Díaz, Manuela
Segundo parcial domiciliario de Sociología Política. Cátedra: Thwaites Rey Docente: Clara Bressano Estudiante: anuela Día! "echa: #$%&'%#&('
1)
Tanto nto Alt Althu huss sser er com como o Pou Poula lant ntza zas s son son est estru ruct ctur ural alis ista tas, s, per pero o
entienden que el Estado no es un mero reflejo de la estructura, sino que elaboran una teoría más compleja. Althusser Althusser a a hacer hacer una dura dura crítica a la concepci!n concepci!n de los los fil!sofos fil!sofos de la "poca que se centraban en la parte represia del Estado para e#plicarlo$ por lo contrario, el autor plantea que no podría e#istir este concepto en una sociedad si no e#istiera una parte persuasia %retomando el concepto de consenso de &ramsci). Althusser a a desarrollar el medio por el que el Estado ejerce esa persuasi!n a tra"s de los Aparatos 'deol!(icos del Estado. Estos aparatos ideol!(icos son la escuela, la i(lesia, el hospital, etc. tienen la particularidad de que son plurales, son priados operan mediante la ideolo(ía$ son la forma de mantener la dominaci!n reproducir las relaciones sociales a tra"s de todos los actores sociales. Por supuesto que Althusser tambi"n identifica los Aparatos *epresios del Estado, que se materializan más cabalmente en las fuerzas de se(uridad$ dirá que "stos son centralizados, priados que operan por la iolencia predominantemente 1. El autor ubica tanto a los Aparatos 'deol!(icos como a los *epresios dentro del ámbito de la superestructura a a decir que, para que se puedan llear a cabo, necesitan de una estructura en donde se sit+en las fuerzas productias que (arantice su producci!n reproducci!n. Ahora bien, "sta es la innoaci!n, los aparatos de la superestructura tambi"n (arantizan que se pueda se(uir dando esa producci!n reproducci!n en la estructura, ha un ir enir en la relaci!n de determinaci!n que hace necesarias las dos partes para la superiencia de la sociedad capitalista en un estado moderno. A esta mutua dependencia, Althuser llamará sobredeterminaci!n %Althusser, 1-, p. 1). /a
1 Si bien los AIE suelen operar por ideología y los ARE, por violencia, también ay un componente violento en los AIE y uno ideol!gico en los ARE" 1
Díaz, Manuela
contradicci!n principal, entre capital trabajo, se encuentra en la estructura, es la base del sistema capitalista, pero está mediada por elementos de la superestructura$ el salario, que (arantiza esta relaci!n reproduce la fuerza de trabajo como tal, superie (racias a los alores instaurados que (arantizan que cada persona ocupe su rol social, en este sentido la escuela aparece como el Aparato 'deol!(ico más importante porque cumple el rol de la difusi!n de los alores capitalistas. Es importante remarcar que la realidad social, para Althusser, es una articulaci!n de distintas esferas %ideol!(ica, política, econ!mica) que tienen una incidencia relatia sobre las otras$ llama la atenci!n particularmente, en comparaci!n a autores anteriores temporalmente, la autonomía relatia que otor(a a la esfera política particularmente. Por su parte, Poulantzas, piensa en la autonomía del Estado la política, su acci!n sobre la economía las clases sociales. 0a a decir que el Estado es el factor que permite la cohesi!n la constituci!n de las clases dominantes la dispersi!n de las clases subalternas, es decir que el Estado como tal (arantiza la reproducci!n del sistema de las relaciones de dominaci!n sin que las clases subalternas, en este caso, puedan tomar consciencia de su identidad com+n de clase. 'ncluso, el rol del Estado es el de cohesionar a toda la sociedad, eliminando ilusoriamente las diferencias contradicciones de clase para poder reproducir el sistema capitalista. omo se e, este autor tambi"n abona a la idea de que la superestructura influe de manera ital a la estructura, aunque tomando al Estado de manera más aut!noma que su antecesor. oncepciones mar#istas anteriores a estos dos autores entienden al Estado como un mero instrumento político de la clase bur(uesa que le sire para dirimir sus asuntos, dejando de lado a las clases subalternas$ la clase dominante impone su ideolo(ía la presenta como el inter"s (eneral de toda la sociedad. Althusser a a incorporar acá otro concepto de ideolo(ía, que abarca mucho más. /a ideolo(ía, para "l, es la representaci!n ima(inaria %, por eso, distorsionada) de una relaci!n material, que en este caso sería la relaci!n entre capital trabajo. Ahora bien, encuentra una diferenciaci!n entre la ideolo(ía %con min+scula), las tendencias ideol!