PSICOLOGÍA DE LA PROSPERIDAD INTRODUCCIÓN La psicología de la prosperidad es un libro sencillo y práctico en el que encontrarás técnicas dinámicas para establecer en tu vida una conciencia de prosperidad. Te aseguro que no dudarás en ponerte a trabajar con estas técnicas, para eliminar la conciencia de escasez y vencer los obstáculos que han impedido y cerrado tu fluir proveedor. Toda la prosperidad que necesitas está en esencia, en forma de ideas esperando que te atrevas a apropiarte de ellas. Solamente necesitas pensar prosperidad, sentir prosperidad y actuar prósperamente para que los resultados sean efectivos y la manifestación se vea inmediatamente. Trabajar con la prosperidad es traer a manifestación el reino interno. Este reino abundante de la mente tiene que manifestarse abundantemente en tu mundo o en tu reino visible. Tú y yo tenemos dominio absoluto de todo lo que compone el plano visible de nuestra conciencia y mi finalidad en este libro es traerte ideas claras, dinámicas, concisas y efectivas que te ayuden a salir de tus limitaciones y las apliques en todo el proceso de tu vida, ya tengas el negocio más prominente o seas el empleado más humilde, al punto que aceptes que para prosperar conscientemente necesitas poner a Dios como socio. Yo creo que enseñarte como crear una conciencia de curación en tus finanzas, sanando tu mente y abriéndola a la abundancia, perdonando, borrando, eliminando todos los errores cometidos en contra de la Fuente Proveedora, y ayudarte a tener resultados positivos es uno de los objetivos primordiales de este libro, que te habla solamente de prosperidad y la manera cómo puedes envolverte en ese proyecto. Piensa ahora en el cuadro que hay presente en tu vida como un caos y te aseguro que al terminar de leer todos los temas preparados para ti, una fuerza poderosa te moverá hacia delante, para entrar por el sendero de la prosperidad, la demostración y el puerto que te espera será el éxito. La psicología como ciencia del alma, es el estudio para descubrir nuestros impedimentos emocionales y síquicos. También la podemos aplicar para remover todas las barreras que están estancando nuestra prosperidad, y a través de todos los temas que aquí te presento, vas a cerrar las puertas a la escasez, a la pobreza y a la miseria. Vas a aprender a abrir la mente a la prosperidad a través de la palabra hablada, de la ley de circulación que es dar y recibir, poniendo a Dios primero en tu vida a través del diezmo. Conociendo el significado metafísico del dinero podrás usarlo sabiamente en todos los asuntos de tu vida hasta llegar a la realización de traer la prosperidad del reino invisible de la sustancia al reino visible de la manifestación, a través de los billetes de fe. Trabajando con la ley del aumento, descubrirás que la prosperidad depende de ti, cuando consagras lo mejor m ejor de tu vida para Dios, como la mejor semilla que da buen fruto. Los temas que aquí aparecen son el resultado de un proceso con el que comencé a trabajar hace muchos años, tratando de practicar !a Verdad en mi vida, y en todos los lugares donde el Espíritu me ha usado como canal y me ha colocado como un sembrador de la semilla de Verdad, he tenido la oportunidad de aplicar todo lo que hoy le entrego a la humanidad como un aporte de luz, cuya iluminación brillara a través de todos los hombres de esta era, cuyos ojos están puestos en el siglo XXI, al que entramos libres de los obstáculos, impedimentos y conocimiento errados y limitados del siglo XX. Tú y yo somos pioneros de esta nueva raza, sigamos firmes y seguros, porque los demás también nos seguirán. Nuestra mayor oración h oy es permanecer seguros, no detenernos, no desmayar, amar a todos los miembros de la familia humana. Lo que yo hago, lo que tú haces y lo que hacemos todos está influyendo con el éxito colectivo. El Amor Divino y Proveedor es la Idea de Unidad Universal. LA PSICOLOGIA DE LA PROSPERIDAD
