Antecedentes del Mineral Aurífero SITUADO
EN
EL
CERRO PILLAY, DEPARTAMENTO DE SAN JAVIER DE
LONCOMILLA PER TEN ECI ENT E
Don
Alfredo
Délano
SA NTI AG O DE IM PR EN TA
A
"EL
EYZAGUIRRE 19 31
CH IL E E S F U E RZ O" 1116
Rojas
Antecedentes del Mineral Aurífero situado situado en el Cerro Pillay Pr oye cto de for maci ón de una Co mu ni da d Minera de Oro en las pertenencias mineras que posee don Alfredo Délano en el Cerro Pillay, en San Javier de Loncomilla. Constan de 12 pertenencias de cinco hectáreas cada una, o sean 60 hectáreas en total y se encuentran mensuradas y los títulos están legalmente perfectos. Exis Ex iste te un socav ón de 103 met ros ro s de largo, bien construido; un pique de 50 metros desde la superficie del cerro y que cae directamente al socavón; una cortada de 11 metros que parte del término del socavón al Poniente; y otra cortada que tiene, más o menos, 7D metros al Ori ente. ent e. Est as cortad cor tadas as están hechas en igual fo rm a que el mismo socavón de donde parten. El socavón va par ale lo a las vetas, pero pe ro alcan za a rozar lo menos ocho grandes vetas que están a la vista. Según los informes de cinco eminentes ingenieros, en diferentes épocas, y que fueron los señores: Juan E. Sturz, Ingeniero y Diputado de Minas de los Estados Unidos de Norte América; Henry L. Bernstein. Ingeniero de Minas y Con sul tor , Mi emb ro del del In st it ut o Ci entífico de Londres; Percy A. Middleton, Miembro de la Cámara de Minería de Australia; Pedro A. Raymond, Ingeniero y M i em br o del In st it ut o de Ingenier os de M ina s de los los Estados Unidos de Norte América; O. A. Schmidt. Inge-
Antecedentes del Mineral Aurífero situado situado en el Cerro Pillay Pr oye cto de for maci ón de una Co mu ni da d Minera de Oro en las pertenencias mineras que posee don Alfredo Délano en el Cerro Pillay, en San Javier de Loncomilla. Constan de 12 pertenencias de cinco hectáreas cada una, o sean 60 hectáreas en total y se encuentran mensuradas y los títulos están legalmente perfectos. Exis Ex iste te un socav ón de 103 met ros ro s de largo, bien construido; un pique de 50 metros desde la superficie del cerro y que cae directamente al socavón; una cortada de 11 metros que parte del término del socavón al Poniente; y otra cortada que tiene, más o menos, 7D metros al Ori ente. ent e. Est as cortad cor tadas as están hechas en igual fo rm a que el mismo socavón de donde parten. El socavón va par ale lo a las vetas, pero pe ro alcan za a rozar lo menos ocho grandes vetas que están a la vista. Según los informes de cinco eminentes ingenieros, en diferentes épocas, y que fueron los señores: Juan E. Sturz, Ingeniero y Diputado de Minas de los Estados Unidos de Norte América; Henry L. Bernstein. Ingeniero de Minas y Con sul tor , Mi emb ro del del In st it ut o Ci entífico de Londres; Percy A. Middleton, Miembro de la Cámara de Minería de Australia; Pedro A. Raymond, Ingeniero y M i em br o del In st it ut o de Ingenier os de M ina s de los los Estados Unidos de Norte América; O. A. Schmidt. Inge-
_
4 —
niero de Minas, ex-Ingeniero del Departamento de Minas del Min ist eri o de Ind ust ria y Ob ra s Públ ica s de Chi le; y del pliego de observaciones sobre el Mineral de Pillay, del Sr. J. Eduardo Miranda M., Ingeniero, Perito Autorizado de Minas del Ministerio de Fomento; los cinco informes mencionados, que se tienen a la vista, son copias, porque los originales se han perdido con el trascurso del tiempo. Se espera espera c orta or tarr dos do s gr and es vetas de crucero dentro de muy pocos metros más de corrida del socavón. Todos estos informes guardan entre sí perfecta armonía en cuanto al valor inmenso que pueden tener estas enormes vetas, las que sólo esperan un trabajo bien constituído para rendir resultados extraordinarios y que alcanzarán un éxito por demás halagüeño y a corto plazo. El pliego de Observac iones del Ing enie ro d on J . Eduardo Miranda M. es de fecha reciente y abunda en estas estas mis mas manife staci ones, pliego ori gina l que conservo en mi poder. El mismo señor Ingeniero ha hecho un estudio del presupuesto y confeccionado un plano de las instalaciones, documentos que conservo en mi poder y que puede ser consultado por las personas que quisieran interesarse. Está hecho este trabajo bajo la base de una producción modesta para principiar, de a razón de 25 a 30 toneladas diarias de mineral, cantidad que irá aumentando progr pr ogr esi vam ent e. Esti Es ti ma que será será necesario necesario inver in ver tir ti r la cantidad de $ 500,000, advirtiendo, sí, que en esta cant ca nt idad id ad se incluye inc luye el gasto gast o po r hacer p o r el pa go de operarios y elementos de trabajo durante el período de u n año , a cont co ntar ar desde desde que se inicie la expl ex plot otac ació ión. n. T e r minado ese primer año principiará el rendimiento efectivo, objeto de esta negociación. Quiero expresar claramente, que no debe esperarse beneficios en dinero antes de que no se haya trabajado durante un año, y que lo probable es que después del primer año de trabajo y explotación de las minas, habrá un aprecíable sobrante de -
fondos; y como los trabajos de las minas habrán conti nu ad o en aume nto progresivo, progresivo, con con la may or p r o f u n d i d a d que qu e se ha b r á ad qu ir id o en las vetas, las leyes se ha br án intensificado intensificado y un if or ma do ; la producción habrá alcanzado un desarrollo más intenso que durante el primer año de explotación; y que, reunidos todos estos factores, el futuro del mineral será algo que no es posible, por el momento, precisar siquiera, y no lo dudo, será una grata sorpresa para todas las personas que con f e y v ol un t a d tu vi eron er on el ti no de sobr epon erse a los escepticismos tan generalizado cuañdo condenan inconscientemente to do tr ab aj o minero, ol vi da nd o que, que, gra cias a la minería, Chile dió en épocas pasadas, los más óptimos frutos durante muchos años y que las más opulentas familias hicieron sus grandes fortunas mediante el trabajo minero. En la visita del ingeniero señor Miranda, según lo ma ni fe st ó en el pr op io terreno, las las form acio nes mine rali ra li za zada da s más hom ogé nea s deben encont enc ont rar se hacia el cuerpo del cerro y a mayor profundidad de la actual. El dislocamiento de una serie incalculable de vetas inferiores en potencia, lo hacen suponer así, pues tuvo oportunidad de constatar en varios de los pozos de reconocimientos que se abrieron antes y que sirvieron como pozos de or den an za , la cuarcita cuarcita au rí fe ra ; pero elementos de rell enami entos posteriores a su fo rm ac ió n incr ustá ronse en las hoquedades. La pirita misma, aurífera, expuesta po r algún tiem po en cont acto con la atm ósf era , se descompuso; de ahí que la primera zona, sí es verd a d que es ex pl ot able ab le desde luego, no lo sería en u n a riqueza de inm edi ato aprov echam ient o, sino una vez que la consolidación sea mayor. Es por esta causa que el Sr. Miranda es de opinión que desde el primer momento se hagan labores que avancen a cuerpo de cerro y profundicen, alejándose de la primera zona superficial Observaba esto después de haber recorrido unos dos
— 6 — kilómetros aproximadamente hacia el Sur y a un nivel no inferior a 150 metros que el plano de nivel del socavón, en que, según nos explicó, había las mismas caracterís ract erística ticass de fo rm ac ió n que en la zo na reconocida,, notando la presencia de esquistos pizarras cuarzosos, piritas ferruginosas con enlazamientos de cuarzos atabacados. Cree el informante que esta zona se extiende aún mucho más hacia el Sur y no le extrañaba ver cortado el río Perquelauquén por vetas que forman corridas manifiestas en el río que lo cruzan de un lado al otro, siguiendo la misma dirección que las vetas, a pesar de que en los co nt or no s superiores tenía terrenos terr enos de maicil los, vegetal y acarreo, que rellenaron esta zona en la época de los grandes aluviones. E n t r e los in fo rm an te s antes citados, de es este te yaci ya ci-miento aurífero, figuran dos que expresan que este mineral podrá ser por su riqueza, como por su abundancia "una de las.más grandes faenas de oro en Chile, y tal vez una de las las principa les del del m u n d o " . (I nf or me s de los Ingenieros O. A. Schmi dt y P. A. R a y m o n d ) . L o s demás informantes se expresan entusiastamente del mineral y no dudan del magnífico resultado que está llamado a dar. A continuación del informe del gran científico Sr.. Henry L. Bernstein, miembro del Instituto Científico de Londres, corre la copia de una carta que él dirigió a un señor Lind, que en esa época formaba parte del Director io de un a com uni da d par a exp lot ar este mi ne ra l. (En esa época esta Comunidad sólo tenía tres pertenencias de 5 hectáreas cada una; hoy tiene 12 pertenencias de 5 hectár hec táreas eas cada una, un a, es es decir, que qu e entonc ent onc es sól o se componía de la cuarta parte de lo que hoy día es, y notenía sino -unos pocos met ros ro s corrid cor rid os en el so ca vó n; mie ntr as que ho y día existen existen como 2 34 metro s co rr idos de socavones y pique, faltando sólo muy pocos metros más en el socavón, que ya tiene 103 metros de lar-
