avatares, la escuela moderna cumplió su misión moralizante civilizante, lo!ando la co#esión social la inte!ración en una sociedad cada vez más se!mentadora fra!mentada.”
6-ullen 1777 p.<=9
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Pese a las cr(ticas que pueda merecer desde el presente, como socializadoras, la familia y la escuela de esos tiempos, fueron &)itos y como tales se perci#(an socialmente. -risis de la función de socialización A partir de los aos >?, ese modelo entra en crisis. %s en realidad, es la sociedad moderna la que "a entrado en crisis.-on la crisis del estado de #ienestar, las demandas del movimiento popular e)plotan, en los >? se ve 3el mundo !usto4 a la vuelta de la esquina, y en los 8?, irrumpen las dictaduras que aplastan las re#eliones y comienzan a imponer el modelo neoli#eral. A partir de los @?,cam#ian la velocidad y las posi#ilidades de las comunicaciones ,la interdependencia de los pa(ses, se produce dispersión de los mecanismos legitimadores del poder social. Por otra parte, el modelo glo#alizador provoca la e)clusión de muc"as personas, quienes se ven desprovistos de sus derec"os como ciudadanos, aumenta la segregación residencial, se profundiza la #rec"a social. “%na constante en los dia!nósticos de la crisis como en las propuestas de transformación educativa, aparece como la necesidad de reformular la función social de la escuela, por el desfasaje que parece sufrir en relación con las necesidades del modelo económico vi!ente con las contradicciones del estado para sostenerlo.” 6;e
177B+ citado por -ullen9 -ullen aclara que la escuela no de#e cam#iar para formar ciudadanos que se 3adapten4 a este modelo económico y se eviten las crisis sociales, 6como en el anterior modelo9 la escuela de#e formar ciudadanos, que, con una visión cr(tica de la sociedad y el estado, #reguen por una !usticia social y pol(tica, desde la lealtad al sistema democrático. “$omo parte de una justicia pol&tica, en un estado democrático la función social de la escuela es, ciertamente, enseñar, pero como un socializar mediante la enseñanza de saberes, le!itimados p'blicamente, para responder adecuadamente a las demandas sociales de aprendizaje, interpretadas equitativamente.” 6-ullen <=9
%l pro#lema es qui&nes tienen condiciones para e!ercer su ciudadan(a en las condiciones actuales, "ay acuerdo en los autores: aquellos que no tienen sus necesidades #ásicas satisfec"as, quienes son portadores de derec"os que no están gozando, tampoco las tienen para e!ercer su ciudadan(a. La dif(cil convivencia en un sistema económico e)cluyente
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La mirada de Juan Carlos Tedesco comienza estudiando el actual modelo neoli#eral. %l nuevo capitalismo, genera fenómenos de e)clusión, de marginalidad ,que, !ustamente se caracterizan por la fragmentación, la segregación residencial, la p&rdida de capital social, el aislamiento. %n este nuevo capitalismo, en consecuencia, vivir !untos no es una consecuencia 3natural4 del orden social. Civir !untos sólo puede ser el producto de una decisión pol(tica, voluntaria, consciente. Seg$n este autor estamos en el momento !usto en donde de#eremos tomar una opción clave: “ . . . vivir juntos o entrar en la lógica fundamentalista donde el diferente es el enemigo” 6/edesco ?D9 %l autor sostiene, que en este nuevo capitalismo, e)iste un pensamiento $nico, sin pretensiones de ser "egemónico. Seg$n su visión, para ser "egemónico de#iera verse una voluntad de imponerle a la sociedad ese pensamiento $nico, y no la "ay. -ree /edesco, que el pensamiento neoli#eral se impone por falta de alternativas "a#iendo ca(do el modelo socialista, no "ay contrapartida. “ l pensamiento neoliberal es 'nico porque no aparecen alternativas, pero no es #e!emónico porque no convence no es capaz de incluir a todos. "l pensamiento 'nico no le interesa la ad#esión. l nuevo capitalismo no se plantea convencer. *implemente deja afuera , en ese sentido, es incompatible con la democracia es incompatible con la pol&tica” 6/edesco en Propuesta ?D9