El amor y el perdón, son ingredientes esenciales para una prosperidad estable, segura y efectiva, no se puede obtener una conciencia de prosperidad y abrir la mente al Ilimitado Fluir de la Abundancia del Espíritu, si nuestro subconsciente, fase emotiva y pensante de nuestro ser, está adulterado por el odio, el rencor, el resentimiento, la duda, la inseguridad, el pánico, la depresión y la ansiedad por las cosas que anhelamos obtener sin haber hecho conciencia de ellas. Es necesario limpiar nuestra mente para recibir y levantar nuestro corazón, para aceptar que todo lo que necesitamos en nuestra vida diaria se manifiesta a través de la ley de equidad y Orden Divino, esto quiere decir que el Orden Divino tiene que establecerse en la conciencia interna para que lo externo aparezca en orden. El éxito, la salud y la prosperidad son los tres terrenos que tenemos que cultivar, y mantenerlos fructíferamente es cosa muy personal y es lo que demuestra que una conciencia superior está establecida. El Yo Soy: la Energía Divina, la Sustancia Radiante, la Vida y la inteligencia, forman la parte espiritual de nuestro ser, que siempre está trabajando en forma inconsciente para traer mucho fruto manifestado. Nuestra fase mental, emocional y física, tienen que estar consciente de esta labor espiritual, así lo leemos le emos en el libro del Génesis: "Y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas". Gen 1: 2-4. Llegar a estar consciente de esta actividad interior, es el hacerse la luz y es el amanecer del primer día de nuestro despertar espiritual. Nuestro ser interno está activo, no desmaya por eso estamos seguros de que el
Reino Ilimitado de la Abundancia está listo para fluir como prosperidad, o sea que el primer paso para obtener una prosperidad estable y fluyente, es saber que el origen de nuestra riqueza es la Energía Esp iritual generando constantemente en la mansión espiritual de nuestro ser, centro de nuestra conciencia, como el Principio que mantiene activo y dando frutos los tres terrenos fértiles. En nuestro campo emocional abrimos la fuente del fluir abundante de la sustancia a través del amor y el perdón. El rencor, el odio y el resentimiento cierran las puertas al fluir ilimitado de la prosperidad, una mente pensando en todo lo que desgasta su poder, enferma emocionalmente, enconada por lo que le han hecho o dejado de hacer y resentida
por las experiencias de su vida, cuyo pasado es un espectro que le aterra, no está capacitada para captar las ideas de prosperidad y el éxito es borroso. Aprender a perdonar, desarrollar el arte del perdón, soltar y dejar ir cosas, personas, lugares y trabajar a un nivel consciente con palabras positivas, afirmaciones y terapias que lo energeticen y lo fortalezcan, va formando una conciencia estable de receptividad y una mente intuitiva al ilimitado potencial del Espíritu. Crear una conciencia de curación y fortaleza, es primordial y debe ser el primer objetivo para una prosperidad estable. La curación tiene que efectuarse en la mente, en el corazón, en el alma, en el cuerpo y por consiguiente todos los asuntos externos se impregnan de la curación, ya que como nos sintamos internamente así lo irradiamos externamente. Este es un proyecto, un trabajo, una disciplina, un levantamiento en conciencia, cuyo resultado es abrir las puertas a todo el bien que está acumulado y al cual hemos impedido su manifestación. El Amor Divino como ingrediente básico para prosperar, comienza en cada uno, porque si yo no me amo, no me autoestimo, no me estimulo, ni me perdono, cierro mi mente y mi centro de energía espiritual; en vez de atraer hacia mí todo el equivalente del bien, atraigo todo el mal, lo que quiere decir, saliéndome todo torcido, al revés, complicado y con resultados falsos y negativos. Si quiero atraerme todo el bien, me convierto en un centro de bien y todo lo que está listo para mí se dejará ver pronto. El amor y el perdón trabajan unidos para abrir las mansiones más cerradas del alma y el sendero por donde se manifiestan las riquezas del reino aparecen. Si quieres poner a trabajar en tu vida el Amor Creativo, la Mente Divina (Dios) desarrolla y practica