LA PROPAGANDA SOVIÉTICA

LA PROPAGANDA SOVIÉTICA Del inicio de la l a propaganda al comunismo internacional internacional

La propaganda soviética Historia del Mundo Actual 1º Grado en Periodismo

INTRODUCCIÓN ............................................ .................................................................. ............................................ ........................................ .................. 2 1. LA PROPAGANDA BOLCHEVIQUE Y SOVIÉTICA: EL IMPACTO DE LA CARTELÍSTICA ..................................................... ............................................................................ .............................................. ........................... 3 1.1. 1.2. 1.3.

........................ 4 ARTISTAS QUE CONTRIBUYERON A LA CREACIÓN PROPAGANDÍSTICA ........................ ........................................................ .............. 6 LA TEMÁTICA Y ESTILÍSTICA DE LOS CARTELES .......................................... .................................................................... ............................................. .................................... .............. 7 CONCLUSIÓN .............................................

2. EL CINE SOVIÉTICO ................................ ...................................................... ............................................ ........................................ .................. 8 3. LA INTERNACIONAL COMUNISTA: ................................. ....................................................... ............................... ......... 12 L A I NTERNACIONAL COMUNISTA: SU FUNDACIÓN ............................................ ............................................................ ................ 12 EHÍCULO DE DIFUSIÓN : EL HIMNO DE LA I NTERNACIONAL ............................................ V EHÍCULO ............................................ 13

4. PROPAGANDA SOVIÉTICA EN ESPAÑA............................................. ......................................................... ............ 15 4.1. MENSAJES PROPAGANDÍSTICOS .......................................... ................................................................ ...................................... ................ 16 4.2. CANALES DE DIFUSIÓN ........................................... ................................................................. ............................................ ........................... ..... 17

CONCLUSIÓN ............................................. ................................................................... ............................................ .......................................... .................... 21 BIBLIOGRAFÍA .......................................... ................................................................ ............................................ .......................................... .................... 22 ANEXO: ILUSTRACIONES ....................................................... ............................................................................. ............................... ......... 24

Componentes del grupo: Santos Martínez Álvarez Sergio Mercader García José Manuel Trives Almira Margaryta Yakovenko

Epígrafe seleccionado : TEMA 3: Desafíos ideológicos totalitarios: el comunismo. -

4. La propaganda revolucionaria y el comunismo internacional.


INTRODUCCIÓN Las revoluciones no las hace una persona, las revoluciones las hacen las masas. Sin embargo, para concienciar a una población en la que el 60% de los habitantes son analfabetos hace falta una gran labor de educación y adoctrinamiento. Eso mismo debió de pensar Lenin al alcanzar el poder en 1917 y llegó a la conclusión de que la mejor manera de influir en la población es a través de la propaganda. A partir de este momento, en Rusia, y lo que posteriormente se convertiría en la URSS, empezó a desarrollarse un intenso movimiento propagandístico que llego a dominar toda la vida y cultura del momento. La propaganda se encontraba presente en cualquier ámbito de la vida cotidiana, desde los carteles que veías cada día en los muros de las calles hasta en las proyecciones de películas que se hacían en el cine, los periódicos, las escuelas, los hospitales, los monumentos instalados en los lugares más importantes de una ciudad y que conmemoraban a los padres de la revolución, las bibliotecas y cualquier otra institución. Comenzó a formar parte de un ideario colectivo compartido por todos los ciudadanos soviéticos. No se podía escapar de la propaganda porque esta se encontraba en todas partes y era promovida sin cesar. La labor de la propaganda consistía tanto en concienciar a las masas pasivas como en promover la acción y la agitación de las masas más activas o más conscientes del nuevo cambio de la revolución. Todo esto realizado desde el Estado que era, precisamente, el único capaz de gestionar y controlar la vida de todos los ciudadanos desde San Petersburgo hasta Vladivostok. Es precisamente por esa razón, la importancia que tuvo la propaganda en la sociedad soviética y un poco más tarde en el resto del mundo extendiéndose gracias a la genial labor del Komintern, por lo que hemos elegido este tema para nuestro trabajo. La metodología utilizada ha sido básicamente el estudio de libros que tratan sobre el tema, tesis o artículos disponibles tanto en internet como en papel. A esto se ha unido además el análisis de una gran parte de la producción cartelística entre 1917 y 1923 y el visionado de ciertas películas, o fragmentos extraídos de ellas, claves de la época con el objetivo de encontrar las similitudes entre ellas y la presencia de los valores propagandísticos que tanto difundían.


1. LA PROPAGANDA BOLCHEVIQUE Y SOVIÉTICA: EL IMPACTO DE LA CARTELÍSTICA En Rusia, justo después de la Revolución de Octubre, tuvo lugar un nuevo fenómeno que inundó las calles del nuevo Estado: la propaganda bolchevique. Cerca de 4.000 carteles diferentes (57,5 % impresos y 42,5% hechos a mano) fueron producidos entre 1918 y 1921, aunque es posible que esta cifra fuera en realidad mucho más grande. El lenguaje visual poblaba las calles de Moscú y Petrogrado así como de los pueblos y zonas rurales de todo el vasto territorio ruso en un intento de formar a las masas conforme a los nuevos ideales soviéticos e infundirles unos valores que deberían defender hasta el día de su muerte. Es necesario entender que los carteles propagandísticos fueron el medio que más se usó durante los primeros años del establecimiento del régimen ya que la mayor parte de la población

