INTRODUCCION Lógica de la comunicación se refiere a cómo debemos de afrontar, que debemos hace hacerr y que no debe debemo mos s de hace hacerr tod todo depe depend nde e del del cómo ómo no debe debemo mos s relacionarse al público para tener un buen entendimiento del tema y como debe estar el receptor para que se pueda hacerse una idea o pueda obtener interés acerc acerca a del del tema tema que que se está está expon exponien iendo do,, debe debemos mos de tener tener lógica lógica al poder poder expresarnos no confundir al público con nuestros términos que utilizaremos .
OBJETIVOS
Conocer que podemos hacer y qué no hacer al momento de comunicarnos.
ara que o en que no puede ayudar profesionalmente.
!ue influencias puede tener en nuestro ámbito social o cultural.
LA LÓGICA DE LA COMUNICACIÓN Los presupuestos de la lógica no funcionan bien al aplicarlos a los enunciados de las lenguas naturales, porque muchos de ellos no constituyen descripciones de estados del mundo y porque todo son acciones. a. Los tambores redoblan en las esquinas.
b. Los tambores retumban en las esquinas. c. Los tambores redoblan y retumban en las esquinas. "iguiendo los presupuestos de la lógica, podemos analizar #$ a como una proposición en la que se predica redoblan en las esquinas de la entidad tambores. %l análisis se puede repetir con #$b, donde la predicación es otra. "i #$ a y #$b son &erdad, entonces #$c también lo es, porque no nos permite inferir #$ a y #$b 'untos o por separado.
a. La bandera de ortugal es ro'a.
b. La bandera de ortugal es ro'a y &erde. %n #( a, ro'a parece significar solo o totalmente ro'a, mientras que en #(b parece significar parcialmente ro'a. a. El rey de España tiene tres hijos. b. El rey de España tiene un hijo.
%n ## a hi'os significa )descendientes en primer grado*, mientras que en ##b hi'o significa )descendiente &arón en primer grado*. +qu podemos leer o al escuchar el enunciado decir que tiene tres hi'os hablando pluralmente la cantidad de hi'os que tiene, y hablando en primero grado de descendiente &arón podemos decir el rey de %spa-a tiene un hi'o no referimos al hi'o únicamente. /ienes hora0 12 3ueno, aún están dando las noticias. /ienes la capacidad de decirme que hora es0 12 3ueno, el programa de noticias comenzó en algún momento pasado y temprana en un futuro sin determinar /ienes la capacidad de decirme que hora es en este momento, tal y como se suele comunicar0 "i la tienes, por fa&or, hazlo. 12 4o sé qué hora es exactamente, pero te puedo ofrecer una información que te puede permitir deducir la hora de un modo aproximado5 aún están dando las noticias, as que debe ser entre las tres y las tres y media. %l asunto principal del intercambio #6, una petición de información especfica y un intento de ofrecer tanta información como se pueda en ese sentido están presentes en #7, pero una teora semántica no puede explicar cómo. La lógica proposicional no es de mucha
ayuda para analizar enunciados de las lenguas naturales cuando se usan en un intercambio comunicati&o.
La implicatura convr!acional Las inferencias deri&adas de las máximas se llaman implica turas. 8unto a las implica turas con&encionales 9las deri&adas de la obser&ación de las máximas: hay otras que se deri&an de las infracciones. Los hablantes tendemos a asumir siempre que nuestros interlocutores obser&an las máximas, y que, si no lo hacen, al menos se guan por el principio de cooperación. Cuando lo que escuchamos o leemos no parece conformarse a las máximas, asumimos que debe haber una razón para que quien habla las transgreda. %ste razonamiento nos permite deri&ar una serie de inferencias consideradas como intención de quien habla o escribe5 son las implica turas con&ersacionales •
;áxima de calidad
<2 1 no se opondrá anamá a la postura de %spa-a0
12 4o a %spa-a, la madre patria. %n 6# una persona bien informada debe notar que 1 está diciendo algo falso. +sumimos, sin embargo, que, 1 no está intentando enga-ar a <, sino que está cooperando. %n tal caso tenemos que suponer que lo que dice significa algo distinto de lo que parece. 3uscando entre los posibles significados próximos podemos llegar fácilmente al opuesto, es decir, que anamá se opondra a %spa-a independientemente de haber sido la madre patria o precisamente por ello. %l e'. 6# es un caso tpico de irona. Cuando una falsedad es in&oluntaria, quien escucha puede se-alarlo, por e'., enunciando otra falsedad que se asume patente5
<2 1 te lo pasaste bien en la fiesta de +inoa0
12 %sa s que fue una fiesta fiesta. %n 6=, 1 se repite y no parece completar la oración. +sumiendo que se mantiene el principio de cooperación, buscamos otro significado a ese enunciado y hallamos que entendemos algo como )fue una fiesta en la que se di&irtió todo el mundo*.