(icas que puede haber dentro de una ideolo(ía %en este caso podrían ser la tendencia proletaria la bur(uesa) la 'deolo(ía %con ma+scula). /a 'deolo(ía es lo más abarcatio, es el presente, lo cotidiano concreto, son prácticas íidas, habituales, rituales normadas, es material$ no ha nada, para este autor, que quede por fuera de la 'deolo(ía, no ha mundo social sin ella, es lo
#
Díaz, Manuela
que da la identidad a los sujetos %incluso plantea que las personas estamos interpeladas por el mundo social la 'deolo(ía a+n antes de nacer). Esta isi!n a más allá de la 'deolo(ía como mero instrumento de la bur(uesía, es lo que nos da identidad en cualquier sistema, más allá del capitalista, atraiesa a toda la sociedad. Poulantzas, partiendo del planteo de Althusser de su propia isi!n del Estado como cohesionador de la sociedad, se pre(unta c!mo ha una cohesi!n tan fuerte entre clases con intereses tan disímiles que las llea a ejercer la dominaci!n en conjunto. 2, así, plantea el concepto de 3loque de Poder, en donde re+ne a toda la clase dominante eidencia contradicciones disputas en su interior, e la hetero(eneidad de esa clase. 2 este bloque s!lo es posible (racias a la e#istencia del Estado, que act+a sobre la relaci!n entre clases para (arantizar la contradicci!n principal. %Poulantzas, 4556) 4)
7os" Aric! desarrolla el debate sobre la autonomía relatia del
Estado en un conte#to en que la ortodo#ia mar#ista en Am"rica /atina pensaba al mar#ismo importándolo directamente de la Europa del si(lo 8'8 a la Am"rica del si(lo 88. Abonaban a –“… la célebre tesis de El capital en la que Marx afirma que el país industrialmente más desarrollado no hace sino mostrar al menos desarrollado la imagen de su propio futuro, tesis que fue interpretada por los socialdemócratas ! no sólo por éstos" como la presencia en el desarrollo económico de una inexorable tendencia interna hacia la igualación de todos los países en términos de ni#eles de producti#idad, de desarrollo de las fuer$as producti#as ! de características morfológicas de sus estructuras económico sociales%&' %Aric!, 455, p. ) Este autor contempla la realidad social distinta el rol diferente que ocup! el Estado en el momento en que 9ar# desarroll! su teoría su isi!n sobre nuestro continente. 9ar# enunciaba que en Am"rica /atina no había habido reoluciones erdaderas porque no había habido reoluciones democrático: bur(uesas. Aric! retoma este pensamiento para analizar el iraje que realiza el padre del comunismo alrededor de 1;5, cuando comienza a realorizar los moimientos nacionalistas %que an más allá de las clases sociales) en 'rlanda en 'ndia, pero no adopta esta actitud frente a nuestra tierra. El autor ar(entino da una e#plicaci!n política otra más te!rica a esta actitud< políticamente, dice, 9ar#
$
Díaz, Manuela
eía en Am"rica /atina una relaci!n mu estrecha con =rancia, sobre todo por su inasi!n en 9"#ico, en la "poca de /uis 3onaparte, tendi! a calificar a todos los caudillos de la zona como bonapartistas %considerando la aloraci!n sumamente ne(atia que hace 9ar# de este personaje)$ te!ricamente, Aric! e que 9ar# no reconocía en Am"rica /atina naciones aut"nticas que tuieran una densidad social suficiente 4. Aric! entiende que esta importaci!n de esquemas no es acertada porque en nuestra re(i!n el papel del proletariado de la bur(uesía es distinto que en Europa. 