era analfabeta y la imagen era el mejor medio que tenían los

propagandistas de hacer llegar su mensaje a toda la población. Los antecedentes más directos de estos carteles fueron el lubok, los iconos religiosos, las revistas satíricas que tuvieron su gran expansión en el siglo XIX en toda Europa y, por último, los carteles pre-revolucionarios. Quizá los lubki sean los más influyentes ya que se trataba de imágenes populares impresas en tablas de madera caracterizadas por usar simples gráficos que relataban historias literarias o religiosas. En el siglo XIX evolucionaron hasta convertirse en litografías y es posible que luego, a principios del siglo XX, se convirtieran en los carteles usados por los propagandistas. Durante la Revolución de Octubre el cartel se impuso el deber de guiar del conocimiento de la realidad a la acción según la línea de intereses de los bolcheviques. El aparato de propaganda se tuvo que agilizar y potenciar al máximo con el fin de hacer llegar sus ideas y reivindicaciones a todas las masas de la población, sobre todo a los obreros, campesinos, soldados y mujeres que se consideraban como unas revolucionarias más. Los carteles pretendían orientar al pueblo hacia el apoyo de los ideales del nuevo régimen dándoles a entender que el cambio político estaba a punto de producirse y que con este cambio todos saldrían ganando y romperían de una vez por todas con el yugo del capitalismo y del gobierno de los zares. Los muros se llenaron de pancartas utilizando un lenguaje sencillo y lleno de eslóganes además de imágenes que representaban lo escrito para que, de esta forma, la mente de la población analfabeta


también se impregnara de las ideas revolucionarias. Para Lenin, los proletarios no tenían la capacidad de adquirir por sí solos una conciencia revolucionaria de la explotación capitalista. De acuerdo con esto, la élite sería la encargada de ayudar a su transformación en revolucionarios y tendría el deber de despertar la conciencia revolucionaria de las clases proletarias. La élite, al frente del partido, es la que tiene la conciencia de la revolución. La masa solo posee la fuerza ciega. Este postulado justifica la función educativa de la propaganda soviética y de esta forma, la masa y el partido forman una unión, son complementarios, porque uno no puedo actuar sin el otro. El partido tiene las ideas, la masa la fuerza para llevarlas a cabo. Este hecho se podría resumir en el siguiente gráfico:

ÉLITE (Partido)

Educación política

MASA

De esta forma surge en 1918 el OSVAG, un Ministerio de la Propaganda compuesto por propagandistas y agitadores que debían llevar las ideas del partido a la población.

1.1.Artistas que contribuyeron a la creación propagandística La campaña de agitación y propaganda contó desde el primer momento con la colaboración de artistas como Mayakovsky, Cheremnykh, Alexander Apsit, Dmitri Moor, Victor Deni, Vyacheslav Polonsky, Leonid Pasternak o el poeta Demyan Bedny. Posiblemente, Apsit sea el primer maestro real del cartel político soviético. Sus carteles, por lo general muy alegóricos, eran de largo formato con gran uso del color y enorme simbolismo. Un ejemplo de ello es su cartel La Internacional (ilustración 1.1) producido en 1918 en el que los trabajadores intentan tirar un monstruo de su pedestal etiquetado como „„El Capital‟‟. El texto que hay debajo de la imagen, son los versos de

La Internacional. En general, había una tendencia al exceso de detalles, no solo en los carteles de Apsit, sino que también, en todos los carteles de esa época (1918-1919). Se usaron muchas alegorías y mitos que se adaptaban a la situación revolucionaria. Los textos que acompañaban las imágenes eran oscuros, religiosos, clásicos y pasivos en comparación a los carteles urgentes, simples y directos de los años posteriores. Los


elementos de estos años y los de la guerra civil se fusionaron y unieron en lo que conocemos como el clásico cartel propagandístico bolchevique. Otro de los autores más importantes fue Dmitri Moor que fue considerado un verdadero artista cartelístico. Trabajó durante la Guerra Civil Rusa en Litizdat que formaba parte del Gozisdat, una editora estatal establecida en 1919. Durante esta etapa, se produjo un gran incremento de los carteles de carácter militar y de agitación y destacó la obra de tipo heroico de Moor. De entre sus carteles destaca el de ¿Te has apuntado como voluntario? (1.2) que llamaba voluntarios a unirse a las tropas del

Ejército Rojo y Octubre de 1917 y Octubre de 1920 (1.3) con motivo del tercer aniversario del triunfo de la revolución bolchevique. Viktor Deni fue otro de los artistas que trabajó en Litizdat junto a Moor. Sus ilustraciones fueron mucho más caricaturizadas, casi se podía decir que formaban parte de viñetas de periódicos aunque no por ello hay que restarle importancia ya que sus imágenes eran agudas y satíricas. Uno de sus carteles más importantes es el de El camarada Lenin limpia el mundo de basura (1.4) en el que aparece Lenin con una escoba sobre un globo terráqueo barriendo

y echando fuera a reyes, burgueses y a un clérigo, representantes del mundo capitalista contra el que luchaba la revolución. Posteriormente, en 1919, se crearía la Agencia Telegráfica Rusa (ROSTA) bajo la iniciativa de dibujantes tan importantes como Cheremnykh y Mayakovsky. Esta agencia se dedicaba principalmente a la producción de carteles y periódicos y estableció desde el principio tres áreas de trabajo: información, agitación y supervisión de la prensa soviética. Además de eso, se crearon las „„Ventanas de la ROSTA‟‟ que eran boletines de información que combinaban la función de cartel, periódico y revista y transformaba en imágenes la información y los decretos del Estado. Había una gran unidad entre la imagen y el texto para que, de esta forma, la población analfabeta captara el mensaje. Los colores que se usaban eran planos, casi simbólicos (los obreros se representaban con el color rojo y los burgueses con el negro) y solo usaron un máximo de tres tintas ya que la ejecución de la obra debía ser rápida, a veces solo pasaban cuarenta minutos entre la llegada de la noticia y la realización de la imagen. De entre los carteles de Mayakovsky destaca el de „„Los ucranianos y los rusos tienen el mismo reclamo‟‟ (1.5)

producido durante la Guerra Polaco-Soviética de 1920, año en el

que la producción cartelística militar seguía siendo alta.