el perdón, comienza a hacer una lista de personas y cosas que tienes que perdonar en tu vida, perdonándote primero tus errores y hechos del pasado y envolviéndolos en la ternura del Amor Divino, centra toda tu atención en esta actividad hasta que puedas amar y perdonar tan fácilmente, al grado de que lo que te hicieron, lo que te hagan y lo que te estén haciendo no te moleste, ni te haga daño, ni te desvele, ni mucho menos perturbe la serena paz de tu alma. En la misma forma que perdonas, reclama el perdón para ti, de todos aquellos a quienes hayas ofendido o a quienes les hayas hecho daño, recuerda que así como te hacen daño, tú también has hecho daño, y así como perdonas, te perdonan y serás perdonado. C uando comienzas a trabajar con el amor y el perdón, estas permitiendo que todas las fuerzas del Universo se pongan a tu servicio. Al limpiar tu alma de pensamientos y emociones negativas, generas un magnetismo que atrae todo tu bien y asegura la prosperidad en todas las áreas de tu vida. La psicología de la prosperidad se basa en perdonar, soltar y dejar ir todo a su más alto bien, dejando que el amor perdonador de Jesucristo, llene la mente, el corazón y opere en todas las esferas que componen la conciencia externa del ser. Todo s entir negativo, frustración, ansiedad, temor y preocupación, tienen que disolverse hasta sentir un perdón total y una completa liberación de los errores pasados y sus resultados. Si en estos momentos piensas en todo lo que tienes que perdonar, te darás cuenta que primero debes limpiar tu mente para recibir, ya que si tu meta es demostrar una prosperidad estable tienes que a gregarle mucho amor a tu vida y todo lo que haces con amor, sin egoísmo, sin lucro netamente personal, sino por a mor a la humanidad, trae resultados efectivos. Muchos han prosperado sin tener en cuenta las l eyes que violan y sin pensar en el daño que le hacen a su prójimo y su finalidad es enriquecerse sin importar a quién se llevan por delante y cuando están amasando sus riquezas son amenazados por las mismas leyes que violaron y lo que un día fue una meta para su nivelación financiera, el puerto que encontraron fue el fracaso, millonarios fracasados con mucho dinero, porque creyeron que la misma riqueza les daba poder para hacer y deshacer, esto es prosperar por la suerte y por los esfuerzos humanos, creyendo que la prosperidad se obtiene de lo externo y no tiene nada que ver con el Espíritu. Abrirnos al amor y al perdón, cuya actividad está lista a emerger de las mansiones de nuestro subconsciente y que opera a través de nuestra fase mental, es un objetivo primordial. Cuando pensamos que primero debemos ponernos de acuerdo con nuestro adversario, con la parte adversa y contraria de nuestra propia naturaleza emotiva, con la que tenemos que estar de acuerdo para levantarla, esto es, no condenarnos ni por el pasado ni por el presente, sino perdonarnos, amarnos y establecer ese cambio en lo interior que se proyecta en lo exterior, por eso Jesús dice: "Ponte de acuerdo con tu adversario pronto". Pero recordemos que nuestro adversario no es otra persona, sino nuestra parte emotiva que actúa contraria al principio espiritual que está activo en nosotros. Jesús también dice: "De que le sirve al hombre ganarse todo el mundo si al fin pierde su alma". Queriendo decir, que la riqueza mal conseguida a la que se le pone toda la mente y el corazón se convertirá en un enemigo que amenaza a diario la vida, la estabilidad y la seguridad; y en vez de ser un paraíso es un destierro desolado. Hoy escuchamos normalmente decir a un sin número de personas: “Yo no consigo dinero porque me secuestran". Cuando se pone primero el a mor perdonador como elemento básico para u na mente abierta al bien, se asienta y se establece una fuerza tan poderosa en el alma (subconsciente) que todo lo que el hombre necesita se lo atrae, y su vida es próspera, feliz y llena de gozo, porque el amor y el perdón liberan al hombre de fuerzas negativas que ahuyentan, rechazan e impiden el fluir del Espíritu. Cuando