go, para cortar dos grandes vetas de crucero, y que una vez en cont acto sería casi imposible predecir la riq ueza que al ca nzará) . Como digo, en ese carta, el señor Berns tein ratif ica no sólo la gran riq ueza del minera l, sino que afirma que tuvo un ofrecimiento de compra del mineral, y para hacerl o lo ha bía hecho el interesado, considerando solamente su propio informe, de parte de un señor George Singleton, como representante de una fi rm a en Lo nd re s por el precio de £ 45 ,0 00 , equiva lente boy día a $ 1.800,000 m/'c., pagadero mitad al contado y mitad a seis meses plazos, con un interés del 4 '/ í anu al, oferta que la Comunidad de entonces no quiso aceptar. Este hecho no puede menos que llamar mucho la atención. Y ya que menci ono que existió una Co mu ni da d del yacimiento, el que todavía no había sido ni siquiera mensurado, podría surgir la pregunta de ¿por qué no continuaron con la Comunidad esos señores? Según los datos que he podido obtener, la paralilización tuvo lugar cuando estalló la gran guerra europea. Los- Comu neros de esa época e ran ingleses y alemanes, y tuvieron que abandonar nuestro país para dirigirse a sus respectivos países. Ninguno volvió después; es de suponer que todos ellos murieron. Después de transcurridos algunos años, las 12 pertenencias actuales fueron man ifestadas , pero con mo tivo de ciertas desaveniencias con el Juzgado de San Javier causadas por la discordancia sobre el ingeniero que sería designado para efectu ar la mensura de .las pertenencias mineras, el du eñ o de entonces (quien las ha bí a pe di do po r estar estas minas en terreno franco, con motivo de no haber pagado las patentes durante varios años por el motivo ya expuesto, el de no existir, al parecer, los antiguos dueños) cedió todas las pertenencias a don Ramón Amagada, quien formó una Comunidad con varias personas que no eran mineros. Esta Comunidad mandó hacer los
8 — trabajos preparatorios y los encargó a empresarios competentes en hacer túneles y tr ab aj os de tal nat ura leza, pero que tampoco eran mineros y nada entendían que tuviera relación con las minas. Cuando con el trabajo llegaron al extremo del actual socavón y de otros trabajos emprendidos, los comuneros desistieron de continuar, a pesar de que no faltó quien les advirtiera que era cuestión de algunos metros más parg, llegar al punto que recomendaban los grandes ingenieros que antes habían emitido sus informes. Pero no quisieron escuchar y abandonaron toda la propiedad; no pagaron las patentes durante algunos años y así perdieron todos sus derechos, de conformidad con lo que al respecto ordena e! Código de Minas. En esta situación, tuve yo conocimi en to del as un to e imp uest o de los in fo rm es citados, comprendí el inmenso campo de riquezas que este yacimiento ofrecía. Así fué como, sin perder tiempo, solicité las pertenencias; hice cancelar las inscripciones anteriores y solicité y obtuve la mensura, adquiriendo de esta manera el título definitivo de las propiedades. Hice, mientras tanto, los trabajos de limpiar bien el socavón y el pique, dejando todo listo y en punto de poner los tr ab aj os que ha n de sorpr ender , lo espero, a nuestro país, en cuanto a esta virgen riqueza. La calculación ra zo na da de esta nuev a organi zación, inicial, sería de $ 1.000,000 y el infrascrito se desprendería del 50 % para entrar a formar la Comunidad que explotará estos yacimientos. De los $ 500,000 que los accionistas o co mun ero s deb erán cubrir, pi do que se me entreguen $ 20,000 que estimo haber desembolsado hasta ahora para dejar la propiedad perfecta y legalmen te const itui da, de co nf or mi da d con la Ley y Reglamento que rigen sobre el particular. Por mí parte, pues, me reservo la mitad del total en acciones pagadas y debo con ellas contribuir para cubrir los honorarios de los amigos encargados de buscar
— 9 — adhesiones para la formación de la Comunidad que ahora trato de formar. Espero que las honorables perso nas que quieran suscribir han de tener la confianza a que creo tener derecho por mis antecedentes en el curso de una larga vida y que, a Dios gracias, he tratado siempre de mantener en alto en toda circunstancia. Acompaño las copias de los informes a que antes hago referencia y también la de las Observaciones que me entregó el ingeniero don J. Eduardo Miranda M. Así mismo, una copia de la inscripción del Acta de Mensura y certificado del Departamento de Minas y Petróleo. Los pl an os que te ngo en mi poder, pueden ser consultados a la hora que se me indique. El pre sup ues to y pl an o ideado po r el ingeniero señor Miranda, a que antes me he referido, quedan en mi poder para ser consultados por las personas que puedan interesarse. La clasificación de las partidas del citado presupuesto es de la manera siguiente: Sección
Establecimiento.
Co mp re nd e: Construcciones, maquinarí as, laboratorio, admini str ació n, tr ansportes , dotació n de agua, luz y otros, $ 244,500. Sección Minas. Comprende: Construcciones, herramientas, explosivos, transportes, agua, alumbrado, herrería, etc., $ 137,090.
— 10 — Sección del Personal. Co mp re nd e: Adm ini str ado r, mineros, personal del Establecimiento, de la oficina de Santiago, leyes sociales, con tri bucion es y tri butos, y gastos generales, $ 118,410. Suman en total $ 500,000. El esquema de la distribución del capital es el siguiente: Se formará una Comunidad Minera que se llamar á "C om un i da d de Or o Pi ll ay ", con un capital de $ 1.000,000 en acciones o cuotas de 50 cada una, o sean 20,000 acciones totalmente pagadas, distribuido de la siguiente manera: a) El due ño actual, do n Al f re do Déla no, recibirá en acciones: 10000; b) Se coloca rán entre los Co mu ne ro s que adhi rieran, por su valor a la par, o sea de $ 50 por cada acción, hasta la cantidad de $ 500,000 en dinero efectivo, equivalente a 10000. Total acciones: 20000. De los $ 500,000 en dinero efectivo, producto de las 10,000 acciones citadas, se entregarán $ 20,000 al Sr. Al f r ed o Délano, como reembolso de los gastos que él ha hecho hasta ahora en las pertenencias mineras y en su con sti tuc ión legal, que da nd o el saldo de. $ 4 8 0 , 0 0 0 para atender al pago de las instalaciones, personal en todos los servicios, obreros y operarios y, además, para cubrir los gastos de escrituras, etc., que deberán extenderse en la constitución de la Comunidad. Alfredo Délano Rojas. Santiago, octubre 31 de 1931. COP IA DE IN SC RI PC IO N N.9 1
A ñ o 19 31
Fs. 1
San Ja vi er , trece de agos to de mil novecie ntos treinta y uno. Con esta fecha procedo a inscribir la.siguiente Acta de Mensura de las Minas del Grupo Pillay.
— 11 — •s. J. L. de M. Hi ld eb ra nd o Mi ra nd a
M., Ingeniero y Perito del Departamento de Minas del Estado, con domicili o en Ch il lá n a Usía respet uosamente dice: que, dando cumplimiento a la providencia de ese Juzgado de fecha veintiuno de abril próximo pasado, me he constituido en el mineral de Pillay, de mineralización aurífera, ubica do en el cerro Pillay, Sector de la Pu nt il la , comuna de San Javier del departamento de Loncomilla •con fecha de hoy, veintinueve de mayo de mil novecientos treinta y uno a las catorce horas. Qu e en co nf or mi da d a las disposiciones de 2° Minas en vigencia, recorrí el Hito de referencia el que se encontraba constituido de material sólido y una visibilidad manifiesta, pues se domina de una larga distancia y desde diversos puntos, constante la mineralización de la zona denominada por el señor Alfredo Délano, en las ¡diversas pertenencias mineras y todas ellas se encontraban marcadas por vetas metalíferas. A falta de un Hito de referencia del Estado localicé el Hito de estas pertenencias minera s como se expresa. Con relación a la cumbre del cerro Ñame a ciento un grados ochenta y siete minutos, con relación a la cumbre del cerro Míngure a ciento sesenta y nueve grados treinta y nueve minutos y con relación a la cumbre del cerro El Gupo a nueve grados treinta y un minutos. Igualmente se domina desde el camino que va a Cauquenes con dirección Sur-Este y a un a distancia de cinco kil óme tro s pr óx im am en te y a una altura de quinientos sesenta metros sobre el nivel del ma r. In me di at am en te de de te rmi nar estas referencias procedí a la ubicación de las pertenencias mismas minexas que forman el grupo de minas de Pillay, como se -describe. Considerando como punto de partida el puni ó A que se indica en el plano ad j u n t o o sea la boca •del socavón explotador y tomando la dirección general -de la mineralización del grupo, encuadré la base de las pertenencias a estas alineaciones. Desde el punto A y con
— 12 — rumbo ciento diez grados treinta y cinco minutos medí hacia el Oriente ciento setenta y tres metros seiscientos siete milímetros; desde el mismo punto y con rumbo trescientos diez grados treinta y Cinco minutos medí cincuenta metros hori zont ales , en 'ambos extr emos ma n dé construir linderos y formando así la cabecera Sur de la pertenencia La Montaña. Sobre estos vértices levanté perp endi cula res hacia el No rt e y con ru mb os N o r t e diez grados treinta y cinco minutos y medí sobre estas alineaciones doscient os veintitrés metros seiscientos siete milímetros horizontales, quedando así determinada la pert enencia La M on t a ña con un a superf icie de cinco hectáreas y definidos sus aspas Oriente y Poniente como asimismo la cabecera Norte, se ordenó construir los linderos que forman los vértices. Vuelto el Instrumento a ubicar en el lindero Sur y Poniente de la pertenencia La Montaña que lo es común para la pertenencia Rique za y con una alineació n de trescient os diez gr ad os treinta y cinco min uto s medí hor iz ont al men te doscientos vei nti tré s met ros seiscientos siete milí metr os en este ex tr em o como vértices leva nté per pen dic ula r hacia el No rt e con diez grad os tre int a y cinco mi nu to s y una longitud horizontal de doscientos veintitrés metros seiscientos siete milímetros, mandé construir linderos, quedando así determinada la pertenencia Riqueza de cinco hectáreas, apoyada en toda su longitud por el costado Oriente a la pertenencia minera La Montaña. Construida así la base que forman las cabeceras Sur de las pertenencias La Montaña y Riqueza con una longitud hori zo nt al de cuatroci entos cuaren ta y siete metros doscientos catorce milíme tro s corr esp ond ien do doscientos veintitrés metros seiscientos siete milímetros a cada una de estas cabeceras; sobre los vértices extremos de ellas y con el vértice común al centro de esta alineación levanté tres perpendiculares o alineaciones con un rumbo Sur diez grados treinta y cinco minutos al Poniente en ca-
