TAO -Lao Tse-
El Tao Te King es el libro más importante del pensamiento taoísta. Fue escrito según la literatura alrededor del año 600 a. c. y su autor es Lao Tse “viejo maestro”. ma estro”. Contiene algunas verdades universales que han sido reconocidas también en otras filosofías, religiosas o seculares. Los principios y conceptos centrales son:
El Tao abarca los principios de ínfimas cosas. No tiene forma ni sonido, es incorpóreo, eterno y permanente. Considero que este principio no puede explicarse con palabras.
El concepto de “retorno”, lo entiendo no como regreso al pasado, si no como
reducción/retirada de sí mismo. Este concepto es ilustrado por el texto del capítulo 48: el aprendizaje consiste en aumentar día a día el patrimonio propio; la práctica del Tao consiste en sustraer día a día. La nada es la sustancia del Tao y el Ser es su función. Para alcanzar el dominio del Tao es necesario primero reconciliarse con la inmovilidad, no ocuparse de cosas mundanas, dejar de lado el intelecto, el conocimiento, el intelecto, el egocentrismo. Para el Taoísmo es central la búsqueda del vacío.
Para describir esta literatura y dar mi comentario comenzare con la parte que considero la principal: “ El
Tao que puede expresarse con palabras, palabras, no es el Tao eterno. El nombre que puede ser nombrado, nombrado, no es el el nombre eterno. eterno. ”
Esta fue una de las frases que me gustaron ya ya que explica como el Tao no puede ser encasillado en una palabra o un concepto. Dijo el maestro Chuang que “si alguien pregunta sobre el Tao y otro le responde, ninguno de ellos lo conoce” “Sin -Nombre
es el origen del Cielo-y- Tierra.”
“Sin nombre” es el Ser -en-Sí-en-Sí- mismo, todavía no manifestado. Es la fase del “No -Ser” o la “Nada Primordial” de donde surgirá todo. La expresión “Cielo-Tierra” significa cosmos o universo . El Tao en su fase de No-Ser es el
origen del universo.
Con-Nombre es Madre de las diez mil cosas. “Con nombre” es el Ser que se manifiesta, y es inmanente en los seres que de Él emanan. En el texto del Tao, cuando se habla de las “diez mil cosas” se r efiere
a todas las cosas que existen. El Tao en su fase de Ser es la Madre de los seres individuales o, en otras palabras, el Ser es origen de la individuación. La ausencia de deseos permite contemplar su esencia interna.
Sin deseos se puede ver la esencia interna del Tao. El hombre libre de apegos y pasiones (el sabio taoísta) puede percibir el maravilloso misterio del Tao, es decir, puede captar el misterio del “No-Ser” (en el budismo esto es alcanzar el Nirvana). Con deseos sólo se puede ver su apariencia externa
Con deseos, sólo se puede ver la apariencia externa del Tao. El hombre sometido a sus apegos y pasiones no podrá ver más allá de lo externo, de lo aparente, de las formas: el Ser manifiesto. El nivel de conciencia determina el nivel de percepción. Ambos son una misma realidad y fluyen de la misma fuente, sólo se diferencian en nombre. Ambos son misterios y son la puerta hacia lo maravilloso
El No-Ser y el Ser son formas distintas de percibir una misma realidad. William Shakespeare pone en boca de su Hamlet la expresión « to be or not to be that is the cuestion» (Ser o no ser, esa es la cuestión) que refleja la postura general de la filosofía occidental, ya que los occidentales suelen ver un dilema entre ambos. En cambio, en las filosofías orientales como el taoísmo, por ejemplo, Ser y No-Ser son dos aspectos de lo real y no se contraponen. Otras de las ideas centrales son:
El uso de la fuerza solo atrae la fuerza La riqueza no alimenta el espíritu El ansia de poseer sin límite ciega al ser humano y lo convierte en un moustro codiciosos y violento. La preocupación solo por sí mismo, y el darse importancia son vanos y autodestructivos. La victoria en la guerra no es gloriosa. No debe celebrarse, si no ser causa de duelo, porque surge de la devastación.
El verdadero sabio concede poca importancia a su propia sabiduría, porque cuanto más conoce más se da cuenta de lo limitado de su conocimiento. La glorificación de la riqueza, el poder y la belleza atraen crimen, la envidia y la vergüenza. Las cualidades de flexibilidad y suavidad son habitualmente superiores a las de rigidez y fuerza. El contraste de los opuestos (la diferencia entre lo masculino y lo femenino, luz y oscuridad, fuerte y débil, etc.) es lo que permite entender y apreciar el universo. Es el Yin YANG.
Con esto la conclusión a mi parecer se simplifica a que el Tao refiere las leyes que nos rigen como individuos, para establecer la armonía en la tierra, y ayudar al equilibrio de la misma, y como consecuencia de nuestro propio ser.
INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL ESCUELA NACIONAL DE MEDICINA Y HOMEOPATIA ESPECIALIDAD ACUPUNTURA HUMANA
“COSMOVITRAL”
FILOSOFIA DE LA MEDICINA TRADICIONAL CHINA
DR. KRISOFORO ORDOÑES
ALUMNA: NORA INGRID MUÑOZ GARCIA MEDICO CIRUJANO Y HOMEOPATA
FECHA: Febrero 2011