%l capitalismo industrial, con sus luc"as de clases, era incluyente por lo tanto, el sistema educativo y los medios de comunicación respond(an a un modelo #asado en la oferta, que 3vend(a4 el mismo producto. Las instituciones encargadas de transmitir la cultura, de socializar a los nios eran fundamentalmente, la familia y la escuela. %n cam#io, en el nuevo sistema, los sistemas de transmisión cultural "an cam#iado, siendo relevantes la /C e internet, #asados en la demanda, as( como la escuela para 3el cliente4 ,tam#i&n #asada en la demanda. El que la familia y la escuela estén cuestionadas a la vez como agentes de socialización no es casual, ambos fenómenos son interdependientes, ya que están relacionados con el modelo imperante en el presente. %n cuanto a la familia: “ +iversos estudios indican que son cada vez más los adultos que consideran que no deben transmitir a sus #ijos una determinada visión del mundo sino la capacidad para ele!ir formar autónomamente su propia concepción. La familia contemporánea tiene tendencia a asumir la forma de una “red de relaciones” que, en lu!ar
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de ser responsable de transmitir el patrimonio cultural moral de una !eneración a otra, tiende a#ora a privile!iar la construcción de la identidad persona l4 6/edesco ?D9
%n las familias, que se sienten formadas por iguales, no "ay transmisión sino intercam#io “. . . es que la democracia se e-tiende a la vida privada al ámbito de los estilos de vida, al mismo tiempo que pierde importancia en el ámbito de la vida p'blica. ara decirlo en palabras del propio La/di, la ló!ica ciudadana coloniza el espacio privado 6Laidi citado por /edesco9 l n'cleo familiar, además de #aber cambiado su composición, de #o!ares nucleares, a #o!ares monoparentales ,o compuestos (madre con #ijos o madre con su pareja e #ijos ) establece v&nculos solidarios entre i!uales, no asume la transmisión cultural !eneracional. “0cómo pensar la transmisión en una sociedad que no reconoce otro valor más que el valor de cambio1 0 2u3 sentido otor!ar a la idea de transmisión en una sociedad donde el saber es pensado percibido como al!o cada vez más 4uido, amenazado de obsolescencia permanente medido en función de su utilidad económica1” /edesco
?D9 E. Eead en la d&cada de los 8?,distingu(a tres modelos de transmisión, el pregurativo, el cogurativo y el postgurativo. %l primero, en el cual los adultos conocen y ensean los valores de la sociedad a las nuevas generaciones, corresponde a las sociedades llamadas tradicionales. %l segundo, donde adultos y !óvenes aprenden al mismo tiempo porque todo es nuevo para am#os, corresponde a sociedades que pasan por una etapa revolucionaria o viven procesos masivos de migración e incorporación a nuevas culturas. %l tercero, que seg$n E. Eead corresponde a la sociedad actual, es aquel donde los !óvenes son quienes sa#en y quienes ensean. Seg$n esta autora, ya no "ay padres que transmitan sino pares: ...9 5...los adultos de #o deben interpretar que su propio pasado es incomunicable deben enseñar a sus #ijos, por muc#o que ello les duela, que no tienen que interro!arlos, porque nunca podrán entender. 6ecesitamos convencernos de que nin!una otra !eneración e-perimentará jamás lo que #emos e-perimentado nosotros. +esde este punto de vista #emos de reconocer que no tenemos descendientes, del mismo modo que nuestros #ijos no tienen antepasados. . . n este punto de ruptura entre dos !rupos radicalmente distintos e &ntimamente vinculados, es inevitable que ambos est3n mu solos”
%n cuánto a la función socializadora de la escuela el autor se maniesta repensando dic"a función a las caracter(sticas del mundo actual: la escuela en relación a la cultura “ . .. consiste en la formación del n'cleo estable, de los marcos de referencia, que permitirán enfrentar los cambios permanentes a los cuales nos somete la producción cultural del nuevo capitalismo. +ic#os marcos de referencia son tanto culturales como co!nitivos. +esde el punto de vista cultural, las informaciones las opciones de conductas son procesadas a trav3s de una serie de operaciones de
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identi7cación, de conocimiento, de diferenciación, de ad#esión o de rec#azo, que suponen la e-istencia de un n'cleo cultural básico, desde el cual es posible ele!ir responder a los mensajes culturales. +esde el punto de vista co!nitivo sucede al!o similar el acceso a las informaciones provoca procesos de comparación, asociación, transferencia, etc. que dependen del desarrollo intelectual del sujeto. $uando este n'cleo cultural co!nitivo no está constituido o lo está mu d3bilmente, los ries!os de alienación de dependencia aumentan considerablemente, a que los medios de comunicación, particularmente la televisión, no #an sido concebidos para formar este n'cleo. La oferta de los nuevos medios a!encias de socialización supone que los usuarios a tienen las cate!or&as las capacidades de observación, de clasi7cación, de comparación, etc., necesarias para procesar e interpretar el enorme caudal de datos que ellos ponen a nuestra disposición.”