— 13 — da alineación para determinar en común dirección de las minas que quedan al Oriente denominadas La Estrella, Fo rt un a, Guanaco, Ba ta ta zo e Ind io con longi tud de doscien tos veintitrés met ros seiscientos siete mil íme tros en cada tramo o sea en una longitud de mil ciento diez y ocho met ros trei nta y cinco milí metr os, det erm in ándose en todo su recorrido el aspa Oriente de estas pertenencias. Sobr e la alineació n de cent ro medí igu alm ent e cinco tr am os de doscient os veintitrés metr os seiscientos siete milímetros y sobre el vértice Poniente, como en los anteriores y sobre la alineación ya indicada de Sur diez grados treinta y cinco minutos, Poniente medí los cinco tramos de doscientos veintitrés metros seiscientos siete milímetros que forman el total de mil ciento diez y ocho metros treinta y cinco milímetros, determinándose las pertenenc ias Ab und an ci a, Gr an Min eral , Pod erosa, Vil lar ric a y Af ri ca na , cada un a de cinco hectáreas. Con estas alineaciones se determinó así mismo la cabecera Sur del Grupo Pillay, con una longitud de cuatrocientos cuarenta y siete metros doscientos catorce milímetros. Todas ellas quedaron enlazadas y colindantes entre sí por sus cabeceras y aspas, no dejando ninguna demasía. El c o nj u nt o general del grupo de minas en consecuencia, es formado por seis minas que quedan al Ori ent e y seis min as que qu ed an al Po ni en te ; las del Oriente son: La Mo nt añ a, La Estrella, Fo rt un a, Gua naco, Batatazo e Indio y las del Poniente las forman las pertenencias Riqueza!, Abundancia, Gran Mineral, Poderosa, Villarrica y Afr ica na. El perí metr o fo rm ad o por estas pertenencias mineras lo es así. Por el Norte, cua trocie ntos cuarenta y siete metr os doscient os cator ce milímetros, por el Oriente, un mil trescientos cuarenta y un metro: seis cientos cuarenta y dos milímetros; po r el Sur, cuat roci ento s cuar enta y siete met ro s doscientos catorce milímetros; y por el Poniente, un mil trescientos cuarenta y un metros seiscientos cuarenta y
— 14 — dos mil íme tros, siendo en consecuencia una superficie de sesenta hectáreas. En cada vértice de pertenencia se construyeron los Hitos que determinan las pertenencias. Debo dejar constancia que en cada una de las pertenencias se han hecho po zo s de reconocimi entos, en co nt rá ndose en cada una la mi ner aliza ció n compl etamente deter mina das . Al acto de mensu ra no conc urri ó ni ng ún minero colindante, por cuya virtud no se deja estampado en el acta la presencia de ellos ni sus observaciones. Estuvieron presentes a este acto el dueño de las pertenencias miner as do n Al f re do Dé la no y los testigos que se no mb ran , señores Luis Lobos, René Co fré A., Francis co Salg ado y el Ingeni ero Per it o del de pa rt amento de Minas del Estado que accidentalmente se enco nt ra ba en el terreno y que presenció la mensur a, don Eduardo Miranda; para constancia firman conmigo los señores antes citados. Dejo constancia que no habiendo sido posible efectuar tod a la ope rac ión de mensur a en el mi sm o día indi cado po r este J uz gado , la op er ación hubo de prolongarse el día treinta del mes, pero todo en acuerdo con las disposiciones legales. En el mineral de Pillay a treinta días del mes de mayo de mil novecientos treinta y u n o . — Al fr ed o Déla no; Hildebr an do Mi ra nd a; Francisco Salgado, testigo; Ed ua rd o Miranda, testigo; Luis Lobos R., testigo; René Cofré, testigo. San Javier, veintisiete de julio de mil novecientos treinta y uno. Vistos: con el mérito de autos, documentos acompa ñad os po r el per ito y lo dispuesto en el art ícu lo sesenta del Có di go de Minería y per tin ent es del Reg lamento respectivo, apruébase en cuanto ha lugar en derecho el acta de mensura acompañada por el perito don Hildebrando Miranda M., e inscríbase en el Registro de Pro pi eda des del Con se rva dor de Mi na s del de par tamento, dándose al efecto al interesado copia autorizada
— 15 — del acta de la mensura y de la presente resolución. Remítanse el plano "original para su archivo al Conservador de Mi na s corr espondiente, agregúese un a copia autori zada del acta de mensura, remítanse al departamento de Mi na s y Pe tr ól eo del Min ister io de Fo me nt o, con el oficio de estilo respectivo. E d m u n d o Lare nas B. Pr oveído por el señor Juez Letrado titular don Edmundo Larenas B.; J. Pomés García. En San Javier a veintisiete de julio de mil novecientos treinta y uno, notifiqué por el estado a don Alfredo Délano y le envié carta certificada. R. Cartes. Conforme con su original que dejo agregado al final de este Registro bajo el número uno y se procede a esta inscripción a solicitud del interesado y no estimó necesario firmar. O. del Solar, N. y C. Conforme: San Javier, trece de agosto de mil novecientos treinta y uno. Hay un sello, Osvaldo del Solar, Notario y Conservador, Loncomilla, (firmado) O. del Solar. Certifico que la diligencia de mensura de las Minas del Grupo Pillay, de don Alfredo Délano, ingresó a este Departamento, con fecha 4 de agosto pasado. Santiago, octubre 9 de 1931. Departamento de Minas y Petróleo. MILLAR Director.
— 16 —
Informe del Ingeniero don Juan £. Sturz ABRIL I.» DE 1906
INFORMjE SOBRE EL MINERAL DEL CERRO "PILLAY" EN LA PROVINCIA DE LINARES (Ch il e) .
Situación. Este distrito mineral, que será de una gran importancia en un cercano futuro, está situado a unos 35 kilómetros al Oeste de la ciudad de Linares. Para llegar a él hay que pasar el río Loncomilla. El mineral está situado en la falda Poniente del Cerro Pillay, cuya cumbre tendrá como 600 metros sobre el nivel del mar. Formación.
La formación geológica consiste en una serranía ba ja granítica con mucha cuarcita algo de pizarra y pórfidos. Las vetas cru zan esta fo rm ac ió n en gran nú mero , mayormente con rumbo Norte a Sur, más o menos. Otras hacen cruceros con las prime ras. Su inclinación es mayormente vertical. Su anchura varía entre uno y cuatro metros y salen al sol en gran número de crestones de uno a dos metros de altura. El cuerpo de ella consiste en una masa cuarzosa con mucho óxido de fierro de color atabacado. El óxido de fierro es muy abundante y es seguro que a una cierta profundidad aparecen piritas en abundancia y tal vez algo de cobre. Por ahora no hay indicios de cobre y muy escasamente se ve alguna pirita de fierro. El oro aparece con frecuencia a la simple vista en
— 17 — partículas del tamaño de la mitad de la cabeza de un alfiler. Se puede llamar oro grueso. En las vetas aparecen unas guías ricas. Una docena de ensayes de muestras sacadas po r mis pr op ia s manos y hechos po r mí, ha n dado leyes desde indicios hasta diez y más onzas por tonelada, o sean, cerca de 300 gramos por tonelada métrica de 1,000 kilos. Sin embargo, para una empresa industrial en la cual no se escogería casi ningún metal, tomaré como ley media segura de grandes cantidades, la de 20 gramos por tonelada, fácilmente obtenibles. La impresión general que hace este mineral como futuro productor de oro es imponente. En mi larga experiencia en California, México, Argentina y Chile, no he encontrado un distrito aurífero que me hubiera impresionado más. Y este distrito se puede llamar virgen y sus metales serán por mucho tiempo de metales de oro libre de fácil amalgamación y en un paraje de clima excelente con toda clase de recursos, con un camino carretero hasta la mina, verdaderamente un conjunto de circunstancias de lo más favorables para una gran empresa. Agua
hay
en
abundancia.
La fu er za mo tri z por de pr on to , ha de ser como máquina a vapor o con gas pobre. El desarrollo de fuerza eléctrica hidráulica creo no sería difícil en una zona con tantos ríos y arroyos. Es asunto de un estudio especial. Combustible hay en las cercanías de la mina en forma de espinos hasta medio metro de grueso. Los fletes desde la estación de Linares hasta la mina, son bara tos, pudíendo correr coches y carretas hasta cerca de la mina. Con un gasto de $ 2,000 se puede prolongar el camino hasta la misma mina.
— 18 — Títulos de propiedad.
Recomien do la inmedia ta adquis ición de 35 ó 45 hectáreas de terreno aurífero en un solo grupo, como he indicado en mi croquis provisorio que acompaño. Estos formarían tres potencias de 15 hectáreas cada una, lo que considero terreno suficiente para formar más tarde una gran sociedad aurífera. Hay que conseguir títulos definitivos cuanto antes para evitar posibles pedimentos ajenos. Estimo los gastos necesarios para conseguir los títulos definitivos de 45 hectáreas como sigue: Diligencia de J uz ga d o y publicaciones $ 200.— Poz os de ordenanza 900.— Ran cho s provisorios y herra mienta s .. 7 50 . — Admin istr ació n .. 1, 00 0. — Pa go de patente 450.— Mensu ra definitiva 1, 50 0. — Gastos varios de viajes y caballos . 500.— Ingeniero consultor y plan os 1, 00 0. — Gastos totales par a obtener los tí tul os $ 6 , 3 0 0 . — Con esta suma se obtendrían el título definitivo de una propiedad que más tarde representaría un valor de muchos centenares de miles de pesos, la que sin título definitivo sería imposible de negociar o trabajar con seguridad sin tener que temer pleitos ruinosos. Es conveniente pri ncip iar los pozo s de or de na nz a a la ma yo r brevedad por causa de la próxima entrada de la estación lluviosa. Hay que hacer unos ranchos con techo de zinc para el abrigo de los trabajadores con paredes rudas de pirca.