1.2.La temática y estilística de los carteles Toda la producción cartelística soviética está dominada por una simbología que se iba repitiendo de cartel en cartel y que acabó por establecerse como la simbología propia del régimen. Hablamos de los conocidos símbolos de la hoz y el martillo que representaban al proletariado y al campesinado, las estrellas rojas que simbolizaban al Ejército Rojo, la misma imagen del campesino y del proletario que solían ser unos hombres fuertes, de constitución casi heroica, y comúnmente pintados de rojo, el sol que iluminaba las ciudades y el campo y que representaba la esperanza de un futuro mejor gracias al comunismo y por supuesto la imagen de un brazo fuerte, que representaba el poder del pueblo y los obreros. Por supuesto, la simbología iba también en función de la temática que predominaba en esos años. En 1918 se dio mucha más importancia al terreno político y económico ya que el régimen se acababa de establecer y estas eran las cuestiones que más preocupaban a la población. Sin embargo, en 1919 se produjo un considerable cambio en la temática. Los carteles de carácter militar adquirieron mucha más importancia debido al inicio de la guerra Polaco- Soviética. Era necesario concienciar a la población y buscar voluntarios que defendieran la patria del invasor. En 1920, la temática militar empezó a ser menos importante aunque no disminuyó considerablemente. No obstante, otros temas como la Internacional Comunista o el tercer aniversario del gobierno soviético adquirieron vital importancia. La mayoría de los carteles que se realizaron durante ese año estaban destinados a hacer una promoción del comunismo tanto nacionalmente como internacionalmente. En 1921 la temática volvió a cambiar. La guerra Polaco- Soviética había llegado a su fin pero un nuevo


hecho requería la atención de la población: la creación en 1921 de la NEP. 60 50 40 Políticos

30

Militares 20

Económicos

10

Culturales

0 1918

1919

1920

1921

Total

La mayor parte de los carteles que se produjeron es ese año fueron de tipo económico ya que este era el tema que estaba en boca de toda Rusia. La tabla anterior muestra de forma gráfica todos los cambios en la temática propagandística con su correspondiente año. El último grafico corresponde al total de toda la producción. En él, podemos observar que, pese a todos los cambios, el tema militar fue el que más carteles produjo.

1.3.Conclusión Queda claro la importancia del trabajo casi colosal de la propaganda soviética en su función de adoctrinar a las masas. En los carteles se mezclaba lo popular y lo vanguardista, el realismo, la simplicidad y los excesivos detalles, el cubismo y el surrealismo, los colores y las imágenes planas, el dibujo de líneas gruesas, en algunos casi simbólico que recordaba a los dibujos de las iglesias románicas en su función de comunicar ideas a la masa analfabeta.


2. EL CINE SOVIÉTICO Tras la revolución de 1917, en el momento cumbre de establecimiento de las bases de la nueva mentalidad soviética, Lenin dijo: "de todas las artes, para nosotros la más importante es el cine ". El cine soviético significó un enorme cambio respecto al

cine que había existido hasta su aparición. ¿Qué cambio produjo el cine soviético en el cine? Para los comunistas el cine que hacían no era entretenido pero no veían esto como algo negativo ya que no categorizaban

el cine en entretenido o no entretenido sino que cambiaron esas

categorías por las de verdadero y falso convirtiéndose así el cine de ficción en una especie de documental que narra la realidad. Así podemos afirmar que el cine soviético tenía como objetivo hacer pensar al espectador, con el visionado de las películas se pretendía provocar una determinada reacción en el espectador: mostrarle una realidad, hacerle pensar sobre ella y, por consiguiente, hacerles crecer en función a esa verdad mostrada. Dentro de este adoctrinamiento que pretendían llevar a cabo podemos diferenciar dos partes distintas: por un lado mostraban la posibilidad real de una nueva sociedad, por otro lado enseñaban cómo llegar hasta ella. Para hacer más fácil este adoctrinamiento cada película tenía un mensaje determinado dirigido al público facilitando así el llegar a los espectadores y conseguir el objetivo de la película. No se centraron en un solo tipo de público ya que consideraban que “todo el mundo era una pieza necesaria de un gran puzle o, al menos, tenía la posibilidad de convertirse en esa pieza”

1

. No hay que olvidar además, el papel propagandístico que adquirió el cine

soviético desde sus inicios. El 80% de la población de aquella época era analfabeta, por lo que el cine, junto a la radio y a los carteles, se convierte en el medio más eficaz de llegar a las masas, instruirlas y formarlas dentro de la nueva mentalidad reinante. El abandono del entretenimiento y la búsqueda del adoctrinamiento quedan bastante claros si analizamos la temática de las películas producidas por la URSS en sus primeros años:

1

José Cabeza San Deogracias


80% 70% 60% Política

50% 40%

Economía

30%

Cultura

20%

Familia, amor…

10% 0% % de Películas producidas

Uno de los rasgos característicos de este cine era la creación de figuras a imitar, se pretendía que los espectadores llegaran a ser como los personajes que mostraban en las películas. Esos personajes podrían ser catalogados como “héroes”, los

cuales no se

limitaban a ser uno más de la historia que se mostraba en la película sino que eran usados para dar lecciones a los espectadores a través de su forma de comportarse o de sus atributos. Era habitual la aparición de personajes que no eran más que la representación del soldado perfecto que buscaban los soviéticos: soldados valientes entregados en cuerpo y alma a la causa. Al resaltar su entrega a la causa, es decir, a la revolución, el resto de aspectos como los sentimientos pasan a un segundo plano y carecen de importancia. Sin embargo el soldado no era la única figura heroica utilizada. Durante los primeros años de la revolución se empezó a usar la imagen del proletario o campesino. Este aparecía representado en la pantalla desde su propio punto de vista y sus intereses de clase lo que supone una gran renovación en el cine mundial ya que rompe con la visión burguesa según la cual era representado en el cine anterior al soviético. A este respecto, podemos mencionar la película La huelga (1926) de Eisenstein, que quizá sea además la primera película en la que la masa es la protagonista colectiva. Otra de las películas míticas del mismo director es la de El acorazado Potemkin (1925), la cual, al igual que la primera, es un magnífico ejemplo de la

principal innovación del cine soviético: la utilización del montaje en el cine propagandístico, algo de lo que tomará muy buena nota el cine nazi. Ejemplar es el uso del montaje en la escena de las „„escaleras de Odessa ‟‟ en

el que se van alternando

imágenes en primer plano de la gente abatida con el dramatismo y el dolor impresos en


sus rostros y la imagen de los cosacos impasibles, de los que solo se muestra el traje y las botas relucientes, que van disparando mientras descienden las escaleras. Sin embargo, anterior a las películas, fue la creación de documentales y crónicas, que tienen su inicio en la época zarista pero que no adquieren importancia hasta 1917, que pretendían hacer un seguimiento de los acontecimientos de la revolución y la posterior guerra civil, así como, de la vida cotidiana de los ciudadanos soviéticos. Se hacían grabaciones en las calles y en los frentes a los cuales los operadores se tenían desplazar. Algunos de los documentales realizados durante la guerra civil nos permiten hacer un seguimiento, desde su título hasta el reportaje en sí, de la geografía del conflicto y del desarrollo de los acontecimientos: Toma de Odesa por el Ejército Rojo, Toma de Crimea , El frente Checoslovaco , El Frente de Vrangel , El frente del Cáucaso.

Quizá Dziga Vértov, pseudónimo de Denís Abrámovich Káufman, fue uno de los principales directores de cine soviético que revolucionó el género documental. Una de sus principales características era la búsqueda de un efecto poético en sus filmes que consiguiera impactar al espectador. Esta experimentación en el cine dio como fruto la creación de su teoría del Cine-Ojo basada en " fragmentos de energía real que, mediante el arte del montaje, se van acumulando hasta formar un todo global " que permitían "ver y mostrar el mundo desde el punto de vista de la revolución proletaria mundial ”.

Vértov fue además, el autor de la primera gran recopilación de grabaciones para celebrar el aniversario de la revolución. Su título fue precisamente „„El aniversario de la revolución‟‟ y

el documental consistía en el montaje de fragmentos que procedían de

números del Cine-semana, cortometrajes que se grabaron entre 1918 y 1919 y que cumplían la función de un noticiario. Aparte de esto, Vértov se sirvió también de los trenes de agitación para el estudio, la elaboración y el montaje de las películas allí emitidas e incluso fue nombrado encargado de la sección de cine del Revolución de Octubre , uno de los trenes de agitación de mayor importancia. Estos trenes contaban con bibliotecas, aulas, cantinas, salas de teatro y cine, salas de música y salas para el partido. Nacieron como un servicio de propaganda del departamento militar y visitaban las zonas donde creían que era necesaria cierta agitación, así acudían a esos lugares con el material que creían conveniente así como instructores a su cargo.

El objetivo de estos trenes era


básicamente la propaganda y la agitación, además facilitaban la conexión entre las regiones periféricas que quedaban separadas del centro tanto en términos de transporte como de comunicaciones; así los trenes recorrían prácticamente todos los rincones del país. Esto es una muestra más de la confianza soviética en el cine y su capacidad para acercar a las personas al movimiento. Fue entre 1918 y 1921 los años de oro de estos trenes de agitación pero a partir de 1921 comenzó su declive, Vértov intentó reflotar el proyecto mediante los “automóviles de agitación‟‟ pero sin gran éxito. Algunos de los directores más importantes del cine soviético, aparte de Vértov y Eisenstein, fueron Kuleshov o Pudovkin. Durante la época soviética, había libertad y estímulo para producir películas, siempre y cuando estuvieran en la línea ideológica oficial, sin embargo los líderes del partido advirtieron que esto era bastante difícil de controlar así que, bajo el gobierno de Stalin, los controles serían más rígidos y muchas películas terminarían cortadas, re montadas o directamente prohibidas. Uno de los más populares filmes de los años 30 fue Circus. Durante los años cuarenta se pueden destacar Aleksandr Nevsky e Ivan Grozny, ambos de Eisenstein. Tras la muerte de Stalin, cine soviético florece nuevamente, con filmes como Ballada o Soldate que ganó el premio BAFTA de 1962 en el rubro mejor película, y Letyat zhuravli, único film soviético que ganó la palma de oro en el Festival de Cannes.