Para /edesco, la escuela de#e introducir elementos que la sociedad no está ofreciendo naturalmente:
“"prender a vivir juntos, por su parte, implica vivir e-periencias de contacto con el diferente, e-periencias de solidaridad, de respeto, de responsabilidad con respecto al otro, que la sociedad no proporciona naturalmente. La escuela puede, en este sentido, recuperar su función cultural a trav3s del desarrollo de e-periencias que no tienen lu!ar en la cultura e-terna. +ic#o de otra manera , la escuela puede cumplir un papel cultural y social signicativo si asume un cierto grado de tensión y conicto con la cultura. Su papel no es“adecuarse” a la cultura popular, ni tampoco, por supuesto, aislarse ni vaciarse de contenidos por la vía del empobrecimiento de los contenidos ue ella transmite. !a idea central consiste en recuperar el car"cter de la escuela como espacio donde es posible programar e#periencias discutidas socialmente.”
Lo que se plantea, en denitiva, es una acción contracultural de la escuela, con todo lo que esta postura conlleva, el tra#a!ar 3contra+ corriente4, teniendo en cuenta, que "asta &pocas relativamente crecientes, familia, escuela y sociedad, tra#a!a#an en la misma dirección, transmitiendo un c$mulo de valores y conocimientos, avalados por la mayor(a de la sociedad. %n ese punto tam#i&n coincide /enti 0anfani : “or el contrario, podr&amos decir que el curr&culo escolar ar!entino actual es contracultural (#asta cierto punto, por cierto) en la medida en que no es lisa llanamente neoliberal. %n ejemplo basta para corroborarlo. $ientras la sociedad actual privilegia los valores materialistas %la riue&a, la ganancia, el consumo ostentoso, la frivolidad, etc.' por sobre los del espíritu %las cualidades morales o (ticas, el conocimiento, la sabiduría, las artes, la seriedad, etc.' el currículo ocial de la escuela %y la propia tradición cultural de la mayoría de los docentes' privilegia los segundos. $ientras en la sociedad prima una cierta tolerancia por las desigualdades sociales, en la escuela
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predomina la visión de una sociedad igualitaria con diferencias predominantemente funcionales, pero igual dignidad para todos.” 6/enti 0anfani ?D9
5e all( la sensación social de una demanda permanentemente insatisfec"a en dónde los distintos actores sociales nos culpamos mutuamente: 3La culpa es de la familia4 dicen los vecinos 6y tam#i&n los maestros9, 3%sto pasa porque en la escuela no le ensean educación4, dicen los que educaron a sus "i!os en d&cadas pasadas, 3se "an perdido los valores4, 3%so viene de la casa4, y as( podr(amos seguir, pero el resultado concreto es insatisfacción social, desconanza y ale!amiento entre padres y maestros, falta de referentes para los nios. FGui&n educaH %n cuanto a la modalidad que adopta el modelo neoli#eral en lo referido a la transmisión cultural, 0anfani y /edesco tienen una visión diferente. 0anfani cree que e)iste en el sistema $nico del mundo, una vocación "egemónica. egemon(a signica . . . 3la voluntad de imponer al conjunto de la población, los contenidos culturales, la visión del mundo, propia del sector social dominante5.