— 19 — Cálculo
de
gastos
y
ganancias.
Para explotar en escala industrial estos importantes depósitos se necesita un capi tal de $ 20 0, 00 0, de los cuales $ 150,*000 serían para un establecimiento de amalgamación de diez pisones y los otros $ 50,000 para la mina y fondo de reserva. Calculo el gasto para obtener una tonelada de metal con una ley de oro de 20 gramos en 12 pesos, y el beneficio de la tonelada 10 pesos. Beneficiando 20 toneladas al día, con diez pisones, con ley de 20 gramos, resultan 400 gramos de oro, a dos pesos, término medio, son $ 800 al día. La minería cuesta El beneficio cuesta
$
240 200
Su ma de gastos al día Pr od uc to al día
$
'440 800
Gan ancia al día
$
360
Tomando como base 280.días hábiles de trabajo, resulta una ganancia de $ 100,800 al año, lo que equivale a un interés del 50 c /o sobre un capital de $ 200,000. Y no se diga que es un cálculo exagerado. La mina de Canutillo, en Freírina, Chile, ha producido con una instalación algo parecida hasta un kilogramo de oro al día y considero que el mineral de Pillay es de mucho mayor im po rt an ci a que aquél. Así es que recomiendo se establezca trabajo formal en él para explotar la gran riqueza en él, ahora guardada en sus entrañas. Valparaíso, abril 10 de 1906. (Fdo.) : Juan E. Sturz, Ingeniero y Diputado de minas de los Estados Unidos de Norte América
— 20 —
Informe del Ingeniero don Henry L Bernstein ABRIL
2
DE
1908
INFORME SOBRE LA RROPIEDAD MINERA DENOMINADA CERRO "PILLAY", DE MINERALES DE ORO SITUADA EN LA PROVINCIA DE LINARES, DEPARTAMENTO DE SAN JAVIER Situación.
Las min as que posee la C omu ni dad aurí fe ra de Cerr o Pi ll ay están situ adas en la provincia de Linares, departamento de San Javier, y compuesta de tres pertenencias, de cinco hectáreas cada un a, o sean 15 hectáreas. Altura
y
Gima.
El clima es muy suave y templado, y los trabajos de expl ota ció n pueden seguirse sin int err upc ión tod os los meses del año. La altura sobre el nivel del mar no pasa de 560 metros, cuya altura se constató por el barómetro aneroide. La te mp er at ur a media du ra nt e mi estadía en la mi sma es de 14 Rea. •—-14 + 5 + 17 cen tígrados, y la veloci dad y presión del vi ento por té rm in o medio de cuatro días, 550—88—1920—6.22 millas por hora y 1920 libras de presión por pie. Geología.
El distrito donde están situadas las minas de la Comunidad consiste en la superficie de crestones de rocas en descomposición y mezclado con schists, que con-
-
21 —
tienen oro en pequeñas cantidades. La formación general es de origen "Granpfeirps" de la edad "M io ce né ". El gr an it o que se encuentra es muy cristalino , y compuesto de cuarzo, feldespato e indicaciones de mica. El cua rzo es en form a de placas homogéne as, que tr ab an entre los elementos de la roca. Estas placas observadas en la luz pol ari zad a, son pe rfec tame nte homogéneas, lo que se demuestra por la igualdad de coloración, en toda la placa por la luz polarizada; y por la simultaneidad de- exti nción entre las nicoles cruzadas. El fel despato se distingue a la vista por las caras de fractura exfoliación que presenta. De las rocas "Básicas" que se encuentran en la pr op ie da d, se relaciona intimamente con el grupo granítico. En efecto, entre un granito anfíbólíco pobre en arthoso, y un dioríto cuarcífero rico en arthoso, la diferencia, tanto en estructura como en composición, puede llegar a ser nula. Por otro lado cuando el cuarzo desaparece y la diorita llega a ser un agregado cristalino anfibol y plaglioclasa, y a presentar restos de piroxeno, y entrar dentro de lo que se ha llamado epidioritas o dioritas, cuyo anfibol proviene de fenómenos epígénicos del piroxeno, la unión con las diabasas es evidente, pudiéndose considerar esta roca el lazo de unión que une al grupo básico con el de las rocas ácidas. .
Análisis. Después de un examen muy detenidamente hecho, por medio de la química y microscópico de la roca superficial , y ho ndu ras hasta 60 cm. más o men os; los resultados son cómo sigue; Análisis N.' 1 1 (superficie) : Cuaizo completamente estéril.
22 — 9
Análisis N. 2 (sup erfi cie) : Roca descompuesta completamente estéril. 9
Análisis N. 3 (2 5 cms. h o n d u r a ) : Or o 0. 0 17 onzas por ton. Fi er ro metálico 9. 21 9 % O xi d o de fierr o 3. 10 0 % Azufre 0.917% Co br e 0. 00 9 % Pl at a 0. 00 2 onza s Sustanc ias sin va lor . .. 8 6 . 7 3 6 % 8 6 . 7 3 6 % Análisis N. 9 4
(su per fic ie) :
Or o Pl at a Arsénico F i er r o m et ál ic o . . . . . O x i d o de f i er r o Susta ncias sin val or . .. Análisis N.
9
5 (5 0 cms. de h o n d u r a ) :
Oro A ci do T u n s t a t o .... Acido Titánico Bronce Azufre Sustancias sin valor .. Análisis N.
?
0. 01 3 onzas por ton. 0. 00 1 onzas por ton. 0. 01 9 % 1 4 .0 7 1 % 2.110% 83.786 %
0.032 onzas por ton. 4.101 % 9.093 % 7.116% 4.001 % 75.657 %
6 (4 0 cms. de ho n d u r a ) :
Oro Pl at a Fie rro metálico O x i d o d e f ie r ro Acid o T un s ta to
0. 13 7 onz as por ton . 0. 00 1 onzas por ton. 7. 10 3 % 8.011% 1.0T0 %
— 23 — Acido Ti tá ni co Br onc e .. .. Sust anci as sin val or
6. 19 0 % 4.000 % 73.548 %
.. ..
9
Análisis N. 7 (60 cms. de hondura): Or o Pla ta Cobre Arsénico Acido Tu ns t at o Acido Ti tán ico Fi er ro metálico Ox id o de fierr o Pl om o Bronce A z u f r e .. . , Sust anci as sin va lo r
.. .. ..
0 . 12 4 onza s por ton . 0. 00 2 onzas por ton. 0. 00 4 % 0. 00 1 % 0. 003 % 4. 01 0 % 17 .0 13 % 6. 19 1 % 0.0 02 % 4. 01 1 % 0 . 00 3 % 68.636 %
9
Análisis N. 8 (3 5 cms. de h o n d u r a ) : Or o Fie rro metálico Ox id o de fierr o Azufre Acido Ti tán ico Arsénico Cal Bronce Sust ancia s sin val or
..
.
0. 11 2 onzas por ton . 14 .0 11 % 9. 31 7 % 0.917% 4. 06 4 % 0. 07 1 % 1. 73 8 % 2. 40 1 % 67.315 %
Análisis N. 9 .9 (30 cms. de hondura): Or o Pl at a Cob re Fie rro metálico Ox id o de fierr o
0. 13 1 onza s por ton . 0. 00 1 onz as por ton. 0. 00 4 % 6. 10 3 % 4 .0 0 2 %
— 24 — Bron ce Pl om o Arsénic o Ca l .. .. .. .. Susta ncias sin va lor
2. 19 1 0. 10 3 0.200 0.134 87.131
.. ..
% % % % fo
Análisis N. 9 10 (3 0 cms. de h on d u r a ) : Oro Pl at a Fi er ro metálico O xi d o de fier ro Susta ncias sin va lor
. ..
.. .
0 . 5 4 8 onza s po r t o n . 0. 00 2 % onzas po r to n. 24 . 0 0 0 % 7, 10 8 f 68.542 %
Fuera de los análisis anotados arriba he practicado los ensayes para- or o sólo, con los res ulta dos siguie ntes: p
Ensaye N. 1 (6 0 cms. de h o n d u r a ) , Oro 0. 35 2 on za s por tonelada. Ensaye N. 9 2 (superf icie), Or o 0. 20 1 onzas por tonelada. 9 Ensaye N. 3 (superfic ie), Or o 0. 18 5 onzas po r tonelada. Ensaye N. 9 4 (4 0 cms. de h o n d u r a ) , Or o 1.501 onza s por tonelada. 9 Ensaye N. 5 (5 0 cms. de h o n d u r a ) , Oro 1,211 onzas por tonelada. 9 Ensaye N. 6 (6 0 cms. de h o n d u r a ) , Oro 0. 97 1 onza s por tonelada. Ensaye N. 9 7 (50 cms. de h o n d u r a ) , Oro 1. 202 onz as por tonelada. Término medio de oro por los análisis y ensayes: 0.435.12. H em os visto po r los análisis y ensayes an ot ad os ar ri ba que los resu ltado s son m u y fav ora bles , especialmente tomando en cuenta que no existen trabajos de ex-
— 25 — plotación en la mina y trabajando ün socavón de 110 metros de corrida en el punto señalado en la mina y en dirección Sur, 20 grados Oeste, tiene que cortar dos. vetas importantes, cuya ley de oro no baja de 60 gramos por tonelada, o sean, casi dos onzas de oro por tonelada. Recomiendo que este trabajo se haga por contrata, entregando la obra en manos de un contratista competente, honrado y bajo garantía. Al mismo tiempo es muy necesario que la Comunidad nombrara una persona técnica, junto con uno de los directores de la Comunidad, para hacer visitas periódicamente a la mina con el objeto de asegurarse que el contratista está cumpliend o su co nt ra to según las instrucciones del ingeni ero. U n socavón así de 2 X 2 metros, debe costar la suma de $ 8, 80 0 po r los 110 metros de socavón. Es bien comprendido que en esta clase de contratos las herramientas, etc., necesarias, corren de cuenta del contratista; de esta manera, la Comunidad no tiene que entrar en otros gastos fuera del costo del socavón. Piques
de
ordenanza.