3. LA INTERNACIONAL COMUNISTA: La Internacional comunista: su fundación Para comenzar este fragmento del trabajo, unas palabras de Lenin en el libro titulado “La Internacional Comunista y su lugar en la historia”: “ La Tercera

Internacional fue fundada bajo una situación mundial en que ni las prohibiciones ni los pequeños y mezquinos subterfugios de los imperialistas de la Entente o de los lacayos del capitalismo, como Scheidemann en Alemania y Renner en Austria, son capaces de impedir que entre la clase obrera del mundo entero se difundan las noticias acerca de esta Internacional y las simpatías que ella despierta. Esta situación ha sido creada por la revolución proletaria, que, de un modo evidente, se está incrementando en todas partes cada día, cada hora. Esta situación ha sido creada por el movimiento soviético entre las masas trabajadoras, el cual ha alcanzado ya una potencia tal que se ha convertido verdadera mente en un movimiento internacional…”

La fundación de la Internacional Comunista data del 9 de Marzo de 1919 con la creación de un congreso en Moscú que trataba de encontrar la unión de los partidos comunistas. Buscaban convertirse en el organismo de control de la revolución en todo el mundo.

Esta Internacional se construyó por iniciativa de Lenin, por tanto, la

organización de la misma guardó una gran semejanza al Partido Comunista soviético. Los antecedentes de esta organización provienen de la Asociación Internacional de los Trabajadores, también llamada Primera Internacional, que fue fundada por Marx y Engels y en la cual sindicatos ingleses y franceses de obreros podían poner en común sus problemas y buscar soluciones conjuntas. También está inspirada en cierto modo en la Segunda Internacional, organización que tenía como objetivos una cierta mejora en la condiciones de vida de los obreros, con reducciones de horarios y una mayor protección social, además de otras propuestas. Tras estos antecedentes surge la Internacional Comunista que, en la obra de Lenin titulada "Los héroes de la Internacional Berna", tiene como objetivo “cumplir, llevar a la práctica los preceptos del marxismo y realizar

los ideales seculares del socialismo y del movimiento obrero ”.


Vehículo de difusión: el himno de la Internacional Con la creación de la Internacional se adoptó el himno que se convirtió en el mejor eslogan publicitario del movimiento obrero en su lucha contra el capitalismo. Se tomó ejemplo de la primera ocasión en la que el proletariado comenzó su rebelión, asaltando el gobierno en 1871 en la Comuna de París. La creación del Himno de la Internacional tiene patente francesa. Fue Eugène Pottier (1816-1887), un partícipe más en la Revolución francesa de 1848 y 1871, el que salió elegido como representante en la escritura del himno, ya que la vida que había padecido, siempre sumido en la pobreza, y su grandísimo talento para la composición de versos le avalaron. El belga Pierre Degeytier (1848-1932) se encargaría de musicalizar el himno escrito por Pottier. Es cantado por primera vez en el año 1888, adoptado seguidamente en el año 92 del mismo siglo por la Segunda Internacional, y se convierte, a partir de la creación de la Tercera Internacional o Internacional comunista en 1919, en el himno de la organización y de la URSS hasta el cambio de letra protagonizado por Stalin en 1944. Se buscó un himno que uniera a todos los trabajadores para facilitar la identificación con el comunismo y la lucha del proletariado por lograr sus derechos. La letra original francesa fue traducida a casi todos los idiomas, eso permitió a Lenin que la lucha contra el capitalismo se convirtiera en algo internacional, un asunto en el que todos los trabajadores del mundo estaban llamados a ser partícipes de la victoria de las clases obreras. Los comunistas cantan este himno porque refleja la lucha de las mujeres y hombres en las barricadas de la Comuna de Paris que, como dijo Marx: “ La Comuna ha demostrado sobre todo que la clase obrera no puede limitarse a tomar posesión de la máquina estatal existente, poniéndola en marcha para sus propios fines...”, sino que debe romper esa máquina estatal, por eso “cambiemos al mundo de base / hundiendo al imperio burgués”.

Los revolucionarios ven el himno como un medio por el cual todos

los trabajadores, sea cual sea el idioma, luchan unidos por la revolución poniéndose en pie y terminando con la opresión. Símbolo de esta unión y de la buena propaganda que realizaba el comunismo soviético son las palabras de Lenin: “Sea cual fuere el país en que recale un obrero consciente, fuese cual fuere el lugar a que lo empuje el destino, sea cual fuere su sentimiento de ser un extranjero, privado de idioma y de amigos, lejos


de su patria, puede encontrar camaradas y amigos gracias a la canción familiar de La Internacional”.

En definitiva, la creación de la Internacional y la adopción del himno fueron de vital importancia para lograr la integración de los sectores de trabajadores de todo el mundo en la revolución. Ningún obrero se mostró indiferente ante un congreso que logró una unión mundial.