Al igual que los demás autores tra#a!ados, 0anfani asume la realidad de las grandes masas de e)cluidos que quedaron en el mundo como producto de la aplicación del modelo li#eral. %ste autor maniesta que los e)cluidos no son indiferentes, quieren ser incluidos . . .en el mundo capitalista, en el consumo. “8o, ese &mpetu educativo del primer capitalismo parece #aberse debilitado. $ada vez cuesta más que el stado 7nancie e-panda los servicios educativos de calidad. $ada vez interesa más la escolarización menos el desarrollo de conocimientos, competencias valores en las personas. 0sta es la evidencia maor de que 5al sistema capitalista5 no le interesa in4uir sobre la subjetividad de los e-cluidos del mercado de trabajo (aunque no del consumo de bienes materiales simbólicos del capitalismo) o bien signica ue la sociali&ación necesaria para el control de la población se reali&a por otras vías, menos formales y e#plícitas y por lo tanto menos )políticas)* “ 0anfani ?D9
;tros 3dispositivos de transmisión cultural4 sustituyen a la escuela que, para muc"os, está pedagógicamente o#soleta, además de no lograr la integración social. 0anfani cita a Perelman: 39nvesti!adores #an demostrado que la escuela tiene efectos nefastos sobre aquella el fracaso escolar, que afecta a la maor&a de los estudiantes, los #iere en su amor propio, mientras que el 3-ito le
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proporciona a los pocos ele!idos una sensación de se!uridad un sentimiento de superioridad “
%s casi o#vio aclarar, que quienes se sienten incluidos, en su casi total mayor(a pertenecen a las clases medias y altas. Pero si la escuela no logra la inclusión social, no cumple con su función de socialización, F-ómo e)plicamos que la mayor(a de la sociedad, comparta conceptos, valores, pre!uiciosH F-ómo !usticamos que nuestro pequeo pa(s, que fue llamado "iperintegrado se est& partiendo en dosH %n dos partes claras: de un lado, los que se sienten portadores de la "onradez, el tra#a!o, los valores, la decencia del otro, los e)cluidos con la presunción so#re ellos de delincuencia, drogadicción, violencia. 2nos contra otros. %s más, muc"as veces, tam#i&n son portadores de estos pre!uicios los propios maestros responsa#les de la educación de los nios po#res. “La maor&a de la población cree en el mercado como mecanismo más e7ciente (:casi 'nico;) de asi!nación de recursos, cree en la 5le de la oferta la demanda5, en el carácter sa!rado de la propiedad privada, en un stado que es corrupto, burocrático que tiene que ser m&nimo no intervenir en la econom&a, etc., etc. s #asta in!enuo pre!untarse 5qui3n enseñó5 estos contenidos, en qu3 curr&culo en qu3 pro!rama escolar estaban incluidos. n verdad, podr&amos decir que no los enseñó (en el sentido fuerte de una acción peda!ó!ica formal e institucionalizada) nadie fueron aprendidos por la maor&a. orque las 5cosas sociales5 educan a trav3s de la e-periencia (la vida, el trabajo, la posición que se ocupa en los mercados, etc.). < los medios masivos de comunicación (con sus 5comunicadores e-itosos5) #icieron el resto convirtieron una e-periencia en una doctrina . . .” 60anfani ?D9
!anfani cree, al igual que Tedesco, que e"iste un debilitamiento de las instituciones de socialización, tales como la familia y la escuela y que se #an sustituido por el consumo y los medios masivos de comunicación, pero
am#os autores discrepan en cuanto a la causa: /edesco cree que es por una primac(a de la demanda en tanto 0anfani cree que esa demanda "a sido creada por el mismo sistema para perpetuarse. Am#os autores 6/edesco y 0anfani9, tienen dos visiones distintas en lo que "ace al mismo proceso socializador: en tanto /edesco mantiene la postura más conocida que estudia la socialización desde instituciones socializadoras 6familia y escuela9, 0anfani mantiene un punto de vista
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más novedoso y dinámico "aciendo "incapi& en los aspectos menos institucionalizados del proceso de socialización ,pero no por ello, menos incidentes en el mismo: “ero lo que no está en crisis porque no puede estarlo es lo que en el si!lo =9= se llamaba 5la educación objetiva o educación de las cosas5. n este sentido, la casa donde se #abita, el lu!ar que se ocupa en la familia, el tipo de familia, el barrio, la len!ua que se #abla, la comida que se come, los lu!ares que se transita, la ropa que se viste, etc. 5educan5). recisamente esto sucede cuando no se reconoce cuánto de no institucional, de no formal, de espontáneo, de 5natural5 no calculado tiene el proceso de socialización. La confusión puede encontrar ori!en en una especie de sobrevaloración de una visión peda!o!icista de la transmisión cultural que supone 5ámbitos institucionales5 especializados, un contenido a transmitir (una 5referencia absoluta5), las mediaciones, etc. $uando se tome conciencia de que lo más importante en el proceso de socialización transcurre en el ámbito de lo no pensado no plani7cado, entonces la idea de crisis del proceso de socialización tendrá un carácter más relativo.”