Confirmo mis opiniones anteriores presentadas en mí primer informe, que los piques de ordenanza no están correctamente colocados, ni tampoco tienen ellos utilidades para la Comunidad. También tengo que confirmar mis anteriores opiniones, que, la conformación superficial no son vetas, sino out-crops o crestones, las vetas están á continuación, pero a más hondura. Vías
de
comunicación.
Existe n tres cami nos carreteros a la min a, como sigue: Lin are s a Cerr o Pill ay 13 leguas Villa Alegre a Cerro Pi ll ay . 8 San Ja vi er a Ce rr o Pi ll ay . 9
— 26 — Todos estos caminos son excelentes para el transporte por carretas, sin embargo, se puede hacer el transpo rte por med io de navegación en el río Lo nc om il la ; y el costo de los trans por tes desde los pu ntos arri ba indi cados, son muy baratos como sigue: Costo de transporte. Vil la Alegre a Cerr o Pil lay , $ 0. 60 po r qu i nt al métrico. Linares a Cerro Pillay por carreta, $ 0.80 quintal métrico. San Javier a Cerro Pillay, por navegación en el río, $ 0.30 por quintal métrico. Vetas. El objeto del socavón de 110 metros, es el de cortar dos vetas, la primera a los 57 metros, y la segunda a los 110 metros, y tengo seguridad en decir, que estas vetas tienen que resul tar muy un ifo rm es en sus leyes: de oro. Gastos
de
administración.
Después de la terminación del socavón, y en cuanto ha y pers onal pr op io en la Co mu ni da d, calculo qu e los gastos de adm ini strac ión (en escala pequ eña) serían los siguientes: 1 1 1 1 1 15
administrador Pulpero Contador y Cajero Mayordomo Herrero Barreteros
£
30. 0.0 mensual 15. 0.0 20.
0.0
10. 0.0
10. 0.0 151.17.6
— 27 — 20 Apires Herramientas Explosivos ..
£
180. 0. 0 mensual 15. ,0.0 15. 0.0
TOTAL £ 446 .1 7.6 mensuales o sea a 18 d. peniques oro en $ 5,958. Es decir que la Administración y personal de trabajadores anotados arriba: los gastos de explotación en escala modesta sería de $ 71,496 anual. Explotación.
Con el número de trabajadores arriba indicado, la exp lot aci ón de 5,000 tone lada s de metales anuale s (que es un cálculo mo de st o) con un a ley baja de 35 gr am os de oro por tonelada, es muy fácil; y tomando esta ley como base de calculación, tenemos 175,000 gramos de oro ( £ 21 , 75 1. 18 .6 ) , o sean 5, 64 5. 5 onzas de un valor de £ 2 1 , 75 1 . 1 8 .6 , es decir: Gast os anuales en la min a . Val or de oro anual
£
5.362.10.0 21 .7 51 .1 8. 6
Ut il id ad
£
16 .38 9. 8.6
o sea a 18 d. oro, la suma de . .. $
218,566.76
Explotación con una instalación de pisones.
Una vez que la mina esté en estado para una explot ac ión en escala grande, calculo que un a batería de pisones (6) con sus accesorios, la explotación de metales de or o sería como sigue: 4 0 , 0 0 0 ton ela das de me ta l anu al, con ley de 35 gr amos de oro por tonel ada, son 1. 40 0, 00 gramos , o sean 4 5 , 1 6 1 . 9 on za s de oro, que equivale a un val or de £ 17 5 , 0 0 0. 1 8 . 0 par a un a explotación así.
— 28 — Un a Adm ini str aci ón y pers onal necesario: 1 1, 1 1 1 2
Administrador Ingeniero Ingeniero mecánico Contador y Cajero . .. Pulpero Mecánicos a £ 20 0 c/ u Ma yo rd om os a £ 100 c/ u . Herrero '. Carpintero Fo go ne ro s a £ 75 c / u .. . 50 Barreter os a £ 75 c / u .. 30 Apires a £ 55 c / u . .. , Combustible Ex pl os iv os .. : .. Gastos de mesa de la Ad mi ni s tración Transporte Gastos imprevistos Herramientas . Repuestos y gastos de uso de la instalación TOTAL
como sigue sería
1,000.0.0 anual 1,000.0.0 500.0.0 500.0.0 300.0.0 400.0.0 300.0.0 100.0.0 100.0.0 15 OJO. 0 3,750.0.0 1,650.0.0 750.0.0 300.0.0 300.0.0 500.0.0 1,000.0.0 250.0.0 1,000.0.0
£ 13,850 .0.0 anuales
Lo que deja una utilidad de £ 16 1, 15 0. 18 .0 . La instalación anotada arriba, no es de pensar por lo pronto,. sino cuando la mina esté abierta en una manera científica y seria, y en cuanto hayan canchas establecidas con metales en cantidades suficientes para una instalación de pisones, etc. Por el momento el único trabajo que debe hacerse es el de concluir el socavón, con el objeto de cortar las dos vetas y preparar las canchas para los metales.
— 29 — Resumen. Después de habe r ex am in ad o la pr opi ed ad mu y detenidamente he llegado a la conclusión que las minas que posee la Comunidad Aurífera de "Cerro Pillay" son de un gran valor, que merece una explotación seria, honrada y competente; y recomiendo la inversión de los capitales necesarios para una exp lot aci ón modest a po r lo pronto, y trabajándose así, los resultados tienen que ser halagüeños en muy poco tiempo. Los resultados de los análisis y ensayes, son, en mi opinión, excelentes, y demuestr an que existen grandes riquezas a más ho nd ur a. La locación de la mina, la ab un da nc ia de agua en el río, a muy poca distancia de la propiedad y los tantos elementos para la vida de los trabajadores, que se producen en la región, son muy satisfactorios. Este, señores Directores, es el informe que tengo el honor de someter a su consideración. Santiago, abril 2 de 1908. (Firmado).—Henry L. Bernstein. Ingeniero de Minas y Consultor, Miembro del Instituto Científico de Londres. Santiago, julio 28 de 1908. Señor Eduardo Lind.—Valparaíso. Muy señor mío: Acuso recibo de su carta, fecha 26 del pte., la cual recibí esta mañana. Telegrama.—
grama al señor indicándole que Singleton como para la compra
Hace alg ún ti em po ma nd é un teleWides, que se encontraba en Valparaíso, había recibido una oferta del Sr. George representante de una firma de Londres, de las minas de oro del Cerro Pillay.
— 30 — Esta oferta fué hecha por el caballero arriba nombrado, después de habe r estu diado mi in for me (copia del cual tengo en mi poder). La oferta de este caballero fué la suma de cuarenta y cinco mil libras esterlinas, mitad al contado, y el resto a seis meses plazo, con el cuatro por ciento de interés. Como el señor Widdes no quiso aceptar esta oferta, yo por cierto decliné seguir la negociación coa el Sr. Singleton, quien compró otra mina que yo le recomendé,, pagando la mitad al contado y el resto a seis meses plazo. Al mismo tiempo aquí hay otro caballero, quien es un antiguo compañero mío de la escuela de minas, quien perte neció a la Cá ma ra de min as de Lo nd re s (d onde yo fui, en una época, ingeniero consultor), quien estaría dispuesto a entrar en cualquier negocio sobre propiedades mineras de oro que sean recomendadas por mí. Después de la ma ne ra más in fo rm al en Personal.— la cual y.o he sido tratado por la Comunidad Cerro Pillay, por los últimos Directores, y también por el señor Widdes, no tengo interés en mezclarme en ninguna forma en este negocio, y mi única razón en contestar a Ud. su carta, es que yo no puedo dejar de dar una contestación caballerosa cuando una persona me escribe, de ahí es que yo contesto su carta con el mayor placer. Mina.— Rep ito a Ud . lo que le he dicho a los úl timos señores Directores, esto es que las indicadas minas demuestran ser extremadamente ricas; por cierto que yo hablo como un científico después del más delicado análisis, y examinacíón microscópica de la fo rm ac ió n geológica. Esta formación se destaca altamente por su riqueza y las sustancias que la componen, esto ha sido comprobado en el examen de una muestra que envié al Instituto Científico de Londres, del cual soy miembro, y tengo otras muestras en mi colección, aquí. Desde entonces he descubierto pequeñas partículas de "roca jasper" que se
— 31 — usa como adorno én los anillos, y que tienen un alto precio en Europa. A pesar de todo esto yo supongo que la C omun id ad de Ud s. es lo mi sm o que much as otras, esto es que Uds. no conocen o no saben cuando tienen en sus manos una cosa buena realmente. Le agradeceré a U d . se sirva indicar al Widdes.— señor Widdes, si Ud. lo ve en Valparaíso, que después de mañana, ni mi abogado ni yo aceptaremos alguna disculpa. Esperando que Ud. disculpe estas observaciones hechas en la presente carta, Queda de Ud. su atto. y S. S. Henry
L.
Bernstein
Ingeniero de Minas y Consultor
Informe del Ingeniero don Percy A. Middleton VALPARAISO, FEBRERO 19 DE 1913
TRADUCCION DEL INFORME EN INGLES DEL INGENIERO PERCY MIDDLETON, MIEMBRO DE LA CAMARA DE MINERIA DE AUSTRALIA E INGENIERO DE LA CASA GIBBS Informe sobre el mineral "Cerro Pillay" cerca de Linares.