4. PROPAGANDA SOVIÉTICA EN ESPAÑA La Internacional Comunista nace con la intención de difundir la política soviética por el mundo, siendo la madre de todos los partidos comunistas afiliados. Es, además, el brazo propagandístico de la Unión Soviética en el exterior. De esta forma, el Partido Comunista de España no es más que la sección española de este organismo internacional; por lo tanto, desde su origen, quedan oficialmente unidos. La URSS inicia sus relaciones con España después del triunfo de la Republica en 1931, año en el que se empieza a plantear un intercambio de embajadas. Los contactos bilaterales comienzan pronto y, en 1933, llega a España Mijail Ostrovski, con la misión de tramitar todo lo referente al establecimiento de relaciones. Sin embargo, la victoria de la CEDA en ese mismo año aplaza todos los contratos, que no se renovarán hasta la subida al poder del Frente Popular en 1936. Una vez estallada la guerra, Stalin decide apoyar la causa republicana viendo en la guerra civil española un proceso similar al vivido en Rusia durante su propia guerra civil. Además de esto,

la victoria del Frente Popular traería consigo grandes

probabilidades de implantación de un régimen socialista en España. En resumen, la guerra civil era vista como un paso hacia la revolución socialista, lo que supondría la realización de los objetivos del Komintern de implantar el modelo soviéticos en otros países del mundo. Dentro del conflicto bélico y el apoyo de la URSS al Frente Popular debemos situar la propaganda soviética del bando republicano. Esta propaganda, se desarrolló en una doble línea: la propaganda a la que podríamos llamar oficial o a corto plazo, que era la política del Frente Popular orientada a frenar la amenaza nazi y fascista del momento y que, para no preocupar a las demás potencias, argumentaba que la URSS no luchaba por un régimen soviético sino por la consecución de una república democrática, y la otra línea de la propaganda, que era denominada propaganda a largo plazo, destinada a difundir los logros socialistas conseguidos por la URSS, popularizar su modelo político y su modo de vida, para que el modelo de estado soviético fuera tenido en cuenta ante una eventual victoria del bando republicano. La Unión Soviética utilizó diferentes formas para la difusión de su propaganda en territorio español. Quizá la más importante de ellas fuera la prensa, producida tanto


en España como en la URSS, pero no debemos olvidar otras como las representaciones diplomáticas de la embajada y el consulado soviético en España, las difusiones radiofónicas, las propias Brigadas Internacionales, la cartelística tan presente siempre en la propaganda soviética, el cine, las editoriales e incluso, la expatriación a la Unión Soviética de los niños españoles durante la guerra. Dentro de la línea de los mensajes que glorificaban la URSS podemos distinguir entre dos tipos: los mensajes españoles y los mensajes clásicos, que se difundían en todos los países extranjeros. El lenguaje utilizado era un lenguaje bastante simple, asequible, plagado de palabras como libertad, felicidad, hermandad, unidad y bienestar. El tono de victoria y la promesa de un futuro mejor estaba siempre impreso en las palabras. Se elogiaba a Lenin y a Stalin, se comparaba continuamente la situación rusa antes de la revolución con la española. Se hablaba de la colectivización, del trabajo, de la prosperidad y de la superioridad de un mundo socialista frente al capitalismo.

4.1. Mensajes propagandísticos Uno de los principales temas tratados por la propaganda soviética era el desinteresado y solidario apoyo que ofrecía la URSS a la causa republicana. Apoyaban la lucha por la libertad y la paz, hecho por el que los españoles debían de estarles eternamente agradecidos. Como ya hemos dicho antes, se comparaba España con la URSS haciendo hincapié en que eran dos pueblos hermanos a los que unía la lucha revolucionaria. Se promovían veladas organizadas en homenaje a personalidades de la cultura soviética, se daban clases de ruso y hasta se organizaban viajes a la URSS para los obreros españoles, los cuales volvían a España impresionados por lo que allí habían contemplado. Otro método utilizado era la aparición en los medios de importantes personalidades españolas que opinaban sobre la URSS alabando su sistema político y su modo de vida soviético. Además, se comparaba la historia de ambos países y el proceso de las dos guerras civiles, hecho que podemos constatar con las declaraciones de José Díaz secretario general del PCE: „„nuestra guerra de independencia nacional contra el invasor y el fascismo

tienen muchos puntos semejantes con la lucha heroica y victoriosa del pueblo soviético contra los ejércitos contrarrevolucionarios y los invasores de su patria‟‟ .


Los mensajes políticos también eran muy recurrentes en la propaganda. Los propagandistas, tanto soviéticos como españoles, se deshacían en elogios hacia un régimen que había logrado transformar un país atrasado, el de la Rusia zarista, en un estado moderno y progresista que en pocos años se situaba al mismo nivel que la mayoría de los países industrializados. Se encontraba siempre presente la argumentación de las cifras comparativas con los países capitalistas y la, ya nombrada, Rusia zarista en lo referente a la producción, la alfabetización, etc. En cuanto a los mensajes económicos, el concepto más repetido durante la propaganda que se hizo en España era el de estajanovismo, el cual, hacia una representación positiva del trabajo. El obrero ruso estaba contento con su labor, la cual no suponía ninguna carga para él, y la desempeñaba con eficacia y entusiasmo. La propaganda se inundaba de números que mostraban los records de producción o la superación de los planes quinquenales y esto debía servir de ejemplo tanto como para los trabajadores españoles como para las industrias que debían ver en el modelo soviético de producción un ejemplo a seguir. Otros mensajes de gran importancia que eran difundidos incesantemente en la propaganda española eran los logros socioculturales y el papel de la mujer en la URSS. La Unión Soviética era vista como un país preocupado por sus ciudadanos y su educación. Además defendía la igualdad de derechos entre hombres y mujeres permitiendo a estas últimas votar, desempeñar altos cargos en el gobierno y ocupar puestos de trabajos importantes sin dejar nunca de lado a su familia y a sus hijos, que eran atendidos en colegios que contaban con las mejores condiciones para el desarrollo físico e intelectual. El modelo del Ejército Rojo también tuvo su lugar en la propaganda, sobre todo en la difundida entre los soldados del Ejército Popular. Era visto como un defensor de la patria y de los ciudadanos, no como un agresor, y su férrea disciplina y avances bélicos servía de ejemplo en las tácticas de combate utilizadas por los republicanos.