0e tambi"n que ha una subestimaci!n de los moimientos populistas por parte de los te!ricos mar#istas de su "poca, quienes, si(uiendo a 9ar#, tildaban a aqu"llos de bonapartistas los consideraban procesos re(resios para el desarrollo de las fuerzas de producci!n la posterior reoluci!n del proletariado$ Aric! plantea que este tipo de e#periencias no se adec+an a lo que era la estructura partidaria europea, que por eso deben ser leídos en su particularidad. =inalmente, conclue en que el Estado cumpli! un papel productio en la sociedad latinoamericana, forj! una identidad, una cultura, tuo un rol mu distinto al de la sociedad europea porque su historia es tambi"n mu diferente. >on Althusser, Poulantzas 9iliband quienes utilizan preiamente el concepto de autonomía relatia del Estado para complejizar la metáfora del edificio de 9ar# que diide entre estructura superestructura, enuncia que la primera determina a la se(unda. /a idea de que el Estado tiene un mar(en de acci!n más amplio que lo que le marcan las relaciones sociales de producci!n permite hacer un análisis de nuestras sociedades más específico posibilita entender los fen!menos populistas de la se(unda (uerra pos(uerra, como el peronismo o el ar(uismo, de una manera más compleja$ la esfera política influe sobre la esfera econ!mica la econ!mica condiciona, a su ez, a la política. En un sentido similar, /aclau a a hablar sobre el fen!meno del populismo como una parcialidad de la sociedad que se identifica con el todo. Partiendo del funcionamiento de las demandas sociales, dirá que cuando una demanda de una determinada parte del pueblo no obtiene una respuesta institucional %estatal) tiende a percibirse equialente a otras demandas similares$ a medida que el tiempo transcurra sin una respuesta, cada ez serán más las demandas
# Recordemos %ue, para Mar&, el Estado se con'orma a partir de la 'amilia y la sociedad civil, de las relaciones materiales, y, por lo tanto, necesita una determinada densidad social para poder e&istir" (
Díaz, Manuela
equialentes que se a(lutinen que se opon(an, como demandas populares, a la detentaci!n del poder político. Es necesario, para este autor, una diferenciaci!n entre el pueblo el poder, una articulaci!n de las demandas que se consideran equialentes para que nazca el concepto de ?pueblo@ para que pueda e#istir el populismo. E#plica porqu"< '“(omo ese orden no puede absorber totalmente a la demanda, no consigue constituirse a sí mismo como una totalidad coherente% )a demanda requiere, sin embargo, alg*n tipo de totali$ación si es que se #a a cristali$ar en algo que sea inscribible como reclamo dentro del +sistema%&' %/aclau, 455;, p.). Así, el populismo iene a ser una parte que se identifica con la totalidad de las demandas lo(ra articular a la sociedad ciil a partir de este moimiento político. Por esto, /aclau dirá que el discurso de –“-odo el poder a los so#iets, o su equi#alente en otros discursos, sería un reclamo estrictamente populista%&' %/aclau, 455;, p.15). Buestro autor nota críticas hacia el populismo que no tienen en cuenta a la esfera política como a(ente con una autonomía relatia. Es así que, finalmente, concluirá< '“… la ra$ón populista .…/ rompe con dos formas de racionalidad que anuncian el fin de la política0 tanto con un e#ento re#olucionario total que, al pro#ocar la reconciliación plena de la sociedad consigo misma #ol#ería superfluo el momento político, como con una mera práctica gradualista que redu$ca la política a la administración%&' %/aclau, 455;, p.46)
Bi)liogra*ía: Althusser, /. %1-)< (ontradicción ! sobredeterminación notas para una in#estigación" en /a reoluci!n te!rica de 9ar#. 9"#ico, >i(lo 88'. Aric!, 7. %455)< 1ealidad ! falacia del eurocentrismo de Marx en 9ar# Am"rica /atina. 3uenos Aires, =ondo de ultura Econ!mica.
$ A%uí se utilizar) el término *pueblo+ en el sentido de una parte de la sociedad %ue %uiere identicarse con su totalidad, di'erenci)ndolo de *plebs+, %ue retomamos también de la terminología utilizada por el autor, y %ue se reere a los menos privilegiados" -
Díaz, Manuela
3ressano, . =reibrun, B. %4556)< El itinerario de 2lthusser, la ruptura como creación en ThCaites *e, 9., Estado mar#ismo, un si(lo medio de debates. 3uenos Aires, Prometeo. /aclau, E. %455;)< )a ra$ón populista. 9"#ico, =ondo de ultura Econ!mica. Poulantzas, B. %4556)< 3oder político ! clases sociales en el Estado capitalista. 9"#ico, >i(lo 88'. ThCaites *e, 9. %4556)< (omple4idades de una parado4a polémica, estructuralismo #ersus instrumentalismo en ThCaites *e, 9., Estado mar#ismo, un si(lo medio de debates. 3uenos Aires, Prometeo.
.