Las minas están como a 50 kilómetros de Linares y el camino es bueno para toda clase de vehículos, carretones, etc., ha st a una milla (o sea 1 k m.) de las minas, este último pedazo del camino necesita arreglo para poder subir maquinaria a las minas. El aspecto general de la región es aurífero y es muy parecido a algunas partes de Australia, donde existe regiones aur ífe ras , y los crestones indican clarame nte la presencia de una gran veta a alguna distancia de la su-
— 32 — perfície, naturalmente es por el momento imposible decir qué puede ser el contenido de esta veta, pero debe ser suficiente para explotarse con una ganancia. Todas las muestras tomadas de los crestones, encontré un pequeño porcentaje de oro, también en la's muestras tomadas de la veta chica que es de 43 metros de la entrada del socavón. Cal cul o el or o como una on za po r tone lada, esto demues tr a qu e la veta que debe ser cort ad a si se. sigue con el socavón por unos 12 ó 15 metros más, contendrá un buen porcentaje de oro. Esta en mi opinión no es la veta principal y puede suceder que es una veta de algunos pies de ancho. Según indicaciones, al Sur existe una gran veta como a 160 metros de la entrada y tal vez llevará más oro que las demás vetas. El túnel es uniforme y tiene bastante lugar, es 1.2 metros de ancho. Este socavón no sería usado sí se trabaja la mina en debida forma, científicamente. El único valor del socavón es para mostrar la formación de las vetas y roques. Para explotar la mina como es debido, debe hacerse un pique desde la superficie que cortará el socavón como a l l O metros de la entrada y así permi tir la explot ación j u n t o con todas las demás vetas que se cortarán después, pues creo que todas las vetas mejorarán con profundidad. Este es el único modo para explotar una mina como ésta, con buen resultado . El trabajo hecho hasta la fecha es un túnel S. 20" O. 48,7 metros de largo y 1,2 metros de ancho. Considero que las indicaciones son favorables y una cantidad de dinero sería necesario gastar antes de formar una opinión concreta. Una buena idea se podría formar cuando se extienda el socavón unos 15 ó 20 metros más. (Fdo.) : Percey A. Middleton Valparaíso, 19 de febrero de 1913.
— 33 —
Informe del Ingeniero don Pedro A. Raymond MARZO 10 DE 1916
INFORME SOBRE EL MINERAL DE ORO UBICADO EN EL CERRO "PILLAY", PROVINCIA DE LINARES, DEPARTAMENTO DE SAN JAVIER Situa ción.
Este importante mineral está situado a 9 leguas al O. de la ciudad de San Javier, en la falda Poniente del Cerro Pillay, a una altura de 600 metros, más o menos, sobre el nivel del mar. El grupo de minas lo forman 12 pertenencias de cinco hectáreas cada una, denominadas: Riqueza, Abundancia, Gran Mineral, Poderosa, Villarica, Africana, La Montaña, La Estrella, La Fortuna, El Guanaco, El Batatazo y El Indio. Vías
de
comunicación.
Desde la estación de San Javier hasta el pie del mineral, hay un camino carretero excelente para el tráfico de carretas y tropas. Geología. Las piedras principales que se encuentran en la zona son cuarcita. En el grupo hay un dique intrusivo que corre de Norte Sur, con cuarenta grados al Oeste. Esa intrusión es la causa de una sucesión de vetas paralelas que corren en la misma dirección. De esas vetas
— 34 — hay 10 a 12 que se encuentran con afloramientos en la superficie y tienen una anchura de un metro hasta cuatro metros. Parece que ha tenido un movimiento secundario que es la causa de ot ra s fr ac tu ra s y que se en cu en tr an veta s de Oriente a Poniente, lo que forma una combinación de vetas con gr an nú me ro de empa lmes, se debe enc ont rar metal de muy alta ley, y, por supuesto, de gran anchura. El pa ni zo de las vetas es cua rz o, im pr eg na do con fierro, que se encuentra en estado oxidado en la superficie y en estado de piritas, en poca profundidad. Este panizo es de gran importancia y tiene mucha semejanza al de las minas de oro que he visto en los Estados Unidos, especialmente en el Estado de Montana y Colorado, donde existen las mejores minas de ese país. La zo na es su ma me nte au rí fe ra . Las rocas del cerro, en general, se presta a vetas auríferas. Las vetas son bien formadas, de mucha persistencia en su corrida. Otro punto favorables es: que parecen que las vetas que corren de Norte a Sur son más nuevas que las otras, lo que prueba que ha tenido dos intrusiones y en consecuencia se puede esperar dos dist into s enr iqu ecim ient os de la zo na . Otro punto también favorable consiste en: que todas las vetas son verticales y no parece de superficie de fallas o botamientos. La formación del grupo es muy favorable. Los aborígenes de no mi na ro n "L on co mi ll a" al río, lo que significa "Cabeza de Oro". Ag ua. Como a tres kilómetros del mineral corre el río Loncomilla, el que tiene agua más que suficiente para una p la n t a de elab ora ción con to da la ca pacid ad necesaria, cerca del mine ral ha y tamb ién ag ua en un bar ran co m u y buena para usos domésticos.
— 35 — Trabajos
hechos.
En la mina Riqueza ha y un so ca vón que corre de Norte a Sur, de 48 metros de largo; fuera de ese socavón de los doce pozos de ordenanza, no existen otros trabajos de explotación. Este socavón debe seguirse 75 metros más y poner estacadas en cada lado, para colocar empalmes que se encuentran en la superficie y que son muy interesantes. Probable
plan
de
trabajo.
Yo, uso la palabra probable, por razón de que antes de hablar definitivamente sobre el plan de trabajos será necesario hacer un estudio det all ado , pr in ci pa lm en te sobre la cuestión de colocar las mejores vetas y solucionar el modo de estracción de oro. En mi opinión la forma más apropiada será por medio de amalgamación combinada con cianuración. Este asu nto n o se pued e solu cio nar sin to ma r un a bue na cantidad de mues tras sistemát icamente. Las condiciones topográficas se prestan admirablemente a un sistema de extracción po r me di o de socavones u n o 100 met ros y otro de 150 más abajo que el afloramiento de las vetas más importantes; el de 100 metros debe correr sobre una de esas vetas. Este sistema de socavón permite una extracción de lo más barata por la razón, que el mineral llegará a la bo ca -m in a to do po r gravedacT y de ahí su transporte al río será también por gravedad, por plano inclinado hasta el pie del cerro o por medio de andarivel. La maq uina ria para todo t r a b a j o debe funci onar por fuerza eléctrica con la planta generadora, al lado del río. N o sería raro , que se pud ier a obt ene r f ue rz a h id rá ulica para esta planta y esta cuestión merece un estudio aparte del mineral mismo.
— 36 — Aparte de la geología, el clima es bueno, la vida barata y el mineral se presta a la extracción más económica. Conclusión.
No tengo duda: de que un estudio detallado por medio de socavones colocados sistemáticamente, este gran mineral, t a nto por" su riqueza co mo po r su abun dancia , puede resultar una de las más grandes faenas de oro de Chile, y tal vez una de las principales del mundo; y recomiendo, que este estudio debe hacerse bajo la dirección de ingenieros competentes que tengan experiencia en minas de oro, no solamente en el país, sino también en el extranjero. Santiago, marzo 10 de 1916. (Fdo.) : P. A.
Raymond
Ingeniero y Miembro del Instituto de Ingenieros de Minas de los Estados Unidos de Norte América
Informe del Ingeniero don Otto A. Schmidt DICIEMBRE
10
DE
1916
INFORME SOBRE EL MINERAL DE ORO UBICADO EN EL CERRO "PILLAY" (Chile). Consideraciones
generales
y
situación.
El grupo minero, perteneciente al señor Juan Rospide, de no mi na do "Cerr o Pi ll ay ", se encuentra sit uado en la provincia de Linares, departamento de San Javier, subdelegación de Carrizal y se compone de doce pertenencias denominadas: Riqueza, Abundancia, Gran Mi-
ñera!, Pode ror a, Villarrica, Afr ic ana , La Mo nt añ a, La Estrella, La Fo rt un a, El G uan aco , El B at at az o y El Indio; de cinco hectáreas cada pertenencia, o sea, un total de sesenta hectáreas. Estas per ten encias están una a cont inua ción de la otra, f o r m a n d o un solo gru po, teniendo cada un a su po zo de or de na nz a correspond iente. Las pertenencias están ubicadas en uno de los faldeos del lado poniente del cerro que lleva el nombre de Pill ay y a un a al tu ra de. 155 m et ro s sobre el valle, quedando el Cerro Pillay a más o menos 500 metros sobre el nivel del mar. Este grupo minero se encuentra a más o menos .40 kilómetros de la Estación de San Javier, y el camino que va de esta estación a Cauquenes pasa a dos kilómetros de las minas. De este camino parte un camino carretero que llega muy cerca de las pertenencias, pero que se encuentra algo destruido, pudiendo no con un gasto superior a dos mil pesos efectuar su reparación y continuarlo hasta la misma propiedad, minera. La situación de este importante yacimiento aurífero es por demás lleno de recursos, por sus vías de comu= nícación, pues el mismo camino que pasa por el mineral va hacia la costa y es el camino principal a Villa Alegre y a la ciudad de Linares. Por otra parte, estas vías de comunicación, son, no diré carreteras, sino espléndidas para coches, lo que facilita enormemente los transportes. El mineral queda distante de Villa Alegre 8 leguas y a 12 leguas de Linares. El i nf rascri to , con el. ob jet o de efectuar las mens uras de las pertenenci as, levan tar un pla nd de ta ll ad o e informar sobre este mineral, se trasladó desde San Javier a las minas, donde permaneció seis días. U n a per sona con cono cimientos geológicos y mineros que por primera vez'visite estas minas, puede apreciar a primera vista, que el yacimiento formado por un
38 — grupo de potentes vetas se presenta por demás halagador y no sería exagerado calificarlo de "impresionante". Si se pasa a estudiar más detenidamente a fondo el punto geológico, se llega a la conclusión de que el sinnúmero de vetas, habiendo el infrascrito contado más de veinticinco, muchas de ellas de más de cuatro metros de ancho, forman a profundidad, en sus empalmes, los criaderos de oro de más alta ley. Formación
geológica.