se perdona totalmente no hay impedimento que se oponga a la exitosa demostración de la prosperidad, si se quiere hacer espacio en la vida, tanto en lo interno, como externamente, hay que aceptar y practicar el perdón totalmente, de esta manera el desorden en la vida y las cosas indeseables e innecesarias se disuelven. Recuerda que al estar en constante necesidad del amor y del perdón y al ponerlos a trabajar los resultados son efectivos. El otro campo para una prosperidad estable después de limpiar la mente con el perdón, es crear metas positivas. Un hombre con metas positivas y definidas tiene su éxito asegurado y ésta es la base para una conciencia de prosperidad abundante, así como hay que limpiar la mente para recibir, prepararla y llenarla de metas positivas es primordial, comenzar primero por eliminar hábitos y condiciones que se quieren ver desaparecer, luego enumerar todas las metas y logros pasados, inclusive presentes, para que las metas fijas que se han propuesto aparezcan y a la vez no encuentren obstáculos. Bendecir el pasado con todo lo que lo constituyó, disfrutar el presente con todo lo que contiene y dar gracias por el abundante bien que aumenta en la vida cada día. Pero no se debe quedar aquí en este estado de conciencia
solamente, hay que soltar, eliminar y dejar ir lo que no se desea, lo que no se acepta y lo que no está dando frutos. Preparar ahora la mente y el corazón para atraer todas las metas fijas y los objetivos que se desean ver manifestados en la vida. Ser específico y afirmar: Gracias Dios por la riqueza de bien, que está llenando las necesidades de acuerdo al Plan Divino para mí. El amor, el perdón, la limpieza de la mente, sacando, eliminando, liberando, purificando y haciendo desaparecer lo que ya no es parte ni de tu vida, ni de tu éxito, es lo que hace espacio a los medios o metas para una prosperidad estable. Para asegurar el éxito y tener demostraciones de prosperidad, es necesario establecer mentalmente las metas definidas; éstas se obtienen cuando buscamos primeramente el reino interno y seguimos su revelación como impulsos intuitivos. Dando gracias por el bien que posees, ahora no desmayes y permanece seguro para que tus metas sean motivadas y sostenidas por un vivo e intenso deseo de seguridad, el resultado de una conciencia que no tiene metas positivas ni definidas, son la escasez y la limitación. Una mente abierta, una alta visión, visualizar el bien en todo, y mantener un cuadro definido de que lo que se visualiza es efectivo para el éxito. Lo que es sagrado para tu alma, como tus riquezas ocultas, debe ser guardado en secreto hasta que se manifieste. El campo físico de la conciencia del ser está sujeto al mental, al emocional, y al espiritual, siendo éste el poder operante en el centro de nuestro ser. Los tres planos de la conciencia en los que genera la Mente Divina, están entrelazados el uno con el otro, el campo emocional por medio del amor y el perdón, el campo mental por medio de metas positivas, una alta visión y la acción de gracias, centrando toda la atención en que todo lo que se desea, se está manifestando en el campo físico de nuestra conciencia haciendo un pacto directo con la Ley Divina y con el Amor Creativo de Dios, poner en circulación toda la sustancia en forma de dinero o de bienes, por medio del diezmo y de las ofrendas consagradas a la corriente espiritual, único medio sabio por donde la ley de dar y recibir se pone en operación. La provisión física es un hecho cuando se da sabia, desinteresada, espontánea y amorosamente. La ley divina operando dentro de ti, tiene asegurada la totalidad de todo tu bien y este convenio es irrevocable. TRATAMIENTO
En mi clara percepción de la Verdad, centro todas las fuerzas de mi ser, en el cambio que se está e fectuando en mi vida, yo cambio conscientemente, liberándome del pasado y todas sus consecuencias, me libero del pasado apropiándome del amor perdonador de Jesucristo y sé que todos mis errores se disuelven, por el ilimitado perdón que emerge de mi interior. En mi conciencia de liberación sé que nada ni nadie puede interponerse en medio de mi éxito y mi prosperidad está asegurada. Yo progreso en mi vida y en mis asuntos día a día, paso a paso pero con una convicción firme en que Dios es mi Fuente Proveedora y yo soy dueño del caudal ilimitado de Su riqueza. LA SEGURIDAD ES PRIMORDIAL