4.2. Canales de difusión Como ya hemos dicho anteriormente, la propaganda soviética se dividía en dos organismos encargados de la producción de mensajes propagandísticos: el AGIT-PROP en la Unión Soviética y el Komintern en el exterior. Teniendo esto en cuenta, no nos extraña que una parte de la propaganda soviética que llegaba a España fuera proveniente


de la URSS. La otra, sin embargo, era producida en la propia España gracias a organizaciones como la Asociación de Amigos de la Unión Soviética (AUS). No obstante, la AUS mantendrá estrechos contactos con el comisariado de Asuntos Exteriores. Prueba de ellos es la carta enviada por la Asociación a AA.EE que pedía el envío de material propagandístico: “Estimado camarada:

La Asociación de Amigos de la Unión Soviética se ha dirigido a nuestra embajada en Madrid con la petición de que se le concedan una serie de materiales imprescindibles para desarrollar su trabajo. La sociedad pide lo siguiente: 1. Envío sistemático de la mayor cantidad posible de fotografías para revistas, exposiciones, etc. Fotografías de los más variados temas: construcción, trabajo de los koljoses y sovjoses, situación de la mujer y la infancia en la URSS, etc. Especial interés tienen las fotografías más recientes. 2. Enviar lo antes posible propaganda impresa y sobre todo carteles. 3. Enviar materiales sobre la historia de la guerra civil en la URSS; artículos, carteles, películas, fotografías; en resumen, cualquier tipo de materiales que reflejen la experiencia militar de la guerra civil, el papel de la mujer durante la guerra, el tema de la autodefensa de la población civil, etc. 4. Enviar discos con himnos y marchas revolucionarias. Además, la sociedad pide insistentemente enviar en lo posible proyectores de cine sonoro portátiles. Nosotros, por nuestra parte, estimamos necesario satisfacer esta petición lo antes posible”.

Los medios que más se usaron para la difusión de la propaganda fueron la palabra hablada, que se basaba en mítines, conferencias, charlas y radio, la palabra escrita, centrándose sobre todo en la prensa, los folletos y las editoriales entre las que destaca Europa-América, los carteles y, por supuesto, el cine y el teatro. La máxima presente en todos estos medios era la de: Unión Soviética = Único país que ayuda a la República, algo que no estaba demasiado lejos de la realidad.

Posiblemente la prensa, junto al cine, sea la forma de propaganda que más difusión tuvo. Se dividía en dos: la prensa enviada desde la URSS y la prensa española. En la primera destaca la función de la publicación mensual ilustrada VOKS, distribuida por los AUS y editada en francés, alemán e inglés, se encargaba de difundir


los logros del socialismo y la vida de la URSS. También destaca la función de la publicación La URSS en Construcción, cuyo elemento principal era la fotografía que formaba el 80% del contenido total. Esta publicación trataba sobre todo de la vida en la URSS, su comparación con la Rusia prerrevolucionaria y de la unidad de los pueblos que formaban la Unión Soviética. Con respecto a los periódicos soviéticos más importantes debemos citar siempre los periódicos Izvestia y Pravda, que publicaban muchas veces artículos sobre lo que ocurría en España gracias al testimonio de sus corresponsales Ehrenburg y Kolstov, que cumplieron con una extraordinaria labor propagandística tanto en su país como en España. También destacan producciones como La Internacional Comunista, Moscow Daily News , etc. Todas estas publicaciones servían de fuentes para la revista Rusia de Hoy, publicada por la AUS que incorporaba en cada número una sección que traducía la prensa rusa y exaltaba los logros de la URSS. No debemos olvidar tampoco los folletos traducidos al castellano que eran repartidos entre la población española y entre el ejército, aunque si hablamos de propaganda en el ejército, queda claro que la mayor labor propagandística la hicieron las armas enviadas desde la URSS al bando republicano, ya que esta era la única potencia que defendía y apoyaba su causa. El cine también se convirtió en un importante vehículo de propaganda en la guerra civil española y fueron muchas las películas soviéticas que se proyectarían en España. Títulos como Los Marineros de Kronstadt, Chapáev o Lenin se hicieron famosos entre los milicianos republicanos. La URSS, por su parte, también contribuyó con la filmación de cortometrajes sobre España como el de „„Nuevos Amigos‟‟, „„¡Salud España!‟‟ o „„Madrid en llamas‟‟ .

La radio, por su parte, también tuvo un gran papel propagandístico ya que era el medio más eficaz por su rapidez y su cualidad de llegar a todas partes. Además, al igual que el cine, su influencia fue más importante ya que la mayoría de la población era analfabeta y no podía leer las noticias escritas en los periódicos. La Radio Central Moscú emitía cada día programas de temática propagandística que los españoles escuchaban en sus casas. Pero no solo la emisora soviética retransmitía los mensajes propagandísticos. La PCE-1 y la Unión Radio Valencia (que formaba parte de la AUS) también retrasmitían programas llenos de mensajes propagandísticos que glorificaban la Unión Soviética, y su estado socialista, poniéndola como ejemplo para los españoles.