La formación general primitiva es de origen granítico, presentándose en la superficie muy descompuesto. La capa superior ha sido una estratificación de pizarras, lo que puede apreciarse al estudiar la zona de los alrededores, pero que en el Cerro Pillay ha desaparecido por efecto de la erosión y descomposición por la acción atmosfér ica , quedando sólo ras tros de ella en los valles que circundan. Toda la formación que es de origen granófiros, está cruzada, en la zona en que las minas se encuentran, por verdaderos vetarrones de cuarcita, que afloran en la superficie, f o r m a n d o en lo alto del Cer ro, crestones de indisc utibl e imp ort an cia geológica. Estas vetas, much as de ellas hasta de tres o cuatro y medio metro de ancho, atraviesan el Cerro de lado a lado y de Norte a Sur y paralelamente. Otras vetas corren con rumbo Poniente a Oriente y en distintas direcciones cruzando las anteriores, como podrán verse en el plano que acompaño. Este conjunto de vetas, forman un verdadero grupo de cruceros. La práctica y los estudios hechos en minerales auríferos han demostrado que cuando se presenta este sistema de vetas paralelas, resulta con seguridad un enrique cimie nto con sta nte en los beneficios y siempre son más productivas que las que varían de rumbo a excep-
— 39 — ción de la variación del rumbo o inclinación que es acompañado generalmente de mineral más rico en el ángulp o cerca de él. Esta circunstancia, indica ab unda nc ia ¿fie mineral. La potencia de estas vetas se pu ed e apreciar en la s u p e r f i c i e , ya sea po r su nú me ro co mo p o r su consti tución y cada una en sí, con criaderos auríferos. El or o se encuentra imp re gn ad o de estas cuarcitas € n tal proporción, que hay partículas que pueden apreciarse a lá simple vista. Este grupo minero es un verdadero yacimiento aurífero, tanto por la magnitud de sus vetas como también po r la perspectiva que cualquie r en te ndid o pued e apreciar en hondura. El cue rpo de las vetas es f o r m a d o por cuarcitas con sus schists don de el or o puede verse en pequeñas cantidades. Estas masas cuarzosas contienen mu ch o óx id o de fierro que les da el color peculiar. La labor existente a la que me referiré más adelante, da claramente una idea completa de la constitución geológica de la zona y puede apreciarse en parte, la enorme importancia de dicho yacimiento. En efecto, su estudio demues tra que estos depó sitos no son con sti tuido s por frisuras originales, sino que han sido formados por lenta acción metamórfica reemplazando gradualmente la roca original de que es constituida. La formación geológica general no demuestra disturbio alguno. Las vetas son de mucha persistencia y no demuestran fallas o botamiento. Trabajos
efectuados.
Todas las pertenencias tienen su labor legal, es decir, sus piques de cinco metros de profundidad, excepto la pertenenci a Ri quez a que tiene 'co mo la bor un soc avó n de 48,66 metros desde su boca.
— 40 — Este socavón parte de la falda Norte y se dirige al Sur con 23 grados 15 -O. mide 1.40 me tr os de ancho por 2 metros dé alto. Esta labor, parece que se le .dió un a dirección errónea, no obs tan te, este socavón pu ed e cortar la primera de las muchas vetas que corren de Poniente a Oriente, la cual daría una alta ley por oro. In du dab le men te , que si se hicieran algu nas estocadas de pocos metros a ambos lados de esta labor, podría cortarse las dos vetas con las cuales corre paralelo dicho socavón, y se encontraría con los cruceros si se siguiera, sobre las mismas vetas. Estos cruceros serían los productores de la más alta ley por oro en el criadero. P o r ot ra parte, la fo rm ac ió n geológica demuest ra cla ramen te que este si nn úm er o de vetas deben tener su origen común, es decir una veta criadora de muy alta ley. Un estudio detenido en el terreno durante el desarrollo de las labores, cuando estas mismas estén en producción, po dr á localizar fác ilmente ese origen, pues la formación índica que no debe estar muy lejos del terreno explorado, pero si a mayor profundidad. Futuros
trabajos.
Es ti ma el inf ras cri to, que la explotació n de este yacimiento aurífero es por lo demás sencillo y considera que las labores, si éstas se efectúan en forma sistemática y conveniente, encontrarían las vetas y sus empalmes antes de 15 0 met ro s de avance, do nd e se encont ra rí an las; leyes por oro muy uniforme. U n a pequ eña exp lot aci ón de este mineral , po dr í a dar fácilmente con el avance ya iniciado, más o menos 15 tonel adas diaria s de min era l con un a ley medía d e 30 gramos oro por tonelada, advirtiendo que la formación se presta admirablemente para iniciar dos o tres labores más, sobre las mismas corridas y en beneficio desde que se inicien los tra baj os. Esto, nat ura lme nte , tr ip li .
— 41 — caria la extracción del mineral. Debe tomarse ftota de que el clima de la zo na permit e el t r ab aj o sin in te rr up ci ón durante todo el año. Este mineral se presta admirablemente para ser trata do po r amal gamaci ón . Al efecto, p od rí a establecerse una planta amalgamadora con dos o tres baterías de pisones en las mismas pertenencias, pues la topografía del terreno es apropiada para la ubicación de una planta escalonada en la que se consulte el procedimiento de cianuración como complemento al de amalgamación. Anexo a esta planta habrá que consultar una planta elevadora de agua y la casa de fuerza motriz y el lugar apropiado para efectuar estas instalaciones sería a orillas del mismo río Loncomilla que se encuentra a más o menos tres kilómetros del mineral. Este río Loncomilla podría prop orci onar la fuer za hidráulica, pod rí a aprovecharse en energía eléctrica "haciendo las instalaciones necesarias en la misma pl an ta , para mandar esta energía al establecimiento. Una instalación de bombas surtiría el agua necesaria enviada por cañerías a la^planta del establecimiento . Po r lo demás, en las dos qu éb ra da s que están situadas al Norte y Sur de las pertenencias, hay agua en cantidad suficiente para la bebida durante todo el año. Estas aguas riegan los valles y chacras donde hay abundante pa"sto. En cuanto a leña, todos los cerros y lomas estíán cubiertos de pequeños bosques en las que abundan los espinos, algunos de ellos hasta de 30 a 40 centímetros de diámetro. El infrascrito estima que en un mineral de oro de «sta categoría, debe consultarse el beneficio de los minerales en las mismas minas, de ahí que consulte su establecimiento de beneficio, administración y todo lo concerniente a una empresa de esta especie, con ubicación en las mismas pertenencias . Si se pensa ra tr an sp or ta r el mineral para hacer su beneficio en otra localidad, se ten-
— 42 — dría que lamentar las pérdidas consiguientes que son imposible s de evitar cuando se tr an sp or ta minerales ricos de un punto a otro. Análisis.. Los análisis de las diferentes muestras sacadas por mis propias manos y hechos por mí acusan un promedio por ley de oro de 14 gramos por tonelada y el metal que le sigue en ley es el fierro metálico con leyes alrededor de 10 %. Se presentan también indicios de plata, cobre y azufre. Esta ley de or o es, po r cierto, de las muestras tomadas en la superficie, pero estimo que a profundidad la ley media tiene que mantenerse alrededor de 50 gramos, o sea, 1,7387 onzas por tonelada. Esto es muy sorprendente, más aún, cuando se trata de un yacimiento de esta especie. Explotación.
Tomando como base 325 días en el año de traba jo constante de 24 horas, con el siguiente cálculo bastante castigad o, te nd re mo s: tres socavones en traba jo que nos da rí an 45 tone ladas de minera l en 24 horas, pe ro castigándolo sólo tomaremos 30 en las 24 horas de explotación de las minas, es decir, una producción para tres baterías de pisones. Si el mineral nos da solamente una ley de 30 gramos en lugar de los 50 gramos consultados en el común a que me refiero arriba, tendremos una reducción bastante castigada de 900 gramos de oro en las 24 horas, o sea, anualmente 164.5 kilos de oro. Siendo el precio de hoy, más o menos a $ 2,545.72 el kilo de oro, tendremos una producción anual de $ 418,770.94. Pasando ahora a los gastos para la explotación de la cantidad de minerales arriba indicados, ser,ía necesaria una administrción que con el personal completo, inclu-
43 — yendo herramientas y explosivos, no subiría de $ 100,000 anuales. Respecto a los gastos de explotación y beneficio los cálculos de éstos no pueden subir de $ 50,000, estando la planta en continuo funcionamiento. Este cálculo lo hago basado en estudio de plantas similares y de más o menos igual producción consultada. En consecuencia, se podría obtener con el trabajo reducido y pequeño que he tomado como base, una utilidad líquida de $ 268,500 anuales. Si se profundiza al estudiar estos cálculos se nota rá que he castigado, po r todos lado s sus números, para quedar en cifras por demás racionales. Así he castigado la producción en porcentajes bastante subidos, como he consultado gastos bastante excesivos. Conclusiones.
El infrascrito, como se verá por lo expuesto estima que el mineral Cerro Pillay cumple con todas las características de un centro minero aurífero de grandes proyecciones futuras, que, unidas a las circunstancias locales de la zo na, puede ser un o de los más im po rt an te s del mundo. La abundancia de minerales que encierra este yacimiento darán margen para extracción de minerales durante muchas décadas de años, por muy grande que sea la instalación de beneficio que en él se establezca. Si se tomara como base una explotación en grande escala en la forma que se efectúa por las grandes Compa : ñías de Norte América, aportando el capital necesario para una gran e xplot ación , se ob te nd rí an sumas fabulosas, que enunciarlas parecerían fantásticas ante los ojos de los que no han visitado y estudiado este yacimiento. (Firmado).—O. A. Schmidt. Ingeniero de minas. Ex-Ingeniero del departamento de Minas del. Ministerio de Industria y Obras Públicas de Chite.