M"#ima $ rlaci%n %sta máxima nos lle&a a interpretar el segundo turno de un par adyacente como rele&ante, aunque la respuesta pueda parecer peregrina. >ncluso cuando la respuesta no parece guardar ninguna relación con el tema del intercambio, quien lo interpreta puede extraer una conclusión rele&ante.
M"#ima $ mo$o %sta máxima permite deri&ar muchas implica turas5 siempre que se e&ita una expresión simple para usar una más comple'a, se tiende a interpretar que no se hace gratuitamente sino porque la nue&a expresión se acomoda más a las intenciones de quien habla. !uien habla o escribe sabe que oyentes o lectores asumen que se está obser&ando las máximas o al menos el principio de cooperación, por lo que puede explotar el principio y las máximas para me'orar la comunicación. +s ocurre con muchos recursos retóricos. Las máximas no funcionan de modo cartesiano. + &eces la obser&ación de una máxima puede conlle&ar la transgresión de otra. ?tras &eces un enunciado transgrede más de una
máxima a la &ez y es difcil adscribir la transgresión de una a otra. 4o hay que esperar que se pueda realizar una análisis exacto y diáfano. Las máximas se pueden considerar puntos de &ista para el análisis de un enunciado concreto, y su superposición y confusión es habitual. Lo importante es aislar la implica tura que una9s: u otra9s: máxima9s: permitan inferir.
La cort!&a La comunicación suele tener &arios fines simultáneos, uno de los cuales es el intercambio de información. ?tra de las metas que se persiguen es crear y mantener una relación social en la que los participantes se ad'udican determinados roles con cuotas de poder y otros aditamentos tales como la responsabilidad. La cortesa es un factor funcional y básico en la organización de la comunicación oral. %n ling@stica el concepto de cortesa alude a las expectati&as de comportamiento con&ersacional y no a una colección de buenas maneras. %s decir, se refiere al con'unto de estrategias de desarrollo de la con&ersación por parte de los hablantes. Aay dos aproximaciones clásicas al estudio de esas estrategias5 normas de relación y cara.
La! norma! $ rlaci%n +lgunas estrategias de comportamiento &erbal recurren y abundan en miembros de determinadas comunidades mientras son escasos en otras, pero abstrayendo las particularidades se puede llegar a tres tendencias uni&ersales presentes en todas las culturas5 %&ita imponerte 9distancia: Ba opciones 9diferencia: Compórtate amistosamente 9camaradera: +l dar forma a un enunciado, los hablantes siguen una de estas normas y consiguen los efectos se-alados entre paréntesis. Cuando se sigue la norma de e&itar imposiciones, se intenta e&itar o reducir las imposiciones sobre quien escucha y, si no se puede conseguir, se piden excusas por la imposición. 4o imponerse conlle&a no ofrecer ni recabar opiniones personales, e&itar las referencias personales o familiares. La distancia es tpica de las situaciones formales y rige el uso del lengua'e técnico y la expresión indirecta de las propias preferencias. Be algunas expresiones populares deri&a el uso metafórico de cara en ling@stica, para referirse a la imagen pública que los hablantes tienen de s mismos. /iene dos aspectos5 •
La cara n'ativa5 la rei&indicación de la intimidad, la libertad de acción y el rechazo a las imposiciones de los oyentes.
La cara po!itiva5 la imagen personal coherente y positi&a que los hablantes desean mantener y para la cual buscan aprobación y apoyo en los oyentes. articipar en la &ida social entra-a un peligro para ambos aspectos de la cara. ;antener el estado de la cara necesita la colaboración de los demás. %l contenido de la cara, los limites exactos de las esferas pri&ada y pública y los contenidos rele&antes de la personalidad publica &aran de cultura en cultura.
/odo hablante conoce la definición de cara en su sociedad y organiza sus estrategias comunicati&as respecto a ella. %n principio, la intención es la de sal&aguardar e incluso apoyar la cara de todos los participantes. Cada inter&ención en una con&ersación puede ser potencialmente un acto de amenaza a la cara 9++C:, una agresión a quien escucha, ya sea por menos cabo de su imagen pública o por imposición de la &oluntad de quien habla. %n cualquier momento de una con&ersación el hablante sopesa estos dos deseos5 %l de comunicar una información eficientemente o con urgencia. %l de no amenazar la cara de quien escucha. 4ormalmente, los hablantes solo efectúan ++C sobre quien escucha cuando ser eficiente es más importante que los sentimientos que pueda pro&ocar la información en los oyentes.