En definitiva, el papel que hizo la URSS a través del Komintern y la AUS era básico y posiblemente su fin, si el bando nacionalista no hubiera ganado la guerra, era hacer de España un régimen satélite de la URSS. Su objetivo era popularizar el modelo soviético a través de mensajes que al finar lograron formar parte de la cultura española, y de esta forma dar a la sociedad española un modelo de estado que solucionaría sus problemas, el estado socialista.


CONCLUSIÓN Queda claro que el gran triunfo de la Revolución, y el posterior establecimiento de la Unión Soviética no habría, sido posible sin una gran masa de apoyo, o por lo menos de no oposición, detrás. Esta masa de campesinos y obreros analfabetos constituyeron ese principal punto de apoyo y desde el principio, los líderes revolucionarios, fijaron en ellos su atención y todas sus fuerzas por plantar en sus mentes vacías y algo anticuadas los principios del nuevo estado. Por supuesto esta labor solo pudo llevarse a cabo gracias a la propaganda. Los líderes fueron glorificados adquiriendo el papel de semidioses, el ejército alcanzó el prestigio necesario para ser el héroe del pueblo, el trabajo fue magnificado y presentado como la salvación del pueblo ruso. El capitalismo, y por supuesto el fascismo, adquirieron el papel de enemigos a combatir por toda la población, la cual debía creer en el comunismo y defender la Patria Rusia por encima de todas las cosas, incluso por encima de su vida. Sin embargo no solo Rusia fue víctima de la propaganda soviética. Gracias a la acción de la Tercera Internacional, creada con el objetivo de extender la revolución fuera de la URSS, los partidos comunistas de distintos países también divulgaron las ideas de Lenin y del comunismo, su propaganda y sus propuestas con el objetivo de acabar con el capitalismo y la sociedad de clase, y establecer la Dictadura del Proletariado y de los Soviets. A la acción de la Komintern se unieron diferentes organizaciones propias de cada país. En España, fue la Asociación de amigos de la Unión Soviética la encargada de esta labor propagandística y de adoctrinamiento de la población sobre todo durante la Segunda República y la Guerra Civil. Pese a la derrota republicana, cumplió muy bien con su papel y difundió tanto películas como carteles y periódicos o boletines llegados desde la URSS entre la población. Además, contribuyo creando sus propios carteles y periódicos a favor del comunismo y la Revolución del Proletariado. Es posible que la URSS no tuviera demasiado éxito en algunas de sus políticas, sobre todo al final del régimen. No obstante, queda claro que consiguió todos sus propósitos en lo que respecta a la industria o al ejército, a la creación del trabajo, a la educación pública y por supuesto, a la difusión de su propaganda, donde destacó principalmente gracias a la destinación de gran parte del presupuesto estatal al adoctrinamiento del pueblo y la difusión de los valores comunistas y revolucionarios.


BIBLIOGRAFÍA WHITE, S. The Bolshevik Poster, Yale University Press, New Haven and London, 1998.

JULIÁN, I. La propaganda rusa en el periodo 1917-1921, D' Art: Revista del Departament d'Historia de l'Arte, ISSN 0211-0768, Nº 12, 1986 , págs. 223-234

WIKIPEDIA,

Agitprop,

disponible

en

la

URL:

http://es.wikipedia.org/wiki/Agitprop

VALMASEDA, C. Trenes y barcos de agitación (1918-1921) disponible en la URL: http://cinesovietico.com/?p=1661

VALMASEDA, C. Dziga Vertov y los trenes de agitación (1919-1921) disponible en la URL: http://cinesovietico.com/?p=1904 (2001)

CABEZA SAN DEOGRACIAS, J. La construcción de un mito: la influencia del cine soviético en Madrid durante la guerra civil español, en “Spagna Contemporanea” nº 36. 2009.

CRUZ, L. El himno de la Internacional Comunista, disponible en la URL: http://www.militante.org/el-himno-de-la-internacional-comunista

JAUMANDREU, J. L a tercera internacional, disponible en la URL: http://revoltaglobal.cat/article976.html

V. I. LENIN., La Tercera Internacional y su lugar en la historia, Marxists Internet

Archive,

2000,

disponible

en

la

URL:

http://www.marxists.org/espanol/lenin/obras/1910s/iv-19.htm

VÁZQUEZ LIÑÁN, M. Los mensajes de la propaganda soviética durante la Guerra Civil española,

Eúphoros, ISSN 1575-0205, Nº. 6, 2003 , págs. 67-76,

disponible en la URL: http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=1181314

VÁZQUEZ LIÑÁN, M. La propaganda soviética en la Guerra Civil española: la Asociación de amigos de la Unión Soviética, Eúphoros, ISSN 1575-0205, Nº. 3,

2001 , págs. 181-188

,

disponible

en

http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=1183085

la

URL:


VÁZQUEZ LIÑÁN, M.

(2003) Propaganda y política de la Unión Soviética

en la Guerra Civil Española (1936-1939). Tesis de la Universidad Complutense de Madrid, Facultad de Ciencias de la Información, Departamento de Historia de la Comunicación

Social.

Disponible

http://eprints.ucm.es/tesis/19972000/S/3/S3042601.pdf

en

la

URL:


ANEXO: Ilustraciones

1.1 Internacional – APSIT

1.3

1.2 ¿Te

has apuntado como voluntario? -

Octubre de 1917 y Octubre de 1920 -

MOOR

MOOR


1.4

El camarada Lenin limpia el

mundo de basura –

1.5

DENI

Los ucranianos y los

rusos tienen el mismo reclamo

- MAYAKOVSKY

LA PROPAGANDA SOVIÉTICA

Recommend Documents