El hombre inseguro fracasa en todo lo que emprende y todo lo que comienza queda inconcluso. La base del éxito es la seguridad que cada uno posee para emprender toda a ctividad y llegar a la meta anhelada. El diccionario tiene muchas definiciones acerca de la seguridad, pero nosotros vamos a ir más allá de las definiciones literarias e intelectuales para apropiarnos de la verdadera seguridad espiritual. Seguridad espiritual es el fundamento, la base, el cimiento, la estabilidad del hombre, y todos buscamos apropiarnos de este principio porque hoy se padece de inseguridad, enfermedad que genera miedo, terror, angustia y pánico. Es normal escuchar a hombres y mujeres decir: Soy inseguro o insegura. Es necesario comenzar a trabajar para crear una conciencia de seguridad, éste es un poder innato en cada uno, solamente tenemos que volvernos a la parte más interna de nuestro ser y extraer de allí todo lo que necesitamos. Seguridad es fortaleza, es orden, es armonía, es paz, es la fe operando en una forma tan positiva, al grado que toda duda desaparece. Es necesario tener fe en la capacidad espiritual que todos poseemos y trabajar con ella al grado que ésta remueva montañas de dificultades. Todo lo que se ejercita se fortalece, podemos decir que ejercitando los tendones de la fe, éstos se fortalecen hasta volverse la fe en acción, la fe inconmovible, la fe espiritual. Este es el poder hacedor de milagros, el poder de hacer que todo se manifieste. Hoy los movimientos metafísicos están creando, despertando, construyendo un hombre nuevo, el hombre de la nueva era, el hombre genérico seguro manifestándose en hombres y mujeres levantados, superados, sanos, prósperos, libres, seguros e iluminados. Sobre estos ciudadanos descansa el futuro de las na ciones y del planeta entero. Charles Fillmore en su libro Jesucristo sana dice: Al desarrollar a sus discípulos Jesús tomó a Pedro como el representante de la fe y proclamó que sobre e ste fundamento (de fe), construiría al hombre nuevo. Su "Iglesia" conglomerado de ideas espirituales. La fe que Pedro demostró en los comienzos de su carrera no era de un tipo muy elevado. Cuando se juzgaba a la Verdad (representada por Jesús) Pedro lo negó, dijo que no lo conocía, renegó de Él, y demostró que su fe debía estar muy baja cuando se la puso a prueba. En el mismo final Jesús probó una y otra vez a Pedro, preguntándole tres veces, ¿Me amas? La fe y el amor están íntimamente relacionados. Tienes que amar al Señor y luego tienes fe en Su poder y Su continuidad espiritual, finalmente Pedro desarrolló un poder curativo poderoso, que aún su sombra curaba". El don de la seguridad es la fe trabajando por encima de toda experiencia, de toda situación, de toda crisis, de toda apariencia. No pongamos la fe a lo último, pongámosla al principio; siempre acostumbramos entregar todo a Dios cuando ya no hay otro remedio. Se dice de una señora que viajaba en un crucero por el Atlántico y se encontraron en dificultades alarmantes por las tormentas y la mujer se acercó al capitán para que le dijera la verdad de lo que pasaba. El capitán le contestó que estaban perdidos, la situación era desesperante y alarmante; y él exclamó: "Tenemos que confiar en Dios", y replica la señora: " ¡Cielos! ¿Ha llegado a eso?". El mayor interés