Acto! $ amna(a a la cara n'ativa ueden afectar tanto a quien habla o a quien escucha. Los que afectan a los oyentes son actos en los que quien habla anuncia que puede o &a a impedir la libertad de acción de quien escucha. !uien habla anuncia una futura acción de quien escucha, presionando as para que lo haga, con órdenes y peticiones, sugerencias y conse'os, recordatorios, ad&ertencias y amenazas. !uien habla anuncia una futura acción propia que influye en quien escucha, presionando as para que manifieste aceptación o rechazo, u obligando a contraer una deuda, con ofertas o promesas. !uien habla expresa interés en quien escucha o en sus posesiones, con muestras de en&idia, admiración o piropos, o expresiones de emociones negati&as fuertes hacia quien escucha, haciéndole pensar que debe bien proteger el ob'eto del deseo de quien habla, bien ofrecerlo.
Acto! $ amna(a a la cara po!itiva ueden afectar al hablante o al oyente. %n los que afectan al oyente, quien habla muestra insensibilidad o desprecio a los sentimientos, necesidades y demás de quien escucha. !uien habla e&alúa negati&amente algún aspecto de la cara positi&a de quien escucha, con una desaprobación, critica, que'a, acusación, insulto o mostrando desa&enencia desacuerdo, reto y demás. +l hablante no le importa la cara positi&a de quien escucha y expresa &iolentas emociones, muestra irre&erencia, menciona &enta'as comparati&as respecto al oyente, introduce temas difciles 9raza, desigualdad sexual, religión...:, usa términos de relación no adecuados al oyente o hace caso omiso al tema de con&ersación establecido por quien ahora escucha.
%ntre los que amenazan la cara positi&a de quien habla están la solicitud de excusas, la aceptación de un cumplido, las confesiones de culpa y responsabilidad, y otras como la pérdida del control emocional o fsico. %sta clasificación es ilustrati&a y no pretende ser exhausti&a ni excluyente. +lgunos actos pueden amenazar la cara positi&a y negati&a a la &ez. or otro lado, el contexto en que se enuncia uno de estos ++C, puede dictar un análisis de casos concretos distintos del que aqu se ofrece para estos e'emplos. %strategias para realizar ++C.
%n condiciones de mutua &ulnerabilidad, los hablantes tienden a e&itar estos actos y para ello emplean ciertas estrategias para minimizar las amenazas. La primera posibilidad es la de hacer un ++C ostensi&o o no. n ++C es ostensi&o cuando se hace de tal modo que el resto de los participantes ad&ierten la intención de quien habla de realizar tal ++C. n ++C es no ostensi&o, cuando quien habla lo e'ecuta de tal modo que no se le puede atribuir una intención clara. Los ++C ostensi&os pueden hacerse sin rectificación 9directamente:, o rectificando la posible magnitud de la amenaza. Los ++C ostensi&os con rectificación se pueden hacer con cortesa positi&a o negati&a. La cortesa positi&a se basa en la identificación de quien habla con quien escucha, tratando a esta persona como a una amistad o miembro del grupo al que pertenece quien habla. %ste tipo de cortesa es la que domina en los gimnasios, la consulta médica, la uni&ersidad de los D7E... La cortesa negati&a, en cambio, consiste en admitir y respetar la diferencia, y se caracteriza por la formalidad y la deferencia. !uien habla indica as su intención de no in&adir o agredir el terreno que quien escucha considera propio o a'eno a su cara. %n este caso los ++C se rectifican con fórmulas de deferencia y excusas y recursos ling@sticos tales como la impersonalidad. Las dos aproximaciones al fenómeno de la cortesa implican que no se trata de estilos excluyentes sino de combinaciones aleatorias de estrategias que lle&a a cabo la misma persona, a pesar de las tendencias dominantes en una comunidad ling@stica, que conforman estilos con&ersacionales n par adyacente es una secuencia de dos turnos pronunciados por distintos interlocutores, en la que el $er turno incita a la persona a quien &a dirigido a proferir un turno con un contenido y estructura determinados por el turno anterior. ares adyacentes son las secuencias preguntaFrespuesta, ofertaFaceptación, opiniónFapoyo y ruegoFconcesión. %n todos ellos el primer turno dirige la interpretación del segundo y crea una expectati&a tal que cualquier cosa que se diga se interpreta como adecuada para satisfacer el primero.
CONCLUSIONES
%l tema es muy importante, lo podemos aplicar en nuestra profesión.
Be este tema depende nuestra manera de expresarnos para tener buenas relaciones interpersonales con personas allegadas con nuestro traba'o o en nuestro ámbito social.
%l buen uso de nuestro lengua'e podra darnos el éxito en cualquier momento dependiendo el ambiente y el campo a usarse.
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RECOMENDACIONES
>n&estigar más el tema para obtener nue&os conocimientos.
"i existieran dudas sobre el tema es necesario consultar.