— 44 —
Observaciones sobre el Mineral de Pillay en mi visita del 21 al 26 de mayo de 1931 DEL INGENIERO DON EDUARDO MI RA ND A M. , PERITO AU TO RI ZADO DE MINAS, MINISTERIO DE FOMENTO
El mineral de oro de Pillay, de don Alfredo Délano, ubicado en el Departamento de Loncomilla, Comuna de San Javier y geográficamente en el meridiano 71 9 , 57' y paralelo 35°, 46', 5. Altura sobre el nivel del mar de 632,50 en el Hito de referencia. No es un mineral en pleno apogeo de su explotación, pero sí, es un grupo de pertenencias mineras que ya tiene iniciados sus laboreos de reconocimientos. Geología. No corresponde a una formación determinada regularmente, como serían los que determinan los grandes cordones de cerro de la Costa y Andina. El origen parece eruptivo. He visitado los alrededores y todo lo manifiesta así, pues, esta formación localizada dentro de un radio de 10 kilómetros aproximadamente se soloventa instantáneamente de las grandes llanadas que le rodean. La constitución de las rocas así lo determinan, pues se ven alternar las cuarcitas, con los felspatos, gneis, esquitas cuarzosas, la mica esquita y pequeños diques de dioritas. En el recorrido que hiciera, no he comprobado la fo rm ac ió n reg ular iza da de -estratificaciones concor dantes o discordantes, sólo he logrado determinar el solevantamiénto instantáneo del terreno, como si del cono de erupción sobrevinieran los agrietamientos que más tarde fue-
— 45 — ron rellenados p or las emanaciones met ali zadas. De ahí que, a pesar de la manifiesta mineralización en vetas de corridas que afloran en un recorrido visible de próximo 5 kilómetros entre el cerro Pillay y el río Perquelauquen, n o se denoten vetas regularizadas en un sistema fijo, sino una serie incontable de vetas y vetillas de diferentes espesores, que hacen presumir que la provocación eruptiva debió ser muy instantánea, que agrietó en una larga zona de terr eno; siguie ndo el par ale lismo regular de las grandes conformaciones ya citadas de la orografía del país. Y esto no es extraño, pues tenemos en la misma forma los grandes yacimientos de minerales de Tamaya, San Lorenzo, Cartavia y otros de la Provincia de Coquimbo, que a igual que éste, fueron posteriores a los solevantamientos generales. M i n e r a l o g í a .
Al ser un producto de sublimación tenido desde el interior y arrojado del cono erup ti vo , mat eri a de la formación general, no es extraño entonces el que encontremos entrelazados y formando el rellenamiento de estas vetas una masa felspática con súlfuros de hierro y cuarcitas ferruginosas, que le dan un tinte atabacado en el exterior, te nien do en penetraci ón la granulación de oro fino. La pirita misma de hierro, se presenta en granos pequeños, no formando una masa compacta sino un conglomerado dentro de la masa felspato-cuarzoso, y no sería raro que en alguna mayor profundidad encontráramos la presencia de arsénico, jaspe y otros metálicos y no metálicos incrustados en la masa. La- mine rali zaci ón así dete rmin ada, facilita muc ho la separación mecánica del oro, de las gangas y elemen-
— 46 — tos secundarios. Su met alurgia, g or consiguiente, es, sencilla, puesto que sólo se limitaría a eTectuar una separación por densidades. Análisis. El infrascrito no ha efectuado análisis de la mineralización por el escaso tiempo que dispuso en su visita originada, no por un estudio completo de la zona, sino por la constitución de la propiedad minera de acuerdo con las disposiciones del Código de Minas. Pero ha tenido conocimiento de análisis efectuados por profesionales de alta preparación científica, que no puede dudarse de sus resultados e informaciones; mas, al suscrito ocúrresele que efectuando un muestraje científico, de acuerdo con un plan determinado de futuros trabajos, los resultados pueden ser óptimos. He lo gr ad o ver en las mue stras exteriores de los afloramientos, partículas finas del oro de impregnación, de un color amarillo de bronce con un ligero tinte ro jizo, lo que denota la acción eruptiva y su contacto con la sulfuración ferruginosa. Hoy mismo ya se puede practicar análisis de las diversas vetas que se han logrado tocar en los laboreos y aún en los pozos que los anteriores poseedores del yacimiento, ab rieron par a servir de po zo s indicador es de la mineralízación, conforme al anterior Código de Minas. Y creo de conveniencia para su actual poseedor seño r Dél ano , que co nj un ta me nt e con el practi car los avances de reconocimientos en el socavón, debe también hacer pequeños sondajes de reconocimientos en los afloramientos más interesantes de esas vetas. Así pue de hacerse un a cubicación y estudiarse el plan futuro dé' tra"bajós.
— 47 — L a b o r e o s .
A indica ción de un o de los Ingenieros de Mi na s anteriormente informantes, se practicó la apertura de un socavón de 110 met ros de lo ng it ud, con una pend ien te medía de 1-2 % del escurrimiento hacia fuera y una estocada de fronton vuelta al Poniente de 11 metros de longitud y otra al Oriente con próximo 45 metros. A los 30 metros más o menos se puso en comunicación con un pique labrado por una de las vetas y que tiene aproximadamente 48 metros verticales. Aún cuando el Socavón no fué labrado siguiendo la corrida de las vetas sino vuelta un poco al Poniente, cortó a su paso a tres de las vetas de corrida y de flanco tocó también a una vetilla de crucero. Parece que la misión de los que efectuaron estos trabajos no fué el de la explotación, sino lisa y llanamente el de abrir esta galería, pues pu di ero n al contacto de esas vetas efectuar reconocimientos sobre ellas. En mi visita a la mina tuve oportunidad de indicar algunos trabajos de avances sobre las vetas que ya están localizadas a ese nivel y aún el plano que acompaño de la zona mineralizada, los dejo indicados, como proyectos de futuros trabajos. No apartándose del origen de formación, los trabajos deben converger a la zona de contacto de las vetas, es decir, en las proximidades del cono de erupción, que puede ser muy profundo, probablemente dadas las corridas de estas vetas, pero parece que el punto de arranque estuvo entre el Portezuelo y el socavón hoy labrado, derramándose hacia la vertiente Sur de estos cerros. Así, los trabajos deben ser en avance hacía el Sur, siguien do las corridas y en to do mo me nt o pr oc ur an do ganar las honduras necesarias para determinar con más precisión la formación compacta de ella. Pues los 50 me-
— 48 — tros, aproximados, de masa entre la superficie y el socavón, no han logrado aún compenetrar las materias que forman los rellenamientos de las vetas y darle la consistencia correspondiente, de ahí que el subscrito piensa que el nivel 100 que me he permitido llamar en el proyecto de laboreo, puede ser el plano preciso de explotación de estas minas. Hacia él debe converger la preparación del laboreo; este plano de explotación futura tendría su salida por un contra-socavón situado por el lado del Norte próximo a la quebrada y más hacia el Ñor Poniente en forma de caer, si es posible, de .flanco sobre la corrida de las vetas y en su pendiente. El Socavón que prolongado iría hacia el Sur, part ir ía precis amente desde la vertical del pique prolongado en profundidad de 50 metros verticales, y directamente sobre la corrida de las vetas. La primer a part e del tr ábaj o sería en el costado Norte y la segunda en el lado Sur, o simultáneamente en los dos extremos, así la explotación misma sería facilitada, sirviendo de cañón central de ventilación el actual pique. E x p l o t a c i ó n .
Consideradas las formas de los laboreos v obtenida la producción de minerales, es recomendable llevar éstas por un andarivel a la llanadita baja que está directamente al Norte y a dos kilómetros de la mina y contigua al camino carretero que pone en comunicación a las minas con San Javier, donde se instalaría una planta de concentración de minerales. Se elige este sitio en vista de la mayor amplitud del terreno pa ra pod er cons tru ir los galp ones y casas de operarios, como también el aprovechamiento de las aguas tanto de las quebradas como el de las napas subterráneas.
— 49 — Pienso que el sistema de tratamiento de los minera jes puede ser un sistema mixto de lixiviación, previa la trit uraci ón y moli enda, y el de amalgamación p ara el separado del oro fino. Por el momento sería sólo recomendable el primer sistema, es decir, el de la trituración molienda y lixiviación o separado de las materias estériles, para dejar solamente una argamasa de piritas de hierro y oro, que tinto el cuarzo como el felspato se eliminarían por densidades. R e c u r s o s .
Es grato dejar constancia que este grupo de minas se encuentra en una región, donde puede trabajarse todo el año sin tener que interrumpir las labores por las inclemencias del tiempo. El clima es benigno. La distancia a las poblaciones de San Javier y Linares es de 38 y 45 kilómetros respectivamente por buenos caminos carreteros. Fuerza motriz hidráulica puede obtenerse un poco al Sur de las minas en el sitio denominado Las Juntas, en la confluencia de los ríos Purapel y Perquelauquen, sobre este último el señor Délano solicitará una merced de aguas para usos industriales, capacitado para obtener hasta 500 H. P., que pueden ser transportados después de haber sido transformados en energía eléctrica al través de unos cerrillos bajos que separan a las minas de la confluencia de estos ríos y a una distancia no mayor de 5 kilómetros en línea recta y 7 kilómetros hasta donde quedaría ubicada la planta. La Compañía Minera puede colocar de 100 a 200 operarios sin necesidad de recurrir a medi os exteriores para la alimentación de los operarios, pues los recursos
— 50 — regionales son más que suficientes para el abastecimiento. Factor sumamente importante sí se considera el costo de producción. Por venir . Al tratar sobre la geología de este grupo de minas y sus mineralizaciones hemos dejado ver la importancia que encierra tanto en la constitución de su formación origen, como en los elementos componentes de los rellena mí en to s de las vetas, que el po rv en ir de las minas es com pl eta men te det erm ina do y no estuvi eron errados a mi juicio los Ingenieros informantes, en clasificarlo de un yacimiento de una importancia incalculable. El hecho de presentarse como un vasto rebosadero, para el subscrito, la impresión es de la "más óptima que puede estimarla y el porvenir de las minas es innegable. Probablemente la primera zona de oxidaciones no sea muy rica en leyes de oro y aún sufrir los quebrantos inherente s de po br ez as de sus vetas, pero las mayores profundidades, no sólo darán una ley más estable para la explotación, sino que ellas se regularizarán. De ahí .que el espíritu que debe anim ar a la ad mi nistración de los trabajos en las minas es la tendencia a las mayores profundidades de explotación. No pienso que del momento sea necesario entrar en una explotación con planta costosa, ni grandes instalaciones, po rq ue se necesita pri mer ame te pr ep ar ar las labores interiores de las minas, para asegurar un cubicaje capacitado para las maquinarias que se van a emplear. Es verdad que ya con lo reconocido y las labores que actualmente ya se preparan puede entrarse a una explotación racional; por estas mismas circunstancias el tipo que propongo de beneficio, debe ser de uña concentra-