de Jesús fue conectar al hombre nuevamente con la Fuente Inmanente de Su ser inyectándole una nueva infusión de vida, de entusiasmo, de seguridad y de esperanza, vino a decirle que no estaba perdido cuando le dijo: "EI que cree en mí aunqu e esté muerto vivirá ". "He venido para que tengan vida y la tengan en abundancia". Como hijos de Dios, somos herederos de todo lo que es orden y armonía , de todo lo que nos mantiene seguros y a salvo en nuestro diario vivir. Donde nos encontremos, no importa lo que estemos haciendo, y con quien estemos, la Protectora Presencia de Dios nos rodea siempre. La Presencia de Dios opera en una conciencia de seguridad. Nuestras oraciones deben ser siempre por seguridad. Hagamos conciencia que Orar es estar seguro. No oremos por cosas, oremos por seguridad y con la seguridad que Dios satisface toda necesidad. Trabaja siempre con la seguridad del éxito, en todo y no desmayes por ninguna situación adversa. Tienes el poder de vencer, de sanar, de perdonar, de prosperar, de armonizar, y de caminar por encima de aguas tormentosas, pero recuerda, la duda te hace hundir, más tu seguridad te levanta. Un análisis cuidadoso ha demostrado que la fe como seguridad innata es el fundamento que edifica la conciencia individual al punto que ésta trabaja automáticamente en los momentos específicos. Se dice de un fiscal que sufría de un dolor de cabeza agudo y un médico le aconsejó ciertas cápsulas que debía tomarlas para mitigar el dolor, siempre andaba con ellas y un día en una audiencia le cogió el dolor de cabeza y automáticamente sacó una píldora de su bolsillo, se la tragó e inmediatamente el dolor desapareció, pero cuando vino a ver, no sacó la píldora del bolsillo sino que lo que sacó y se tragó fue un pequeño borrador o goma de lápiz haciendo los mismos efectos que la píldora. Estas demostraciones de la fe que trabajan a nivel inconsciente deben ponerse a trabajar a niv el consciente. Y agrega más aún Charles Fillmore, "que si concentráramos toda nuestra energía en este poder inv isible para ver manifestaciones visibles haríamos maravillas". La poderosa fuerza o poder del Espíritu está a nuestra disposición. Los médicos saben lo que influye este poder en acción en sus pacientes, y si éstos trabajaran más con el poder de la fe, cada día mandarían menos medicinas y trabajarían más positivamente con sus pacientes. Levantémonos cada día más a una conciencia de seguridad y no desmayemos ante las apariencias y experiencias externas.
“Cristo dentro de mí me da el don de la seguridad,
lo acepto
y soy prosperado”
La prosperidad depende de la seguridad. Una conciencia de seguridad en el ilimitado caudal de la mente divina sin permitir que la duda, el temor y el miedo desvíen la atención y la fe; trae resultados tan efectivos que las manifestaciones surgen como por arte sobrenatural. Este nivel de conciencia mueve montañas de dificultades, pone todas las leyes a trabajar a nuestro servicio. Nuestra mente se abre a captar nuevas ideas, los negocios son más productivos, la labor que realizamos a diario se presta con gozo y con gusto y la fuente de la provisión se abre a la abundancia en un constante fluir. Yo le recomiendo a todos los estudiantes de la Verdad engreírse menos en los fenómenos, especulaciones, trucos, símbolos y personajes que por metafísicos que aparezcan roban la atención e impiden crecer, creyendo que es de ellos por donde fluye el caudal de energía para solucionar los problemas y prosperar, pero no es así. Centra la atención en ti, trabaja contigo, descubre tu poder interno y todo el potencial que hay dentro de ti, si te das cuenta de tus errores, defectos y hábitos, no te sientas mal ni descorazonado, ni te denigres, ni te condenes; dedícate a transmutar toda esa energía porque la que gastas negativa y erróneamente la puedes dedicar a tu superación y esto es lo que te ayuda a desarrollar nueva fortaleza, habilidad de la mente que vence la debilidad de carácter, la personalidad y te lleva a permanecer firme y seguro. Nada ni nadie tendrá poder sobre ti, ni podrá arrebatarte lo que es tuyo. Cuando permaneces dedicado a ti, descubriendo y activando una conciencia de seguridad, cuando te levantas sobre tus difi cultades y experiencias, comienzas a adquirir dominio sobre las fuerzas elementales y todo está bajo tu control, ¿hasta dónde tienes que ir para obtener seguridad y fortaleza? Hasta que te capacites suficientemente para vencer.
LUIS ALFREDO PEREZ EDICIONES LUICHI