FPor qu& no es posi#le prescindir de la función de socialización de la escuelaH “8a ciertas cosas que es preciso aprender (en especial el aprender a aprender, #ec#o de competencias !en3ricas poderosas tales como el dominio de los len!uajes naturales simbólicos, la ló!ica cient&7ca de las ciencias naturales #umanas, etc.) que sólo all& se pueden aprender> es decir, que no se aprenden ni en la familia (por más capital cultural que dispon!an sus miembros adultos) ni en todas las instancias de producción difusión de bienes culturales.”
I nada más ni nada menos, que para poder convivir !untos 6so#re esta idea, volveremos más adelante9 Sin em#argo, los sistemas actuales se desinteresan cada vez más de la %ducación p$#lica, ante lo cual ,0anfani especula so#re varias posi#ilidades: +se ve a la escuela como una institución o#soleta6 recordemos lo que "a#lamos so#re la contracultura9 + porque reemplazar a la escuela con medios tecnológicos implicar(a un gran negocio , + porque no tienen inter&s en distri#uir el conocimiento más que entre la &lite que se educa en ám#itos privados,
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+ a causa de que los valores que a la clase dominante le interesa que tengan las demás clases, no se transmiten a trav&s de la escuela sino, por e!emplo, a trav&s de los medios de comunicación. 6competencia, e)celencia, individualismo, etc.9 Pero de ninguna manera, se plantea una postura de resignación o naturalización:4 . .. no basta constatar demostrar que #o la escuela sino se #ace necesario rendir cuentas de este fenómeno que no tiene nada de natural ni de inevitable. +or el contrario, debilitamiento de la escuela %de la escuela pblica -abría ue agregar, no de las escuelas privadas de elites ue cada día go&an de mejor salud' es tambi(n el resultado de políticas activas o pasivas formadas por acciones y omisiones bien concretas ue es preciso anali&ar y denunciar %por ejemplo, de desnanciamiento, de abandono, de reformas euivocadas, etc.'. e este modo, la desinstitucionali&ación deja de ser una fatalidad a la ue -ay ue adaptarse sin m"s, sino un proceso bien real con sus protagonistas, intereses, relaciones de fuer&a, conicto, etc.”
FGu& se puede aportar para reconstruir la función socializadora de la escuelaH Los tres autores coinciden en los dos pilares de la educación en el siglo ''* :aprender a aprender y aprender a vivir $untos. Los "umanos de#en poder seguir construyendo su "istoria !untos de lo contrario, nos iremos pareciendo a esas pel(culas de ciencia cción que presentan un mundo devastado, en donde se "ace realidad la pesadilla de o##es : todos contra todos. -omo lo indica el autor, los valores no son $nicos ni eternos, se construyen, se mantienen, se cam#ian, y la luc"a por los derec"os es el motor permanente de la "umanidad. %n esta &poca, cuando se "a#la del 3n de la "istoria4 y del 3n de las ideolog(as4 se tiende a olvidar todo lo que "ay en la "istoria de pol(tica y de voluntad colectiva organizada, esto es, cuánto depende de nosotros mismos. Acordamos en que la sociedad de consumo está transmitiendo valores y comportamientos que no son los que nos "acen dignos de ser "umanos, por lo tanto la escuela tiene que tra#a!ar contra la cultura imperante, como dice 0anfani sin la ingenuidad de la d&cada de los >?, 6que cre(a en una escuela totalmente li#eradora y constructora del "om#re nuevo9 pero s(, esperanzada en su función.
