Ricardo Tafoya Ledesma
Wittgenstein y el solipsismo en el
Tractatus
El solips solipsism ismo o es la catego categoría ría princi principal pal que, que, desde desde mi perspe perspecti ctiva, va, propor proporcio ciona na un elemento fundamental en la construcción de una ética desarrollada, por parte de este autor, a partir del mundo real, cotidiano. Despojar al “yo” pensante del estatus ontológico que haía ocupado dentro del mundo, desde Descartes hasta !ant, es un desafío sólo franqueale desde el an"lisis lógico y sistem"tico del lenguaje. #ittge #itt gens nste tein in pien piensa sa el “yo” “yo” como como lími límite te del del mund mundo o $Trac Tracta tatu tus s %.&' %.&'() (),, capa capa* * de fundamentar el lenguaje. +ero para que este yo pudiera funcionar como fundamento es necesario necesario despojarlo de sus cualidades cualidades empíricas, empíricas, psicológicas psicológicas.. +ues un yo psicológic psicológico o es un hecho m"s entre la totalidad de los hechos que acaecen, siendo filosóficamente irrelevante. El yo que aparece en el mundo es una relación de significados en este sentido, es un ente compuesto, incapa* de funcionar como causa -nica del lenguaje. Proyección y significado. El mundo es la totalidad de los hechos que acecen $Ibid., $ Ibid., (.(). +ero este estado de cosas determina tamién las posiilidades en el espacio lógico, de lo que es y lo que no es, y de todo aquello que es posile que, adem"s, solo puede epresarse en el lenguaje. /sí, se convierte en una relación icondicional0 el mundo se constituye dentro de los límites del lenguaje y el lenguaje solo refiere al mundo, por medio de proposiciones. +ero el sujeto que aparece en el lenguaje no es el verdadero sujeto en tanto que aparece de facto, en su relación relación con otros hechos, hechos, por tanto es compuest compuesto, o, de tal forma que el sujeto al que apela #ittgenstein es un sujeto trascendental, no a las simples figuraciones de éste $cuerpo, vo*, mente, etc.) 1a proyección es el significado que se da a los signos en el mundo. +or medio de la representación, a través de los nomres, se configuran los ojetos. +ara que un signo proposicional se proyecte se necesita que los ojetos estén dispuestos de la misma forma en que se encuen encuentra tran n dispue dispuesto stos s en las unidades unidades simple simples s dentro dentro del propio propio signo signo proposicional, y que el ojeto sea representado por un nomre $cfr. Ibid., 2.3(, Ibid., 2.3(, 2.33). 1a necesidad de nomrar no tiene m"s ojeto, en esta parte del Tractatus, que Tractatus, que la finalidad de estalecer relaciones lógicas respecto de otros ojetos, por necesidad de distinción. +ero, 4quién estalece dichas relaciones lógicas5, 4quién otorga el significado a los signos5 no hay m"s repuesta0 nosotros. Del sujeto empírico al sujeto trascendental. El significado es dado a los signos seg-n esquemas de acuerdo o, mejor dicho, por sistemas sistemas de convención convención entre sujetos empíricos, empíricos, siendo siendo la voluntad voluntad la que se encuentra encuentra en el fondo de toda la composición de sentido como totalidad del lenguaje. 1a forma de acceder al sujeto trascendental es por medio de la voluntad, idea que #ittgenstein hereda
de 6chopenhauer $7éase, 6chopenhauer El mundo como voluntad y representación) “el mundo es mi representación”. El mundo es mi mundo, pero “los límites de mi lenguaje significan los límites de mi mundo” $Ibid., %.&). Desde este punto de vista, la totalidad del lenguaje estaría constituido por una voluntad trascendental. 1a voluntad se erige como condición de posiilidad del lenguaje y, en este sentido del mundo. El solipsismo. 8o hay nada en la eperiencia del sujeto que permita inferir que es un sujeto el que eperimenta, podríamos decir parafraseando el par"grafo %.&22 del Tractatus. El yo no es un ojeto, y en el mismo sentido, tampoco eisten hechos a nuestro alrededor que puedan dar cuenta de que el yo apare*ca representado. 9uando #ittgenstein afirma que los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo, se refiere al lenguaje que es entendido por mí y en el cual se generan mis proposiciones respecto del mundo de tal forma que la distinción entre el sujeto y el mundo se vuelve imperceptile, m"s a-n, desaparece. +or esta ra*ón, dir" #ittgenstein, que finalmente el solipsismo es compatile con el realismo m"s radical, pues el espacio del sujeto se reduce de tal forma que se vuelve uno con el mundo sujeto y realidad se mueven en una dimensión coordinada $Ibid., %.&2:%.&').