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Ia que la vida, el mercado, los pares, los medios, todo educa e inculca valores, gustos, predisposiciones, la escuela de#e introducir en su tra#a!o lo que naturalmente no se da : “supone introducir en la escuela la posibilidad de vivir e-periencias que no se producen “naturalmente” en el espacio e-terno a la escuela”
Para esto la escuela precisa todos los recursos institucionales, culturales, pedagógicos, didácticos, porque la escuela está compitiendo con los medios de comunicación, pretendiendo formar su!etos sa#ios competentes y cr(ticos. Para esto se de#en transmitir las "erramientas más poderosas de la cultura acumulada por la "umanidad , como lo "acen las &lites desde los colegios privados 6dice 0anfani9 , sólo que, en algunos casos en la educación privada, estas "erramientas vienen acompaadas de valores tales como el ego(smo, el consumismo, la competencia, el cinismo, la tolerancia frente a las desigualdades y a las miserias del mundo. Por eso, en la escuela p$#lica, en donde predomina la lógica del inter&s general, y de la inclusión social, se de#e estimular la apropiación de lo me!or de la cultura disponi#le, pero, como #ien marca el autor, no nos alcanza con lo me!or de la ciencia y la tecnolog(a: “ ero quienes queremos no sólo el pro!reso, entendido como liberación del #ombre de los determinismos que devienen de la naturaleza, sino tambi3n de la dominación de unos #ombres sobre otros #ombres, debemos incluir en el )programa de sociali&ación) no sólo las -erramientas ue le permiten al -ombre refor&ar su poder sobre la naturale&a, sino las -erramientas intelectuales y morales %los valores universales -istóricamente construidos' ue le permitan liberarse de las otras dominaciones %la del g(nero, la riue&a, la etnia, la religión, etc., etc.'. . . . La educación espontánea de las cosas (la del mercado sus lees, la de la escasez la e-clusión, la de la e-plotación, la de los medios orientados a la b'squeda de la !anancia el ratin!, etc.) tenderá a la reproducción de una #e!emon&a que es tanto más poderosa cuanto menos se presenta como el resultado de una inculcación puede entonces rodearse de todas las cualidades de lo obvio natural”
La lectura de este art(culo de 0anfani nos de!a clara su postura ante los pro#lemas de socialización de las instituciones educativas del presente:
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+ %l modelo neoli#erales $nico, "egemónico y dominante en el mundo "a penetrado las conciencias a trav&s de los medios de comunicación ,el mercado, la sociedad en general y a veces, tam#i&n a trav&s de las instituciones que no presentan alternativas. + %ste modelo genera e)clusión, marginalidad, segregación residencial, retroceso en los derec"os "umanos de millones de personas. + “La escuela p'blica puede constituirse en un espacio contracultural, a condición que sus prota!onistas se lo propon!an. *u fuerza dependerá de la cantidad calidad de recursos de diverso tipo que lo!re movilizar de la inteli!encia que use para emplearlos.”
Eaestra Ana#el Joc"a 6c"arla para concursantes A5%E2 119
K*KL*;JA0MA -ullen -arlos 3Autonom(a moral,participación ciudadana y cuidado del otro4 /%5%S-;, uan -arlos, 3%ducación y "egemon(a en el nuevo capitalismo. Algunas "ipótesis de tra#a!o4, en Propuesta %ducativa, 0LA-S;, Kuenos Aires, ?<.
/%N/* 0AN0AN*, %milio, 3Socialización4, en AL/AE*JAN;, -arlos 6%d.9, /&rminos cr(ticos. 5iccionario de sociolog(a de la cultura. Paidós, Kuenos Aires, ?<. 1 a n i g á P
/enti 0anfani %milio: 3Notas so#re la escuela y los modos de producción de la "egemon(a4 Propuesta %ducativa, Col. 1<, nO <>, !ul. ?D
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